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Murió Gerardo Sofovich, el fanático de Boca que “amaba” a River
El productor televisivo falleció, a los 77 años, a raíz de una hemorragia digestiva; su amor por el xeneize, su respeto por los millonarios y la anécdota que su hermano siempre le agradeció
A los 77 años, Gerardo Sofovich, productor y conductor televisivo, murió esta mañana por una hemorragia digestiva. Sus restos serán velados en la Legislatura porteña.
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Caminaba por los pasillos de los canales de televisión con una confianza que pocos tenían. Se sentía cómodo, sabía lo que hacía. Era cabrón, es cierto, pero conocía como pocos los secretos para crear y realizar productos exitosos. Fue un hombre que vivió por la televisión y el teatro. Los medios de comunicación y entretenimiento eran su primera casa. Pero, además, Gerardo Sofovich era un fanático del fútbol, un ambiente al que siempre estuvo cerca de entrar como dirigente, aunque siempre terminó apreciando desde afuera. Era fanático de Boca, pero también amaba a River. Un hincha pasional, como todo lo que hacía.
En un entrevista con el diario Olé, en 2007, Sofovich contó cómo llegó a ser un xeneize más. "No (fue) por (herencia de) familia, porque mi papá no era muy futbolero y era de Chacarita. Al primer partido que vi en mi vida me llevó mi viejo a la cancha de River a ver Chaca, pero no pudo conmigo. Lo que pasa es que, en esa época, los chicos se hacían hinchas del campeón, y en el 43 y 44 campeonaba Boca, por suerte. Es el cuadro que ha hecho más feliz a su gente", narraba.
Yo quiero a River, amo a River. Porque si no existiera, Boca no sería lo grande que es. Es como el bien el mal
Pero lo que su padre no pudo lograr con él, el Ruso -como le decían muchos en el ambiente- lo hizo con su hijo y con su hermano. Eso sí: este último, de una forma un poco más radical. "Uno de los partidos que más recuerdo fue el que llevé por primera vez a mi hijo a la cancha, quien sí heredó mis colores. Al igual que Huguito, mi hermano, al que hice de Boca a piñas. Teníamos dos años de diferencia y un día vino del colegio y me dijo: ‘Yo soy de River’. Y le contesté: ‘No, sos de Boca’. Y lo cagué a trompadas: toda la vida me agradeció porque así pudo ser feliz", confesaba en la misma entrevista.
Sofovich no era un hincha de Boca "tradicional". Pese a las diferencias "lógicas", él reconocía tener un cariño especial por el eterno rival. "Yo quiero a River, amo a River. Porque si no existiera, Boca no sería lo grande que es. Es como el bien el mal. River cierra la ecuación. Yo, cuando juega River una final internacional, quiero que gane", aseguraba.
Siempre tuvo un diálogo fluído con Mauricio Macri, quien le ofreció ser candidato a presidente de Boca: "Sería más quilombo, y ya tengo bastante. Pero la hinchada me quiere", se justificaba.
-¿Sos de apostar con los hinchas de River?-, le preguntó el periodista.
-Tengo una apuesta con varios amigos todos los torneos "a mejor colocación", por 1.000 dólares. Con otro juego por un perfume muy caro. Y he ganado varios…-, respondió él.
Los estudios de televisión van a extrañar su talento. Las tribunas de la Bombonera, su amor. Y también las de River, ¿por qué no?
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