Encontrá resultados de fútbol en vivo, los próximos partidos, las tablas de posiciones, y todas las estadísticas de los principales torneos del mundo.
Messi vs. Cristiano: el partido que hay que ver
MADRID.- Es el partido que hay que ver. Lionel Messi y Cristiano Ronaldo co-protagonizarán hoy en el Camp Nou otra versión del clásico mundial. Gracias a ellos, Barcelona y Real Madrid han expandido su influencia. Han dominado a Europa y han conquistado al mundo. Juegan en la misma liga desde 2009. Cristiano llegó al Madrid para frenar al Barça de Messi y Pep. Hace diez años que se reparten el Balón de Oro. El brasileño Kaká, por su 2007, fue el último en ganarlo antes de esta rivalidad que merece una serie documental. Guardiola, Mourinho, Neymar, Casillas, Xavi y Xabi han pasado como valiosos actores complementarios de la saga. Esta tarde se despedirá Iniesta, otro prócer de la historia. No importa. Sin Leo ni CR7 no hay película. Ganaron todo y se han hecho mejores uno al otro. Cuando estos dos fuera de serie dejen de competirse, este duelo volverá a ser el clásico español y punto.
Messi y Cristiano también se han reinventado durante esta década. Podemos encontrar algunos puntos de contacto entre sus primeras versiones: delanteros, los costados como punto de partida, los últimos 30 metros como zona de influencia, la explosión, la gambeta y el gol. El diestro portugués con mejor juego aéreo y remate de larga distancia. El zurdo argentino con más recursos en espacios reducidos y mejor finalización dentro del área. Con matices, podían compartir un molde. Hoy no. Son muy diferentes. ¿Comparables? Creo que no. El periodista deportivo mexicano Ricardo Sánchez (@ricardosan9310) argumentó a través de un hilo en Twitter. "Hay 5 principales roles en el campo que Messi domina a la perfección: distribuye, genera, desequilibra, da pases gol y marca goles. Cristiano solo domina una de esas facetas: goleador".
La empresa Opta refuerza este concepto con datos duros de la Liga. Messi es líder en goles, pases gol, pases clave (el previo al pase gol), pases en el último tercio del campo, gambetas, oportunidades creadas. Cristiano es segundo entre los goleadores y no aparece en el top ten de ninguna otra categoría. Además de los 32 goles propios, Leo ha dado el 19 % de los pases gol y ha creado el 22 % de las chances de su equipo. CR7 ha marcado 24, ha facilitado el 9 % de los pases gol y ha creado el 7,5 % de las oportunidades. No minimizo a Ronaldo. Es una bestia, un goleador descomunal. Pero descuella en una sola especialidad. Messi domina todas las dimensiones. Mohamed Salah rompe números en Liverpool. Para Leo es rutina. La rutina de lo extraordinario.
Cristiano supera a Messi en el descanso y en la gestión de su temporada. Zidane lo convenció de faltar a algunos partidos para llegar fresco y lúcido al mes de abril, clave para la definición de las competiciones. ZZ Top lo ha liberado de partidos lejos del Bernabeu entre febrero y mayo. En 2017 no viajó a Gijón, a Coruña y Cornellá, la cancha de Espanyol. Este año, dio ausente en Las Palmas, Málaga y de nuevo Cornellá. Messi ha jugado un 16 por ciento más que Cristiano en las últimas dos temporadas con un 90,4 % de presencias: 103 de 114 oficiales. Se ha perdido un solo partido de Liga 17-18 por el nacimiento de Ciro, su tercer hijo. Acumula 2793 minutos, el 91,3 % de lo que ha disputado Barcelona. Tampoco había rotado en el campeonato anterior. Sus cuatro ausencias habían sido por lesión y suspensión. CR7 no llega al 75 % de presentismo en los recientes dos años (87 de 117). Suspendido en la Supercopa de España, ha jugado 25 partidos del campeonato con 2185 minutos, el 71,4% del total del Madrid (estadísticas de Opta). Apenas participa de la Copa del Rey (2 de 12 entre 2016 y 2018) mientras Leo tampoco descansa allí con 13 de 18 presencias durante el mismo período de ese torneo.
El desgaste de Messi es mucho mayor por su influencia en todos los aspectos del juego. Sus caminatas no limitan su participación global. Forman parte de su plan maestro, que incluye una estupenda sociedad con Luis Suárez. Cristiano ejecuta con maestría la parte final del plan pergeñado por sus compañeros Carvajal, Marcelo, Modric, Isco y Kroos. Su hábitat es el área. Marcó 24 goles en la Liga, todos dentro de la caja. Lleva 15 en Champions , la mayoría con registro de goleador. Leo es el Michael Jordan de 1988. Lo hace todo y bien. CR 7 es el MJ de 1998. Más específico, igual de letal. El mayor descanso se nota en este tramo del año. El 10 llega con lo justo al bimestre abril-mayo. El 7 está reluciente. Hace tres años que Barcelona se queda afuera de la Champions en los partidos de abril. Messi no fue factor ni ante Atlético de Madrid, ni ante Juventus, ni ante Roma. Cansado y dolorido, no apareció. El equipo no salió al rescate. El Madrid ha superado esta instancia con gran protagonismo de su estrella. Cristiano facturó por triplicado ante Wolfsburgo en 2016, le metió cinco al Bayern en 2017 y tres a Juventus este año. 11 a 0 es el saldo de goles respecto de Messi en los cuartos de final. Cuando algo se repite con frecuencia, podemos hablar de cualquier cosa menos de azar. No tengo dudas. Cristiano llega mejor. Leo es el mejor. Hoy, otro capítulo. Hasta que esta rivalidad acabe, es el partido para ver.