Los torneos cortos son historia, pero lo que viene es más viejo aún

El fin de semana despidió los torneos cortos de primera, pero no tanto. Algo de su esencia sobrevivirá en la próxima temporada. Lejos quedaron los proyectos de megatorneos con 38 o 40 equipos cocinados hace un año al calor de la conmoción que había provocado el descenso de River. Finalmente, la AFA, sin presiones políticas de por medio, fue mucho más conservadora. Hizo una movida gatopardista: cambiar algo para que en el fondo nada cambie mucho. Habrá un formato vintage , bastante similar al que le permitió consagrarse al Newell's de Bielsa en 1991 ante Boca. Caduca la denominación Apertura y Clausura, reemplazada por torneo Inicial y Final.

La principal modificación es que no habrá un campeón cada seis meses, sino que será uno por año, en una final en cancha neutral entre el ganador del Inicial y el Final, con alargue y penales en caso de empate. Sin ventaja deportiva para el equipo que haya obtenido más puntos en la temporada, lo cual mantiene un margen abierto a incongruencias ya vistas. Puede repetirse lo de 2008/09, cuando Lanús fue el mejor sin haber conquistado el Apertura ni el Clausura. Una de las innovaciones más interesante para los clubes es que por primera vez habrá un premio económico para el campeón, en un monto aún no precisado.

El triunfador en diciembre del Inicial también habrá conseguido la clasificación para la Copa Libertadores, a la que podrá dedicarse en detrimento del torneo Final porque ya tiene asegurada la final doméstica de junio.

Veintiún años y sus correspondientes 42 campeonatos cortos dejaron un nuevo mapa del fútbol argentino en el profesionalismo. El primero, el Apertura 91, tuvo un técnico campeón que a su vez era debutante en la función: Passarella en River. Con el módulo semestral, River fue el que más títulos obtuvo (12), seguido por Boca (9) y Vélez (7). También el único que encadenó un tricampeonato, con Ramón Díaz de entrenador en 1996/97.

Arsenal fue el último en aprovechar una serie de resultados positivos para ser campeón por primera vez en la historia. Le alcanzaron 38 puntos, la cosecha más baja desde que Lanús se quedó con el Apertura 2007 con igual cantidad de unidades.

Además de Lanús y Arsenal, el tercer equipo que supo de una gloria nunca antes vivida fue Banfield, en el Clausura 09, aunque hace 48 horas quedó marcado por un récord negativo: nunca un club había descendido con una campaña de campeón dentro de las tres temporadas que se computan para establecer los promedios.

Los certámenes cortos marcaron la expansión de Vélez, que sólo tenía el Nacional 1968 y desde la asunción de Bianchi en 1993 se sentó competitivamente a la mesa de los grandes con siete coronas. Serán recordados por Racing porque en 2001 le sirvieron para cortar una sequía de 35 años sin festejos. Otro que reverdeció laureles después de 25 años fue Argentinos, en 2010. Estudiantes volvió a dar en 2006 la vuelta olímpica que extrañaba desde 1983, y repitió en 2010.

El saldo no es muy positivo para Independiente (títulos en 1994 y 2002) y San Lorenzo (1995, 2001 y 07). Colón fue muchas veces un candidato que nunca pasó de la insinuación y para Newell's fue un período en el que aprovechó, con las dos conquistas de 1992 y 2004, para superar a Rosario Central en el historial de títulos (cinco contra cuatro).

Suena el réquiem para los Apertura y Clausura, que también se llevan las promociones. Adiós a los torneos cortos, pero no se les da la bienvenida a los largos, sino a un híbrido que oscila entre el semilargo y el corto extendido. Galimatías del fútbol argentino.

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