La rutina de Bayern Munich: le ganó a Inter en el debut en la etapa de grupos de la Champions League y espera a Barcelona y a Robert Lewandowski

Implacable, Bayern Munich renovó su hambre copera este miércoles y pisó fuerte en el debut en la Champions League 2022/2023. Le ganó por 2-0 a Inter, de Milán, en el estadio Giuseppe Meazza, en un partido correspondiente al grupo C que también integran Barcelona, de España, y Viktoria Plzen, de República Checa.

Con Lautaro Martínez desde el inicio y Joaquín Correa ingresando desde el banco en el conjunto italiano, el encuentro se planteó en el primer tiempo con los alemanes trabajando en la presión y la recuperación para buscar los espacios y acelerar rumbo al arco del camerunés André Onana. El guardameta estuvo sólido para controlar los primeros siete intentos, todos de media distancia, mientras sus compañeros se replegaban para limitar las posibilidades de asociación de sus rivales en el último tramo del campo de juego. A los 22 había sido la más difícil, sacando al córner con un máster en reflejos un fuerte remate de primera de Thomas Muller, asistido adentro del área por Sadio Mané.

Pero a los 25, Bayern Munich cambió la estrategia y golpeó. Sorprendió a la defensa local con un pase largo desde la mitad de la cancha que encontró desprotegido a Onana y muy lúcido a Lorey Sané, que controló fabulosamente el balón con el pecho y la pierna izquierda, a la carrera, eludió al arquero al encararlo y definió de derecha, sin que los dos defensores que llegaban pudieran evitar el 1-0. El gol abrió el marcador y generó los espacios, como para darle más trabajo al africano, que terminó esa etapa revolcándose de un lado a otro frente a los disparos cada vez más cercanos y repetidos.

El 1-0 de Bayern Munich (Sané)

En el primer avance de Inter, a los seis minutos y tras sufrir los dos primeros peligrosos intentos desde afuera del área de los visitantes, Martínez había estado muy cerca de anotar. Picó al vacío, ganó la posición por derecha y remató cruzado, con poco ángulo. La pelota salió junto al segundo palo. Su equipo tenía esa apuesta: esperar y salir rápido de contra. Podía poco. Llegaba con demasiado esfuerzo. Nunca encontraría el festejo.

La segunda etapa tuvo el mismo recorte, aunque con un Inter con mayores obligaciones. Por eso se adelantó un poco más y Bayern Munich se tomó algunas licencias, por momentos. A los 5 minutos, Edin Dzeko encontró una pelota suelta en el área y Manuel Neuer le quitó la ilusión al bosnio al estar parado donde fue la resolución. Fue casi el mayor susto del arquero visitante, además de una acción en la que Lautaro lo presionó al salir con los pies y estuvo dubitativo para despejar.

Poco después, Bayern Munich aceleró. Primero, Onana salvó con la ayuda del palo, en una acción que incluyó un rebote previo. Enseguida, Danilo D’Ambrosio quedó desacomodado y convirtió en contra ante una combinación fantástica entre Sané y Koman adentro del área que dejó a todos mirando sin reacción. El “tiki-tiki”, con ayuda, terminó en el 2-0. Y en la acción siguiente, el arquero le sacó con el pie derecho el tercero a Sadio Mané, que remató cruzado.

El 2-0 de Bayern Munich, en contra

Entonces, uno se enfocó en no ser goleado y el otro, en sostener el triunfo dándole minutos a algunos suplentes. Correa tuvo el descuento a siete del final, pero remató increíblemente afuera una pelota que le quedó servida adentro del área luego de una mala salida de Hernández, cuyo pase rebotó en Martínez y se convirtió en una habilitación. Sorprendido, en solitario, Joaquín le erró al arco. Ya nada cambiaría. Y el juego se cerró con Lautaro fastidioso, discutiendo y peleándose con algunos rivales.

Ya sin Robert Lewandovski, al que tendrán enfrente la semana próxima en la segunda fecha reconvertido en artillero implacable de Barcelona, los alemanes no tienen un faro de ese calibre, pero el juego asociado suple la falta de ese olfato goleador. Fútbol, amor propio, despliegue y el arco en la mira para seguir ganando. Fueron 21 remates. La diferencia pudo ser muy superior. El arquero de Inter fue clave para evitarla, pero no para cambiarle el rumbo a la derrota.

El resumen de Inter - Bayern Munich

Las cuatro veces que Bayern Munich visitó a Inter por competiciones europeas, los bávaros se volvieron a casa con una victoria. Y no pierden con un equipo italiano por Champions League desde 2011, cuando cayeron ante el propio conjunto milanés. Desde entonces, acumulan una serie de nueve éxitos y dos empates en sus enfrentamientos contra cualquiera de los conjuntos del Calcio.

Los dos primeros de cada zona avanzarán a los octavos de final, que se disputarán entre febrero y marzo del próximo año. El tercero se sumará a la rueda de la dieciseisavos de final de la Europa League. Bayern Munich picó en punta junto a Barcelona, su próximo rival, en el grupo que se presume como el más fuerte.

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