“Emigrados”: la lista de figuras que convertiría a la selección de fútbol de Francia en una potencia casi imbatible

Futbolistas destacados en las mejores ligas del mundo, como el arquero Edouard Mendy y el defensor Kalidou Koulibaly (ambos, de Chelsea, de Inglaterra) jugaron por Senegal en Qatar. Sofiane Boufal actuó por Marruecos. Aymeric Laporte, que juega en Manchester City, integró el plantel de España. Y el experimentado Andre Ayew defiende los colores de Ghana. Todos podían ser jugadores de la selección de Francia, porque en ese país nacieron.

Campeón del Mundial de Rusia en 2018 y subcampeón en Qatar 2022, el seleccionado bleu se transformaría en un rival aun más difícil para el resto si no tuviera lesionados, como sí los tuvo en antes de y durante el torneo celebrado en Medio Oriente, y si estuviera reforzado con las estrellas que juegan por otras naciones.

En Qatar, 38 futbolistas franceses jugaron en selecciones de países de donde llegaron sus padres como emigrantes. El plantel de Túnez tuvo a diez jugadores nacidos en Francia; el de Senegal, nueve; el de Camerún, ocho; el de Ghana, cuatro, y hubo un francés nativo en cada uno de los siguientes equipos: España, en Alemania, en Portugal y en Qatar.

El conjunto de la Federación Francesa de Fútbol llegó a la final de Qatar 2022 a pesar de que el plantel se redujo por lesiones de varios jugadores importantes. Karim Benzema, ganador del Balón de Oro el año pasado y figura del Real Madrid, no fue de la partida porque se resintió de una lesión muscular en un isquiotibial pocos días antes del Mundial, y engrosó una lista de ausencias que había abierto el mediocampista de Juventus Paul Pogba, que no superó una dolencia en una rodilla operada. Además, la estrella de Chelsea N’Golo Kante se perdió el Mundial por una lesión en los isquiotibiales, y también lo hicieron el zaguero central Presnel Kimpembe, de Paris Saint-Germain, y Christopher Nkunku, que juega en Leipzig, de Alemania.

Pero la nómina de futbolistas rutilantes disponibles para la selección de Francia sería mucho más nutrida si grandes jugadores no hubieran elegido defender los colores de las patrias de sus padres. Uno es el capitán de Senegal, Kalidou Koulibaly, que milita en Chelsea, anotó el segundo gol a Ecuador que le permitió al cuadro africano pasar a los octavos de final. El defensor nació en Saint-Dié-des-Vosges y jugó en divisiones inferiores en Saint-Dié y Metz, de Francia.

Los padres de Koulibaly llegaron como migrantes a Francia Senegal en busca de una vida mejor, y se movieron en una comunidad multicultural. “Cuando crecés en este entorno, ves a todos como tus hermanos. Somos negros, blancos, árabes, africanos, musulmanes, cristianos, sí, pero todos somos franceses. Todos tenemos hambre, así que vayamos a comer juntos la comida turca. O esta noche, vayamos todos a mi casa y comamos comida senegalesa. Sí, tenemos diferencias, pero todos somos iguales” dijo Koulibaly en declaraciones a El Español.

El defensor fue adquirido en 2022 por Chelsea y se consolidó como titular en el conjunto londinense. Antes se había destacado en Napoli, en el que jugó ocho temporadas, ganó una vez la Supercopa de Italia y otra la Copa de Italia y recibió el premio al mejor defensor de la Serie A en 2019.

Edouard Mendy nació cerca de Le Havre, Normandía, y a los 10 años se incorporó a Le Havre Athletic Club, en el que se formaría. A los 19 años firmó con Cherbourg, de la tercera categoría francesa, y rápidamente se consolidó como titular. Jugó durante tres años hasta que su equipo descendió de categoría y él se quedó sin club. Pasó un año sin jugar y estaba a punto de abandonar el fútbol cuando firmó su primer contrato profesional, con Olympique, de Marsella. Lo probaron y quedó como cuarto arquero. A los 24 años pasó a Reims y una temporada después se convirtió en titular y ascendió a la Ligue 1. En 2019 llegó a Rennes y en agosto de 2020 fue adquirido por Chelsea a cambio de más de 24.000.000 de euros.

En 2016 jugó unos pocos partidos no oficiales en la selección de Guinea Bissau, país donde nació su padre, que por esos años transitaba una dura enfermedad. Pero en 2017, cuando Edouard fue convocado para disputar la Copa Africana de Naciones, rechazó la convocatoria y decidió jugar por Senegal, el país nativo de su madre, antes de emigrar a Montvilliers, de Francia. En 2021 ganó en Chelsea la Champions League y en 2022 se consagró campeón de la Copa de África por Senegal.

Estrellas como Mendy y Koulibaly podrían ser jugadores de Francia y reforzar aun más a un equipo que es excelente si hubiesen renunciado a la influencia familiar y abrazado la nacionalidad de su país de nacimiento.

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