Déficit de marcadores de punta: el puesto que más cuesta cubrir en el fútbol argentino

Salvo Defensa y Justicia, que tanto con Holan como con Beccacece utilizó una línea de tres zagueros y a Rivero y a Delgado como carrileros, el resto de los 29 equipos del último torneo de primera división se paró con una línea de cuatro, con marcadores laterales. Los directores técnicos optaron por esta alternativa de cubrir las bandas, aunque paradójicamente se trate del puesto en el que tienen menos variantes y especialistas acreditados, de acuerdo con un relevamiento que hizo LA NACION entre directores técnicos y encargados del fútbol amateur. El campeón Boca es una muestra de esta inestabilidad: empezó con Peruzzi, alternó con Silva y Fabra, y terminó con Jara y Silva. Y con todos ellos nunca hubo satisfacción plena, siempre se los señaló por alguna deficiencia puntual.

Lo que escasea en la categoría superior es una consecuencia directa de las dificultades para promover desde las divisiones inferiores. Y así se llega a la punta de la pirámide, al seleccionado argentino, donde se refleja el limitado abanico para elegir. Javier Zanetti (récord de presencias con la camiseta albiceleste), Juan Pablo Sorin, Pablo Zabaleta y Marcos Rojo dejaron huella en las últimas décadas. Se afianzaron no sólo por sus condiciones, sino porque también encontraron poca competencia, colegas con aptitudes para quitarles el puesto. Cuando alguno de ellos tenía un mal momento, las preguntas del hincha surgían instantáneamente: “¿No hay otro? ¿Por qué no prueba con Fulano o Mengano?” El inmovilismo de los entrenadores respondía a la poca confianza que les provocaban otras opciones. Es un rubro en el que nuestro fútbol sigue muy rezagado con respecto a Brasil, y en el que España y Alemania también le sacaron ventaja. Es un tema que merece abordarse con seriedad, no con la liviandad de Diego Maradona cuando lo crucificó a Dani Alves: “Está en una posición de la cancha en la que no se juega al fútbol, es un boludo. Tiró 28 centros y acertó cuatro. Cuatro era Cafú, Maicon, pobrecito…”

Excepto Hugo Tocalli, coordinador de las inferiores de San Lorenzo, el resto de los consultados por este diario coinciden en que encontrar laterales obliga a una búsqueda muy fina y a la inventiva. Hay que escarbar y usar la imaginación. “No noto que falten laterales. En San Lorenzo, las categorías están cubiertas por buenos marcadores de punta. En primera se está consolidando el chico (Gabriel) Rojas. Al seleccionado Sub 20 había ido un 4 muy interesante, Emiliano Purita, que no quedó por una lesión. Sé que algunos clubes tienen carencias en ese puesto, pero eso no pasa en San Lorenzo. Otra cosa es en el seleccionado, ahí cuesta encontrar laterales de primer nivel”, expresó Tocalli, cuyo club, San Lorenzo, acaba de contratar al ex Rosario Central Víctor Salazar, ya que Corujo no hizo olvidar a Buffarini.

Enrique Ezequiel Borrelli, encargado del fútbol amateur de Argentinos y con una experiencia de 26 años en la función en tres clubes, tiene una estadística: “De cada 100 chicos que vienen a probarse, menos del 5 por ciento son laterales. Es mi estadística de los últimos 10 años. Evidentemente no hay una vocación del niño por ser lateral. De todos modos, creo que son camadas. A lo mejor hay categorías en las que tenés dos de buen nivel en el mismo puesto. Es el caso de la primera de Argentinos, que tiene riqueza en el lateral izquierdo, con Benítez, Piovi y Enzo Ibáñez, y hubo que contratar uno derecho (Sandoval) por la lesión de Kevin MacAllister, que tiene futuro de selección”.

Tras trabajar seis años en las inferiores de Boca, Jorge Raffo acaba de asumir la dirección de la Academia del Shakthar Donetsk de Ucrania: “Históricamente, la de marcador de punta fue una posición adaptada, de chicos que llegan como volantes o wines. Nos podemos remontar a los casos de Cacho Córdoba o Tarantini. En el mundo cuesta encontrar laterales de alto vuelo. Las tácticas actuales obligan a que los marcadores pasen mucho al ataque porque se dejó de jugar con extremos. Siempre es más fácil enseñar a defender que a atacar. Nosotros, el proceso significativo que tuvimos en Boca fue en la categoría 2000, con Weingandt y Grandis de titulares en el seleccionado Sub 17”.

En River toma la palabra Fernando Guarini, presidente del fútbol amateur: “Nosotros, de inferiores, tenemos a Luis Olivera en el plantel de primera. Hay otros chicos que están haciendo sus primeros pasos en reserva, pero falta para lograr ese lateral del estilo de River, el que tiene marca, proyección, llega, tira un centro, tiene buen pie. River, en los últimos años, se destacó más por promover zagueros que marcadores laterales. En general, en el fútbol argentino no salen muchos laterales, no hay una gran producción”. Fuentes del fútbol formativo de River admiten que los mayores empeños están puestos en la detección y formación de volantes ofensivos, el clásico N° 10.

El encargado del fútbol amateur de Independiente, Fernando Berón, amplía el foco de la observación: “No sólo laterales, también hay pocos marcadores centrales genuinos. Hay más delanteros, tanto por afuera como el clásico Nº 9, o generadores de juego. Son muchos más los quieren jugar de mitad de cancha hacia adelante que hacia atrás. Uno hace una prueba, tres o cuatro partidos, y después hay que volver a repetir algunas de las posiciones defensivas con alguno que ya jugó porque no hay defensores suficientes. Son funciones clave; si uno no las tiene cubiertas, hay que inventar algo. ¿De qué manera? Con jugadores que se puedan adaptar al lateral, aunque jueguen en otra posición”.

Fernando Batista fue ayudante de Claudio Úbeda en el seleccionado argentino Sub 20 y tiene un largo recorrido en las categorías formativas: “Tanto en infantiles como en juveniles es muy raro que venga alguien a probarse de marcador de punta. La mayoría son delanteros y en menor medida volantes. Está en la inventiva de cada entrenador o grupo de trabajo armar laterales. Hoy no tenemos, un Zanetti, un Ibarra, un Sorin, quienes marcaron la última mejor época en cuanto a laterales. De los de ahora me gustan Moreira y Aguirregaray. Tagliafico es de lo mejor que hay por la izquierda”.

El panorama de Racing lo traza Diego Huerta, integrante de la secretaría técnica del fútbol amateur: “En los últimos 10 años, el único lateral izquierdo que debutó en la primera de Racing viniendo de abajo fue Alejandro García, que todavía está en el plantel profesional, pero nunca pudo afianzarse como titular o recambio. En el derecho, desde 2007, debutaron cuatro juveniles. El caso más importante es el del Negro José Luis Gómez, que llegó al club con edad de quinta división. Terminó siendo cedido porque nunca fue el 4 titular. Otro que jugó una buena cantidad de partidos fue Braian Lluy. Hay una carencia. Por ejemplo, Racing hoy no tiene un lateral hecho para ser titular y reemplazar a Pillud. Es un puesto que hoy falta, pero en proyección, en categorías más chicas, de la sexta para abajo, hay laterales naturales en las dos puntas”.

Aguirregaray marcó seis tantos en Estudiantes

El marcador lateral que hizo más goles en el último torneo fue el uruguayo Matías Aguirregaray, con seis. Le siguieron su compañero por la banda izquierda, Facundo Sánchez (3), Gino Peruzzi (Boca, 3), Christian Chimino (Temperley, 3) y Paulo Díaz (zaguero central que en San Lorenzo actuó de lateral, 3).

Para Nelson Vivas, la virtud fue estar bien ubicado

El ex entrenador de Estudiantes se refirió a la eficacia de Aguirregaray: “Tuvo la fortuna de estar bien ubicado en el momento que se hizo de la pelota. No todos fueron imponiéndose en el juego aéreo, sino también ganando en la segunda jugada dentro del área. Vimos en él esa capacidad y decidimos que ingrese como uno más de los atacantes en la elaboración de cada una de esas acciones. Algunas fueron preparadas; elegíamos un posicionamiento que debía respetar. Inclusive, hizo un gol más que no le convalidaron ante Aldosivi”.

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