Encontrá resultados de fútbol en vivo, los próximos partidos, las tablas de posiciones, y todas las estadísticas de los principales torneos del mundo.
Coronavirus. La desesperación del futbolista argentino que está dispuesto a contagiarse con tal de volver al país
Pasada la media hora de conversación por Skype (en Arabia Saudita están restringidas las llamadas por Whatsapp, Instagram o Facebook), Sergio Vittor encuentra una figura, aunque sea desmesurada e hiperbólica, para graficar su condición de argentino varado y angustiado en el extranjero: "Mirá, si querés ponelo así: 'Si me contagio de coronavirus en el camino, me chupa un h..., con tal de volver a mi país'. Ya ni me importa contagiarme, a ese punto llegué".
La pandemia acorraló al "Chino" Vittor (30 años), ex jugador de Independiente, Racing y Banfield, entre otros clubes, en Khamis Mushait, a una hora en automóvil del Mar Rojo. Desde principios de este año es futbolista de Damak, un equipo que intentaba salvarse del descenso en la Pro League de Arabia Saudita, hasta que el campeonato se interrumpió el 11 de marzo por el virus y no se reanudará hasta septiembre debido a las altas temperaturas de mediados de año. "El 13 de marzo ya no se podía ni ir al club para entrenarnos. Estamos encerrados desde entonces. Mi esposa no llegó a viajar desde Buenos Aires. Vivo solo en un complejo cerrado, construido por Estados Unidos para militares norteamericanos. Acá sólo pueden entrar extranjeros, ni siquiera los árabes", agregó el volante devenido zaguero central, que desde enero participó en nueve partidos de Damak.
A su relato hay que seguirlo desde adelante hacia atrás, desde la tensión que mantiene en estos días hasta las razones para irse al fútbol árabe. En sus palabras, lo actual es lo siguiente: "En Arabia estamos tres futbolistas argentinos. El "Colo" [Leonardo] Gil, Cristian Guanca y yo. Tengo de compañero a "Tati" [Emilio] Zelaya, pero él pudo irse a Chipre, donde está su familia. El club ya me autorizó a que me vaya, pero queda en mí buscar la forma. Estamos tratando de conseguir un vuelo privado desde Yedá, donde está Gil, hasta Madrid y ahí enganchar algunos de los aviones de repatriación que manda el canciller Felipe Solá. Ahora los vuelos privados salen fortunas, no cuestan dos pesos con cincuenta. Los tres coincidimos en que la plata mucho no nos interesa. Ponemos lo que haga falta para irnos. En otra circunstancia lo pensaría, pero ahora no me importa: yo me quiero ir a la Argentina. Cuando pasa algo como esto del coronavirus, uno se da cuenta de que los más importante son los seres queridos. Si mañana me dicen 'tenés que pagar 20.000 dólares por un vuelo privado', le digo ‘tomá’, no importa, aunque deje de ganar. Lo pago con los ojos cerrados. Gil ya perdió como seis mil dólares en vuelos que se cancelaron. Estamos en contacto entre los tres para ver qué puede surgir. Por ahora no tenemos noticias. Si de la Argentina pueden darnos una mano estaría buenísimo. La embajada argentina de acá nos dice que está todo cerrado, que hay que esperar".
Ver esta publicación en Instagram• Una nueva etapa en un gran país ~ @damac_club > Thank you Abdulgani
Una publicación compartida por Sergio Vittor (@chinovittor) el
Esta ansiedad responde a la transformación que sufrió la vida de Vittor. "Todos los días son una aventura nueva. No puedo dormir. Concilio el sueño a las seis, siete de la mañana, me levanto a las 10. Todos los días es igual. Estoy casi las 24 horas despierto, uno se vuelve loco. Te soy sincero: a las dos de la tarde me preparé la comida, son las siete y el plato sigue ahí. Uno no tiene ganas de hacer nada, un desastre. Pierde calidad de vida, se acuesta a cualquier hora, no duerme... Estoy más solo que un perro. Un quil..., porque uno está lejos de su país, sin su familia, y no puede jugar al fútbol, que es aquello para lo que vine. Se torna muy difícil y complicado llevar el día a día. Hace dos días me avisaron que estaba liberado para volver. Ni siquiera puedo entrenarme, salvo dentro de mi casa, pero no es un entrenamiento profesional, obviamente. Hago abdominales, pero no sirven un car... Tengo nada más que 10 metros para correr. Yo hablo con familiares y amigos que están volviéndose locos con el aislamiento en la Argentina, en su propio país y con su gente. Imaginá lo que es para mí acá. En una situación así, lo mínimo que uno quiere es estar en su país con su familia. Si al menos hubiera podido viajar mi mujer me sentiría mejor, pero no fue posible por la pandemia. Por suerte, no tenemos hijos; si no, me moriría", narra.
En diciembre, Vittor, cuyo pase era de Racing, rescindió el préstamo con Banfield para firmar con Damak. "En lo económico es el mejor contrato de mi carrera. Eso está clarísimo. Por algo vine a Arabia Saudita, por los proyectos económicos a futuro. Yo ya tengo 30 años. No vine para conocer la cultura y cobrar dos pesos. Esa es la realidad. El que dice que viene por lo deportivo está mintiendo porque acá el fútbol es una por.... De todas formas, yo vine para hacerme un nombre en este mercado y quedarme varios años. Para eso hay que ser muy profesional y no abandonar nunca el espíritu competitivo. Me comporto igual que cuando jugaba en Racing y en Banfield. A veces me enojo de más en la cancha porque algunos compañeros no viven el fútbol como nosotros. Tengo que tratar de que ellos se acostumbren a mí y no yo a ellos, porque, si no, uno entra en un pozo de conformismo que no lo lleva a buenos lugares. En el plantel hay tres argelinos, dos tunecinos y dos argentinos. Los siete refuerzos somos muy competitivos y tratamos de sacar al equipo adelante. Cuando me incorporé a principios de año el equipo ya estaba en puestos de descenso, a 14 puntos de la salvación, pero en las últimas fechas nos pusimos a cuatro. En el último partido le empatamos al puntero, Al-Hilal, al que dirigió Ramón Díaz. Pero es otro el nivel acá: nos agarra el peor equipo argentino y nos hace 18 goles. Obviamente, la exigencia no es la misma que en nuestro fútbol, pero lo disfruto. Está claro para qué vienen algunos extranjeros. Giovinco [Sebastián, de Al-Hilal] no es el mismo que cuando la rompía en Europa. Futbolísticamente hablando, extraño todo, hasta las p...".
Vittor no convalida la discriminación que puede sufrir por su posición económica acomodada en comparación con la de compatriotas varados en el exterior. "A los que me dicen ‘eh, pero vos estás ganando un montón de plata’, les contestó que nosotros vinimos a trabajar, tenemos contrato vigente, no estamos rascándonos. Muchos argentinos se fueron a pasear a Europa sabiendo que ya estaba el coronavirus. Sé que en casos así el futbolista no está bien visto en la sociedad porque gana un mango más que el resto. Si uno nació con estas cualidades, supo aprovecharlas y se portó bien, ¿cuál es el problema? Marcelo Goux siempre me decía: ‘Chino, yo no tengo una virtud futbolística. Lo único que tengo es cabeza. En mi barrio, yo era el peor, me elegían último en el pan y queso, pero sabía que iba a llegar a jugar en primera’", cuenta.
El recuerdo con Maradona del 19 de noviembre, cuando estaba en Banfield
Ver esta publicación en InstagramUna publicación compartida por Sergio Vittor (@chinovittor) el
Desde el club le avisaron que van a recortarle una parte del salario, pero destaca que no dejarán de abonar. Y relata una curiosidad: "Separo las cosas: antes del coronavirus estaba perfecto acá, me trataron bárbaro. No pienso rescindir el contrato, me cumplen en todo y no tengo ninguna queja, si bien es duro acostumbrarse a la cultura. A veces vamos en el auto con un árabe y hay que parar porque se va a la mezquita para uno de los cuatro rezos del día. Desaparecen todos, cierran los comercios. Me pasó quedarme en la caja de un supermercado cuando tocó el rezo. Encerrado, esperando, me puse a jugar con el celular".
El coronavirus lo encuentra en los dos lados del mostrador, como empleado y empleador. "Soy dueño de una empresa constructora en La Plata, que manejan mis hermanos, y no les desconté nada de los sueldos a mis empleados. No puedo hacer eso como dueño. Me agradecieron y yo les dije que iba a cumplir lo que estaba firmado. Nadie iba a imaginar esta pandemia, pero siempre hay riesgo de que pasen cosas que afecten la solvencia económica. El dueño tiene que responder", afirma.
Y sobre el debate del carácter solidario del futbolista, Vittor comenta: "Doné al hospital de Ezeiza 80 máscaras profesionales para los médicos, que salen carísimas, y nadie se enteró, ni tiene por qué enterarse. Un médico amigo que trabaja ahí me comentó el problema de que no podían comprarlas e hice figurar a mi empresa en la donación. Estoy seguro de que 90 por ciento de los jugadores de fútbol colaboró con algo, aunque muchos no lo sepan". Y considera que no todos los jugadores están en condiciones de dejar de cobrar, como sugirió Carlos Tevez: "Marcelo Díaz dijo teníamos que mostrar nuestra parte humana. Sí, decile al pibito Alcaraz [de las inferiores de Racing] que acaba de firmar su primer contrato que tiene que mostrar su parte humana cuando no tiene para pagar el colectivo".
Ver esta publicación en InstagramUna publicación compartida por Sergio Vittor (@chinovittor) el
Hasta el viernes, en Arabia Saudita había 3651 casos de coronavirus, con 685 recuperados y 47 muertes. "Comenzamos con un toque de queda de 12 horas; ahora ya es de todo el día. Son bravísimos, muy estrictos con el cumplimiento de la cuarentena. Si uno no está en su casa le cobran una multa de 600 dólares; si es reincidente, 1200. Y si lo agarran una tercera vez, otros 1200 y va preso hasta el fin de la cuarentena, y nadie sabe cuándo será", cierra un locuaz Vittor.
Otras noticias de Covid
Controversia. Otra designación polémica de Trump: el antivacunas Robert F. Kennedy gestionará la salud norteamericana
Vacunatorio VIP. Confirman el procesamiento de González García y piden investigar a los favorecidos con las vacunas
"Era una locura”. Boris Johnson confesó que planeó invadir Países Bajos para conseguir vacunas contra el Covid
Más leídas de Fútbol
Selección “muy visitante”. Messi vuelve a donde empezó todo, 188 partidos después y con una prohibición de camisetas suyas
En pantalla. En qué canal pasan Argentina vs. Paraguay, por las eliminatorias sudamericanas
Suspenso y acrobacia. Del gol argentino que se gritó tras el VAR a los tantos de Paraguay con una gran chilena y un cabezazo perfecto
En Asunción. A qué hora juega Argentina vs. Paraguay, por las eliminatorias sudamericanas 2026