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Brasil busca quitarse la presión mientras espera la recuperación total del crack Neymar
SAN PABLO.– Con la llegada de Marcelo y Casemiro , campeones de la Champions League con Real Madrid, Tite por fin consiguió reunir a los 23 jugadores del plantel de la selección brasileña que disputará el Mundial . Ya en Londres, el entrenador gaúcho no quiere perder ni un segundo para poner en práctica el esquema táctico y definir la formación ideal. Además, junto a su comisión técnica, deberá quitarle presión a un grupo que, a pesar de ser considerado en su país como firme candidato al hexacampeonato, se mostró muy distante del "pueblo", casi neutro ante el cariño de los torcedores.
Sin Douglas Costa , que aún se recupera de una lesión en el muslo izquierdo, los primeros movimientos de los jugadores brasileños en tierras británicas tienen el sello de Tité: trabajos de velocidad, presión intensa para asfixiar la salida del rival y rotaciones continuas de posiciones en el sector defensivo. Serio como pocas veces, el entrenador intenta afirmar de una vez la idea que tan buenos resultados le dio en las eliminatorias.
Los entrenamientos de Brasil son cerrados, casi secretos, y la prensa que sigue a la selección solo tiene acceso al calentamiento. Sin embargo, no hay mucho que esconder en un conjunto que, a priori, tiene casi todo claro. El domingo, los de Tité enfrentarán a Croacia (rival de la Argentina) en Liverpool, y allí estaría el esquema 4-1-4-1 que tanto le agrada al entrenador, con Casemiro unos metros por delante de los zagueros, Willian y Philippe Coutinho atacando por los costados, Gabriel Jesús centralizado y Neymar , libre.
La presencia del crack de París Saint Germain en el duelo ante los croatas está garantizada. La comisión técnica aún decidirá cuántos minutos, entre 45 y 60. Si arranca como titular, estará regresando a las canchas exactamente tres meses después de la operación del quinto metatarsiano del pie derecho, realizada en Belo Horizonte.
Si bien en las últimas horas se encendieron las alarmas por una posible "recaída" de la lesión de Neymar en los entrenamientos, solo tuvo una molestia al caminar y pidió al equipo médico que le cambiase la protección que usa en el pie. De hecho, la carga de prácticas del futbolista sorprendió positivamente a Tité y compañía, debido a que se creía que sus entrenamientos serían más cortos, que se retiraría antes. Nada de eso: Neymar entra con sus compañeros y sale con ellos.
La evolución del crack no cambia los planes de la comisión técnica, que modeló una recuperación gradual en la cual el atacante alcanzaría el pico en la etapa de grupos, para llegar en plenitud a los octavos de final cuando, en teoría, los partidos serán más difíciles. "Neymar está muy rápido. De vez en cuando le doy un pisotón en el pie, casi como un cariño, para ver si consigo pararlo", bromeó Danilo tras el último entrenamiento en el centro que le pertenece a Tottenham .
De popular, poco y nada
Aunque gran parte del público brasileño considera que su selección cuenta con altas chances de conquistar el título mundial, la simpatía por el plantel decayó mucho en estos diez días de preparación, debido al casi nulo interés de los jugadores y la comisión directiva por mostrarse más cercanos a sus hinchas. En medio de una huelga nacional de camioneros que colapsó varios servicios en Brasil, mientras estuvieron en el país los futbolistas se manejaron en helicópteros entre Teresópolis, donde está el centro de entrenamientos Granja Comary, y Río de Janeiro.
Apenas un ensayo se llevó a cabo con público y, debido a la gran cantidad de torcedores que colapsaron la capacidad de Granja Comary, debió ser suspendido. Cientos de hinchas, incluso niños, fueron sacados a la fuerza después de hacer filas kilométricas para ver de cerca a los ídolos.
Si bien Tité se manifestó a favor de jugar un último partido en territorio nacional antes de viajar a Londres, la Confederación Brasileña de Fútbol objetó que no había agenda y que solo se realizarían amistosos en Europa. Eso llevó a muchos hinchas a recordar el 7 a 1 ante Alemania, a manifestarse contra esta generación de futbolistas en las redes sociales y hasta a simpatizar por la Argentina de Lionel Messi , que se entrenó en Parque Patricios a puertas abiertas y jugó un partido ante Haití en La Bombonera, para despedirse de su gente.
En medio de un blindaje casi absoluto, Brasil intentará continuar el ritmo que lo llevó a arrasar en las Eliminatorias, para llevarse la sexta copa a casa y, si eso sucede, los hinchas se olvidarán del "desprecio" previo a la competencia. Las condiciones están dadas: el equipo tiene un objetivo, el DT tiene las ideas claras y su gente cree en ellos, a pesar de verlos desde lejos.
La agenda del pentacampeón
Después de su primera etapa de entrenamientos en Londres, la selección brasileña viajará a Liverpool para enfrentar a Croacia en Anfield Road, pasado mañana. Tras el amistoso, regresará a la capital británica, donde continuará las prácticas hasta el viernes, cuando viaje a Viena, donde dos días después, enfrentará a Austria.
El 11 de junio Brasil aterrizará por fin en Rusia, más precisamente en Sochi, que será su base hasta el 15, cuando viajará a Rostov para el primer partidos del Mundial ante Suiza, en el Rostov Arena. Vuelta a Sochi para continuar los entrenamientos, hasta el viaje del 20 a San Petersburgo, donde dos días después jugará ante Costa Rica. Tras ese compromiso, regresa a Sochi y, el 25, estará en Moscú, para disputar el tercer y último partido del grupo ante Serbia el 27, en el Spartak Stadium.
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