Encontrá resultados de fútbol en vivo, los próximos partidos, las tablas de posiciones, y todas las estadísticas de los principales torneos del mundo.
Ascendió la violencia
La barbarie otra vez opacó al fútbol: se suspendió la final de la B por una agresión al arquero Walter Cáceres
La barbarie no deja huecos en la historia reciente del fútbol de ascenso. Y cuando se trata de cotejos decisivos, la violencia parece potenciarse. Ayer sucedió otra vez. La esperanza de una fiesta se convirtió rápidamente en un nuevo capítulo de la irracionalidad. Cerca de 25.000 personas, en la cancha de Racing, ilusionadas con un ascenso de categoría y relegadas al ridículo. Al menos, la gran mayoría de ellas, ya que siempre unos pocos se imponen con su huella violenta. La historia fue así: a los 13 minutos del primer tiempo de la final de la primera B por un ascenso a la B Nacional, una bomba de estruendo impactó cerca de Walter Cáceres, el arquero de Estudiantes, cuando estaba a punto de defender a su equipo ante un penal que iba a patear Sebastián Penco, de Almirante Brown. Cáceres quedó en estado de shock tras el traumatismo acústico, sufrió vómitos y fue atendido en el Hospital Fiorito, pero su estado no reviste gravedad. Por la tarde estuvo en observación en la Clínica Ramón Carrillo, de Ciudadela.
Lo ridículo dentro del bochorno fue que la agresión llegó desde la propia tribuna de Almirante Brown, segundos antes beneficiado por ese penal y por la expulsión de Luciano Mazzina, por protestar. Conclusión: Almirante tenía todo en favor, luego de la primera final, sellada sin goles, pero un integrante de su propia hinchada -dividida por celos de poder, entre La 20 de junio y Los de siempre - generó el revuelo, la angustia por Cáceres y las sombras de una jornada que comenzó bien temprano con incidentes fuera del estadio.
En la AFA no hubo respuestas oficiales, pero hay un rumor convertido en una certeza: el partido (0-0) seguiría, sin fecha ni hora fijadas, pero con la decisión de que se reanudaría con el penal y sin público.
Antes del partido, se advertía, también hubo violencia. El Comité Provincial de Seguridad Deportiva (Coprosede) quiso que las dos finales se jugaran en Racing. En la primera, no hubo incidentes. Ayer, un escándalo. Un grupo de hinchas de Brown agredió al ómnibus de Estudiantes, que, a una cuadra del estadio, no sabía cómo ingresar. Pedradas, vidrios del vehículo rotos y robos durante más de media hora derivaron en el retraso, hasta las 11.29, del pitazo inicial del árbitro Diego Abal.
Después, comenzó el partido, hasta que Goux derribó en el área a Penco. Penal para Brown, roja para Mazzina y el caos. Agredido Cáceres y suspendido el partido, se enfrentaron entre sí los hinchas de Almirante acusándose por la agresión. Rompieron todo lo que pudieron, hasta un puesto de gaseosas voló desde la bandeja superior.
La policía no actuó. Y falló el operativo, de 750 efectivos, ya que no se controlaron los ingresos. Ahora, habrá que esperar la decisión de la AFA.
- Un hecho similar en otra definición
En Villa Crespo, el 19 de junio de 2004, se suspendió el partido en que Sarmiento vencía a Atlanta por 1-0, a los 13 minutos del segundo tiempo, por una agresión de los hinchas locales a Mauro Amato, delantero de Sarmiento. Aquella final de la primera B fue suspendida, no continuó y ascendió el equipo de Junín. Una semana antes había ganado 2-1.
Temas
- 1
Polémica en Italia: el bisnieto de Benito Mussolini anotó un gol y el festejo de los hinchas encendió fuertes reacciones
- 2
El show de Luis Enrique en PSG: el entrenador se sorprendió al ver pocos periodistas en la conferencia de prensa
- 3
Racismo: las cuatro futbolistas de River siguen presas en San Pablo y podrían pasar Navidad tras las rejas
- 4
Las confesiones de Julián Álvarez: por qué decidió irse del City, qué aprendió en River y cómo ser uno más pese a los 70 millones de euros