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Ángel Correa es uno de los futbolistas que más lucha por tener un lugar en la lista de 26 jugadores para ir a disputar el Mundial de Qatar 2022 con la camiseta de la selección argentina. Siempre desde el perfil bajo, su nombre está presente. El último fin de semana fue la figura de Atlético de Madrid, en el triunfo del Colchonero ante Girona por 2 a 0. El rosarino aprovechó la titularidad y anotó los dos tantos del equipo del Cholo; él sabe que cada rendimiento lo acerca cada vez más a la Copa del Mundo.
Hace algunos años, Angelito debió pasar por una complicada situación de salud. En 2014, durante la revisión médica que marcaba su traspaso de San Lorenzo al conjunto de Madrid, al futbolista le detectaron una afección cardíaca por la que tuvo que ser operado. Eso le llevó estar varios meses sin poder jugar. Una vez que debutó, logró meterse de inmediato en el corazón de los hinchas del Atleti. En una entrevista con el canal TyC Sports, y en relación a su intervención en su corazón el atacante reveló una situación que hasta el día de hoy era desconocida: para poder jugar la Finalissima ante Italia, en Wembley, puso en peligro su problema cardíaco, y se arriesgó a que se le infectara la zona de la operación.
“Fue algo complicado lo que pasó en esa oportunidad. Llevaba varios días viendo el alambre que estaba a punto de salirme del pecho, y no le dije nada al doctor porque quería estar sí o sí en la ‘Finalissima’ ante Italia en Wembley”. Y también recuerdó: “Cuando se lo dije y me explicó que podría haberse infectado y eso hubiera sido muy grave, por lo que me recomendaron que fuese a Madrid para resolverlo rápido”, comenzó su explicación. Vale destacar que, en ese duelo ante la Azzurra, Correa no sumó minutos.
Luego, agregó otra dura confesión sobre lo que fue aquel momento en el que le encontraron el problema en su corazón: “Los médicos me habían dicho que todo iba a ir bien y que no había ningún riesgo de no poder volver a jugar. Me mintieron. No me dijeron nada antes de la intervención, pero sí que existía el riesgo de no poder volver a jugar. Por supuesto, todo salió bien y pude seguir”, confesó el jugador de 27 años.
Cabe recordar que, en 2014, Correa tuvo que someterse a una microcirugía cardíaca para que le retiraran un tumor benigno. Debido a esa afección estuvo fuera de las canchas durante casi un año. Atlético de Madrid, que había adquirido su pase al Ciclón por 5,5 millones de euros por el 90% de su pase, lo esperó, lo ayudó en su recuperación y de la mano de Diego Simeone, fue entrando poco a poco en un equipo en el que cada vez es más importante.
Sobre su actualidad en el Atleti, Correa comentó: “Cada año veo que voy creciendo. En la cancha me noto diferente, años atrás era para más acelerado en el juego y quería resolver la jugada de otra manera de la que lo hago ahora. Con el paso de los años uno va entendiendo mejor el fútbol”, dijo. También habló de su relación con Diego Simeone y lo importante que fue para su carrera: “Tuvo que ver mucho en mi crecimiento, aunque vivo aguantándolo porque es insoportable”, dijo entre risas. Por último, agregó “El Cholo es con todos de la misma manera, siempre quiere ganar”, aseguró.
Con respecto a sus deseos y a su sueño de estar en Qatar, expresó: “Está claro que cada vez que se acerca la fecha para que se haga oficial la lista, los nervios se sienten mucho más. Ojalá esté en la lista, trabajo para eso y me siento parte de ese grupo que se siente como una familia. Sería lo máximo estar entre los convocados. Jugar el Mundial es el sueño de todo chico y espero que se me de esta vez”, cerró el rosarino.
LA NACION