Encontrá resultados de fútbol en vivo, los próximos partidos, las tablas de posiciones, y todas las estadísticas de los principales torneos del mundo.
El desafío de la náutica: las carreras multiclase, una modalidad distinta
Ante la dificultad para llegar a las audiencias, se busca realizar torneos integradores y reunir a las figuras
A 502 días de los Juegos Olímpicos Río 2016, el mayor certamen deportivo del planeta, los vientos de la esperanza parecen haberse prestado para las velas del yachting argentino. Una de las disciplinas que obtienen medallas en la cita máxima de manera ininterrumpida desde Atlanta 1996 (con 9 en total, 4 plateadas y 5 de bronce) tiene por delante grandes desafíos.
Uno de esos retos es tener la mejor preparación de cara a la cita olímpica. Las tres categorías (RS:X -windsurf-, Laser, 49er y 470) que competirán allí, tanto en su versión masculina como femenina, tienen en 2015 un año pleno de actividad. Entonces, cada oportunidad de competencia es vital para las aspiraciones nacionales.
Si bien el respaldo del pasado y el natural talento de los deportistas argentinos son alicientes que cimentan el crecimiento, el yachting afronta serias dificultades para mostrarse ante el gran público, y por ende, frente a los potenciales auspiciantes. La cuestión económica, fundamental para el desarrollo sostenido, hoy ocupa un lugar central en la agenda de quiénes conducen el deporte.
Así lo revela el vicepresidente de la Federación Argentina de Yachting, Luis Velasco. "La náutica es un deporte sin tribunas. Si bien cuenta con muy buenos resultados a nivel nacional e internacional, no logra presentarse ante la gente como lo puede hacer cualquier otra disciplina que se realice en tierra."
Sin embargo, ante esta dificultad, la entidad que representa buscó hacerle frente a esta realidad. En lugar de poner en práctica competencias aisladas o por categorías, comenzó a estructurar torneos integradores. Tal es el caso del Campeonato San Isidro Labrador (SIL), que comenzó ayer en el Club Náutico San Isidro.
Velasco, quien es el director de esta competencia, habló de esta nueva modalidad con LA NACION y sostuvo: "El SIL es un campeonato muy tradicional, que se realiza hace muchísimo tiempo, aunque a partir de 2010, por el centenario del Náutico, se volvió multiclases. Así también inauguramos una manera diferente de competir, en la que unimos a las distintas clases de embarcaciones, y además logramos tener a las máximas figuras del deporte en un mismo campeonato".
"De esta manera se buscó crear un circuito sudamericano de alto rendimiento, para mejorar la competencia argentina y crear un polo de atracción para el público. Esto fue creciendo de a poco, y con el paso de los años tuvo un crecimiento y logró el apoyo de las marcas", amplió el dirigente. La proyección deportiva desligada de la visión comercial, y sin tener en cuenta las audiencias, ya no es una opción.
"El deportista de alto rendimiento recibe un muy buen apoyo de la Secretaría de Deporte y del Enard, pero siempre hay gastos en los que incurren por las características de la actividad. Además, está la segunda línea de deportistas, donde se genera un abismo entre los que están arriba y los que aspiran a este lugar. Y nosotros queremos nivelar hacia arriba", finalizó. Ante la adversidad, la náutica no sólo busca evitar la deriva, sino ganarle su regata al destino.
Acción en San Isidro Labrador
Desde ayer, y hasta el 29 del actual, se desarrolla el Campeonato San Isidro Labrador. En el primer día de competencia, Alberto Lados (YC Punta del Este) dominó en la Clase Lase Standard; en Optimist Timoneles, está primero Lucas Videla, y en Clase Star domina Julio Labandeira, junto a su tripulante Javier Bock.
- 1
Lionel Messi mostró el lugar sagrado que tiene en su casa y sorprendió a sus fanáticos
- 2
Olexsandr Usyk vs. Tyson Fury (II): entre los 190 millones de dólares y una menor expectativa para una gran pelea
- 3
Jeta Castagnola: el crack que no puede verse en los videos, su lado sensible y lo que será jugar con “el mejor polista de la historia”
- 4
Simeone, De Paul, Álvarez, Molina: el Asadito mecánico del Atlético de Madrid cocinó un triunfo histórico en Barcelona