Cuando en 2015 se anunció que el beach handball iba a estar en el programa de los Juegos Olímpicos de la Juventud, pocos pensaban que este deporte iba a ser una de las disciplinas más convocantes, colmando durante todas las jornadas el estadio de Parque Sarmiento. Y si bien el equipo masculino se llevó la presea de bronce, las Kamikazes –así se llama la Selección femenina– conquistaron todas las ovaciones. Por su medalla de oro, pero, sobre todo, por la conexión que generaron con el público. Un fenómeno que se puede comparar con el de Las Leonas en otros Juegos Olímpicos, pero de adultos, hace casi 19 años en Sídney.
"No me imaginaba que el título olímpico iba a tener tanta repercusión. Pero siempre soñaba con que toda la gente conociera este deporte, ya que antes, cuando le decíamos a alguien beach handball, no sabía de qué hablábamos. Ahora todos lo reconocen", dice Fiorella Corimberto, una de las nueve integrantes del equipo de oro dirigido por Leticia Brunati.
Al otro lado del Atlántico se encontraba Celeste Meccia, considerada una de las mejores jugadoras del mundo. A pesar de los miles de kilómetros que la separaban, lo sucedido la terminó movilizando: "Tuve que vivir los Juegos a la distancia, siguiendo todo por TV y redes sociales. Ver gente haciendo horas de cola para poder entrar a ver las semifinales y la final, realmente, me emocionó. La repercusión de este oro fue soñada".
Inmediatamente después de los Juegos, la Confederación Argentina de Handball recibió más de mil mails de personas interesadas en practicar este deporte, y varios clubes anunciaron que iban a incorporarlo: desde Banfield hasta Cambaceres, en donde se analizó construir una cancha con lo ingresado por la venta de Lucas Pratto a River.
Además de que las convocaron para participar en una campaña contra la violencia hacia niñas y adolescentes, en las redes sociales, las Kamikazes también acusaron el impacto: los seguidores de la cuenta de Twitter @kamikazesBH crecen de a miles.
Salvador Comparone, entrenador de la Selección mayor desde 2007, es entusiasta, pero también advierte: "Falta que detrás de todo lo que se logró haya una organización institucional, con torneos organizados por las federaciones regionales, que se repitan año tras año y con becas para el deporte. En pocas palabras, hay más movimiento, pero falta que intervengan más seriamente la parte dirigencial".
A por más
Este mes las Kamikazes volverán a salir a la cancha en un torneo oficial y, nuevamente, van a ser locales. Será en los Juegos Sudamericanos de Playa en Rosario y la "beach handball manía" buscará tener un nuevo pico. Esta vez no habrá límite de edad, por lo que van a ser de la partida jugadoras que en 2017 fueron medalla de plata en los Juegos Mundiales (competencia multideportiva mundial con deportes que no forman parte del programa olímpico adulto).
El Tano Comparone es consciente de que va a tener una elección complicada, por la cantidad y por la calidad de quienes se entrenan para estar en el plantel definitivo: "Las juveniles que formaron parte del proceso olímpico, no solo las medallistas, fueron citadas para la Selección mayor; junto con las mayores forman un grupo numeroso, pero todas deberán entrenar para conseguir un lugar entre las 10 que quedarán en el final de esta etapa. Las posibilidades están igualadas".
En ese contexto, la flamante campeona Corimberto espera poder dar el salto a la Selección mayor: "Todos los eventos son importantes, pero aquellos en los que podés ser local te generan otra adrenalina, ya que la gente te pasa toda la energía positiva". Meccia, en tanto, señala la importancia de ser locales y de unir ambas selecciones: "Creo que este proceso va a ser de gran crecimiento individual, pero, sobre todo, colectivo. Si se consigue amalgamar lo mejor de lo que fue cada Selección, creo que se podrían alcanzar grandes objetivos. Sea cual sea la decisión del Tano, nunca dejaré de disfrutar cada una que tenga a mi lado, como siempre lo hice".
Arena, sol y deporte
Hasta el 23 de marzo, en Rosario –específicamente, en La Florida–, se estará desarrollando la tercera edición de los Juegos Sudamericanos de Playa. Por primera vez en suelo argentino, también es el debut en una ciudad no marítima. Más allá de que el beach handball se llevará el grueso de los flashes, dirán presente varias actividades conocidas, entre ellas, el beach volley y el beach soccer, así como otras variantes deportivas playeras menos conocidas, como la del hockey o la del tenis, e incluso disciplinas acuáticas como el esquí náutico o la natación en aguas abiertas, por citar algunos de los 14 que forman parte del programa.
Santiago Ludueña
LA NACIONMás notas de Beach Handball
Más leídas de Deportes
Detalles. Final de la Copa Sudamericana 2024: cuándo se juega el partido Racing vs. Cruzeiro
Primer paso. Cerúndolo derrotó a Musetti y Argentina se adelantó 1-0 ante Italia en los cuartos de final de la Copa Davis
Arranca la acción. Fórmula 1 hoy: días, horarios, prácticas y clasificación del Gran Premio de Las Vegas
Copa Davis: serie igualada. Sinner derrotó a Báez y la Argentina e Italia definirán el pase a las semifinales en el dobles