Del 6 al 20: cuando Manu Ginóbili entró con el pie izquierdo a San Antonio y tuvo que cambiar el número de camiseta

SAN ANTONIO.- No respira todavía muy agitada esta ciudad. No se advierte ansiedad en el aire. Eso parece todavía exclusivo para los extranjeros, para los argentinos que andan por aquí haciéndose notar. La gente que desanda las calles del centro, a la orilla de River Walk, no está inquieta. Saben que el 28 de marzo de 2019 será un día especial, pero aún lo toman con calma. Como si el aire se perfumase con un respecto supremo. Evitan hablar español, incluso aquellos que de cuna mexicana aprendieron el idioma. Pero si se trata de identificarse con el que les pasa por delante con una bandera celeste y blanca, ahí sí desempolvan su mejor pronunciación y gritan: "Manuuuu". Y allí comienza la comunión. Es que aquí se prepara en silencio una fiesta única, posiblemente, la más emotiva e importante en la historia de los Spurs: izarán la camiseta número 20 de Emanuel Ginóbili .

Si alguien piensa que esta experiencia era idéntica hace 17 años cuando llegó el bahiense a esta ciudad, no conoce bien cómo se desarrolló la carrera del deportista más importante de la historia de la Argentina. Caminar por las afueras de San Antonio y chocarse con murales con la figura de Ginóbili era apenas el sueño de algún trasnochado allá por 2002. Que una marca de hamburguesas local (Whataburger) en la noche de la fiesta del retiro de la camiseta de un jugador de la NBA y argentino piense en colocarle el número 20 a todo su packaging como homenaje, sólo podía caber en la cabeza de un loco. Que jugadores de la jerarquía de Kobe Bryant, Magic Johnson, Saquille O’Nell o LeBron James, "lo inviten" al chico que salió de Bahiense del Norte "a compartir su mesa", no cabía en la cabeza ni del más soñador.

Sin embargo, en un par de horas se vivirá el acto más importante al que un jugador de la NBA puede asistir, que le retiren la camiseta y la cuelguen en lo más alto del estadio de una franquicia. Y los Spurs, después de 16 temporadas y cuatro anillos de la NBA, le rendirán ese homenaje. Ahora bien, ¿Por qué Manu eligió el 20 para jugar allí? ¿Cómo llegó a ese dorsal?

Que tuvo que sortear Manu muchos escollos es bien conocido, que su primer contrato con San Antonio fue por dos años a cambio de 2.800.000 de dólares también, pero lo quizá muchos no recuerden es que la elección del número de la camiseta de Ginóbili tuvo una historia particular. Y para el universo de la NBA no es una selección sin sentido eso de elegir un número. Sin embargo, para Manu no representaba una prioridad, porque por entonces, en 2002, contaba cosas como éstas: "Estoy organizando cómo será mi vida acá. Estuve con un abogado tramitando mi visa laboral en los Estados Unidos. También tengo que gestionar mi seguro social y otras cuestiones legales. De básquet, poco y nada, porque con el técnico Gregg Popovich no tuve contacto, y solo estuve viendo los lugares de entrenamiento".

Aunque resulte extraño, para los Spurs era importante que se resuelva qué denominación iba a elegir Manu y lo más sencillo fue elegir el número 6 que había usado en Kinder Bologna, el club italiano en el que había ganado todo en Europa. Sin embargo, tres horas después de la conferencia de prensa de su presentación y de las primeras fotos oficiales, Ginóbili y el vicepresidente de los Spurs, R.C. Buford, tuvieron que explicar que no usaría la camiseta con el número 6, como lo hacía en Kinder. Para aquella presentación ya estaba preparada una camiseta con ese número y el apellido del argentino, incluso, hay fotos de Manu con ese dorsal, que no llegó a utilizar.

Y la razón por la que no usó ese número fue porque había sido utilizado por Avery Johnson, quien fue una de las figuras del equipo de San Antonio campeón en 1999, y que por entonces jugaba en Dallas. Si bien ya no estaba en la franquicia, la relación con la comunidad de San Antonio era muy intensa y eso despertó cierta controversia, la prensa sugería en diversas publicaciones que no era lo ideal para un debutante usar una camiseta emblemática, y así fue que Buford tuvo una charla con el bahiense y le dijo: "El último muchacho (por Johnson) que usó esta camiseta anotó un tiro que nos dio el título de la NBA. Evitemos crear demasiadas expectativas", le dijo.

No hubo problemas para Ginóbili, aceptó cambiar de número y después en una conferencia de prensa habló sobre esta situación: "Me parece que es lo mejor, para que no crean que soy irrespetuoso con un jugador muy querido por la gente". Y en una conferencia que no duró demasiado, Manu cerró con una frase más: "Disculpen mi inglés. Voy a practicarlo más".

Y no era una situación caprichosa aquella, porque unos años después retiraron la camiseta de Avery Johnson y ahora estará junto con la 20 de Manu en el techo del AT&T Center.

Y no es menor para un jugador su número de camiseta, por ejemplo, Dwyane Wade eligió el número 3 porque quería honrar a la Santísima Trinidad, Jason Collins, el primer homosexual declarado en la NBA, usó el 98 en Boston, Brooklyn y Washington, como guiño a la comunidad gay y en homenaje a Matthew Shepard, secuestrado, torturado y asesinado en 1998 por su condición sexual. Además, Tim Duncan seleccionó el 21 porque era el número que su cuñado Ricky Lowery usaba cuando jugaba en la universidad, y fue quien le enseñó a jugar al básquet cuando Tim tenía 14 años, y Michael Jordan contó que perdía casi siempre con su hermano Larry cuando jugaban uno contra uno y que cuando llegó a la Universidad eligió el número 23 porque quería ser, al menos, un poco más de la mitad de bueno de lo que era su hermano Larry, que siempre usó el 45. Incluso, Gordon Hayward, de Boston, confesó que eligió el número 20 cuando debutó en Utah Jazz por su admiración por Emanuel Ginóbili.

Entonces la elección para Ginóbili era importante, le dieron el verano de 2002 en los Estados Unidos para pensar qué número quería, ya que debía regresar a San Antonio el 1° de octubre para comenzar con la pretemporada. Anunció que usaría el número 20, que no parecía tener identificación con ninguno de sus ídolos, tampoco es el día del mes en el que nació y no fue el número que su padre vistió y él heredó. Al estilo de Manu y sin demasiadas vueltas explicó por qué lo escogió: "Puedo simplemente decir que me gusta cómo se ve".

Así de simple, con el sello de siempre de Ginóbili, sin demasiados misterios ni estridencias. Escalón por escalón hacia la cima. Así la 20 de los Spurs será izada en el AT&T Center y ya nadie volverá a usarla, un privilegio fantástico.

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