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Río 2016: como en los viejos tiempos, Estados Unidos sufrió para ganarle a Serbia y ya no se siente invencible
Los europeos tuvieron el tiro del final para llevar el partido a suplementario, pero Bogdanovic falló y el Dream Team se impuso por 94-91
RÍO DE JANEIRO (dpa).- Estados Unidos consiguió este viernes otra victoria ajustada en los Juegos de Río 2016 al derrotar por 94-91 a Serbia en la cuarta jornada del torneo olímpico de básquetbol.
El Dream Team, con varias de las actuales estrellas de la NBA, nunca se sintió cómodo en la cancha del Arena Carioca 1, tal como le sucediera en el encuentro anterior contra Australia, en el que se impuso por apenas 10 puntos.
De hecho, el partido se definió en la última jugada, cuando Bogdan Bogdanovic falló un triple sobre el sonido de la bocina, que habría significado la igualdad y el pase a un tiempo suplementario.
Estado Unidos tuvo demasiadas dificultades para construir juego y sólo pudo mantener la diferencia debido a la enorme capacidad atlética de sus figuras en los mano a mano individuales. El equipo conducido por Mike Krzyzewski se vio por momentos desbordado por el movimiento rápido de la pelota y la dinámica del juego, habitual en el baloncesto europeo, de los serbios.
De este modo, los estadounidenses se consolidaron como los únicos líderes del Grupo A, con cuatro victorias y ninguna derrota y los serbios quedaron complicados en la cuarta posición, con un triunfo y tres caídas.
Esta versión del Dream Team tiene muchas figuras. Kyrie Irving fue el máximo anotador de su equipo, con 15 puntos, y dio cinco asistencias, mientras que Kevin Durant y Carmelo Anthony aportaron 12 tantos cada uno.
Sin embargo, faltan dos emblemas, como LeBron James y Stephen Curry. Tampoco cuentan con un pivote que marque diferencias, como en otros tiempos podía hacerlo Dwight Howard. Ese puesto ahora es ocupado por DeAndre Jordan y DaMarcus Cousins.
Australia, con un equipo muy sólido y varios NBA (Patty Mills, Matthew Dellavedova, Andre Bogut, Joe Ingles y Aaron Baynes, entre otros), ya lo había complicado.
Pero Serbia, hace dos años, contra un equipo muy similar, no había podido complicarlos en la final del Mundial de España. Evidentemente el equipo serbio maduró mucho. Con un base genial como Milos Teodosic (18 puntos y 6 asistencias), capaz de manejar a la perfección el juego en un ritmo poco acostumbrado para los norteamericanos, comenzó a gestarse un partido enrevesado para el Dream Team.
Pero la clave estuvo cerca del aro. Dos puntales decisivos fueron los pivotes Miroslav Raduljica (18) y Nikola Jokic (25). Los 43 puntos de los internos europeos contrastaron con los 18 que hicieron los norteamericanos (13 de Jordan y 5 de Cousins).
Estados Unidos no pierde un partido con sus jugadores de la NBA desde 2006, cuando cayó en las semifinales del Mundial de Japón ante Grecia. Desde entonces, USA Basketball comenzó un programa ambicioso y que garantizó la presencia de las grandes figuras para evitar nuevas derrotas.
Así recuperó su imagen de invulnerabilidad, pero en Río esa idea se está perdiendo poco a poco. Primero lo complicó Australia. Ahora Serbia estuvo a un tiro de llevarlo al tiempo suplementario. Parece que sólo falta que aparezca un equipo con la personalidad suficiente. Así como lo fue la Argentina en 2002, cuando dio el primer gran golpe de la historia.
Tal vez no sea en este torneo. Lo que es seguro es que el Dream Team volvió a perder ese aura de equipo imbatible con el que se volvió a vestir desde hace 10 años.
jt
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