Acefalía roja: Pedro Iso anunció su alejamiento

Independiente ya no tiene la cabeza en su lugar. Tras decisiones que se le escurrieron de las manos, los resultados futbolísticos que no lo acompañan y la marcha de los hinchas, que lo agraviaron con insultos, el presidente del club, Pedro Iso, de 77 años, anunció su renuncia. "El tema ya lo tengo decidido. En unos días llevaré formalmente mi renuncia y es indeclinable. Le dediqué 37 años de mi vida al club y no merecía salir insultado de la sede", fue la explicación de Iso a La Nacion minutos después de conocerse su decisión.

Al frente de una Alianza que integraba el empresario artístico Daniel Grinbank, Iso ganó las elecciones en diciembre del año último y su mandato expira a fines de 2002. Luego de vencer en el último sufragio al anterior presidente, Héctor Grondona, Iso comenzó su tercer período, ya que presidió la institución entre 1979-1985 y 1988-1991.

La debacle de la conducción. La vida institucional se convulsionó con el alejamiento de Grinbank, que en abril último abandonó su cargo de asesor por desavenencias con la actual conducción. Las suspicacias quedaron instaladas.

Después del oasis futbolístico que significó el subcampeonato en el último Clausura, Independiente sufrió un éxodo de jugadores importantes y se desbarrancó. Como contrapartida, y por la acuciante situación económica -la deuda es de 27.000.000 de pesos-, llegaron nombres que no conformaron el gusto del hincha.

La paciencia explotó tras algunos resultados adversos y todos los dardos apuntaron a un solo hombre: Alberto Fernández Arsuaga, coordinador del fútbol profesional y mano derecha de Iso. La conducción delegó en él todas las contrataciones y algunos integrantes de la comisión directiva calificaron la determinación como un error, debido a que Fernández Arsuaga no vio con buenos ojos la llegada del entrenador Osvaldo Piazza.

La reacción de la gente no se demoró. Los socios se autoconvocaron en dos oportunidades en la sede de la avenida Mitre. Exigencias puntuales: se clamó por la renuncia de Fernández Arsuaga y por el regreso de Grinbank. Tras la segunda marcha, cubierto de insultos y salivazos, Iso debió retirarse con custodia policial. Todo precipitó la ida del titular de la entidad.

Iso dejó en claro cuánto se resquebrajó la relación con el empresario. "Les pido a los socios que nunca permitan que Grinbank sea presidente del club. Eso sería lo peor que le podría suceder a Independiente. Nos hizo la vida imposible durante ocho meses", aseguró en declaraciones a Radio La Red.

Una década bajo sospecha. Hace 10 años que Independiente parece desangrarse por dentro. Algunos actos de los gobiernos de Horacio Sande (91-93), de Jorge Bottaro (94-96) y de Héctor Grondona (97-99) fueron puestos bajo sospecha ante la Justicia. La causa por administración fraudulenta, que comenzó en octubre del año último, es investigada por la Unidad Funcional de Instrucción N° 2, a cargo del fiscal Daniel Gualtieri.

En una conversación con La Nacion, Grinbank expresó que uno de los elementos que precipitaron la renuncia de Iso están vinculados con la investigación: "No me parece al azar la renuncia de Iso justo en el momento que la comisión directiva decidió querellar la gestión de Héctor Grondona. No se olviden de que Julio se amigó con su hermano y hace una semana le prestó dinero al club para pagar una deuda con la AFIP. No es una novedad que el club es Grondonadependiente". El futuro. Iso viajó a Mar del Plata y pasado mañana presentará la renuncia formal. Si no da marcha atrás, al frente de esta caldera quedará el vicepresidente Roberto Galano; un compromiso nada fácil, con un pasivo que está cerca a los 30.000.000 de pesos...

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