Ya son dos los museos intervenidos
La Secretaría de Cultura advirtió irregularidades administrativas y patrimoniales
Ya son dos los museos nacionales que se encuentran intervenidos: el Museo Nacional de Arte Oriental y, como informó ayer La Nación , el Museo Histórico Nacional.
La directora Nacional de Patrimonio, Museos y Artes, Liliana Barela, anunció en diálogo con La Nación que, una vez normalizada la situación de ambas instituciones, llamará a concurso para designar a los nuevos directores.
"Pero con transparencia, un jurado intachable y reglas que no sean un poco light , como las de los últimos concursos", dijo. Respecto de la situación de los museos nacionales de Bellas Artes y de Arte Decorativo, dijo que no habrá novedades, ya que "funcionan bien".
En el caso del Museo Nacional de Arte Oriental, la interventora, María del Valle Guerra, dijo que los motivos de la medida fueron "una presunta desaparición de obras de arte, la falta de un inventario con las formalidades requeridas y la necesidad de regularizar el sistema administrativo".
"Además hubo siete salidas de piezas para exposiciones sin autorización oficial o seguro, y donaciones que no se registraron en la Secretaría de Cultura", dijo.
También avaló una carta de lectores publicada ayer en La Nación donde Orlanda Yokohama de Fernández, ex directora de la institución, reclama por el descuido con el que se trató la donación de su familia. El museo permanecerá cerrado al público hasta que se normalice su situación.
Consultado por La Nación , el último director del museo, Osvaldo Svanascini, dijo que "esto significa un bochorno que no estoy dispuesto a aceptar". "Cumplí 80 años, y hace más de 60 que hago conocer el arte oriental, con más de 30 libros. Además, mi actuación es de los últimos cuatro años. El museo funciona desde 1966, cuando entré ahí no había inventario y no puedo atestiguar por lo que pasó entonces", señaló.
Respecto del Museo Histórico Nacional, la flamante interventora, María Inés Rodríguez Aguilar, señaló que las prioridades de su gestión (que durará seis meses) serán "restaurar el clima de trabajo perdido por el maltrato a la gente" para luego dedicarse a "la aplicación de políticas culturales, fortalecer la biblioteca, abrir los domingos, recomponer la relación con la Asociación de Amigos y completar los inventarios y bases de datos", entre otras medidas.
Liliana Barela explicó los motivos de la intervención en términos de presuntas irregularidades administrativas y patrimoniales y malestar en el del personal de la institución, entre otros.
En diálogo con La Nación , el historiador Juan José Cresto rechazó cualquier tipo de imputación. "He puesto dinero mío en el museo e iniciaré acción judicial contra todo aquel que me acuse, porque no tengo otra cosa que mi buen nombre". Respecto de los problemas con el personal, dijo que se trataba de apenas un pequeño grupo. Y que tiene una medida cautelar del juez "así que me puedo considerar el director del museo", concluyó.