Ultimo adiós a Mario Benedetti
Una caravana recorrió la ciudad para despedir el poeta esta mañana; sus restos fueron sepultados en el Panteón Nacional del cementerio central de Montevideo con un homenaje a cargo del escritor Daniel Viglietti
MONTEVIDEO.- Los restos del escritor Mario Benedetti fueron sepultados en medio de la congoja ciudadana por la pérdida de uno de los referentes de la cultura uruguaya que tuvo fuerte repercusión en la Argentina, España, Cuba, México, Venezuela, Nicaragua y otros países.
Una larga caravana encabezada por cuatro carrozas con ofrendas florales y una que portaba el féretro se dirigió hacia el Cementerio Central a unas 30 cuadras del Palacio Legislativo. Cuando el féretro fue bajado, varios centenares de personas aplaudieron.
En las puertas del Panteón Nacional, Hugo Achúgar, director de Cultura del Ministerio de Educación y Cultura; el cantautor Daniel Viglietti, que compartió con Benedetti poemas y canciones y una "entrañable amistad", y la ministra de Educación y Cultura María Simon fueron los oradores que volcaron en sentidas expresiones la personalidad del extinto, su modestia, su alto nivel literario, su humor y su perfil político como militante de izquierda.
"Querido Mario, te digo adiós, pero no te lo digo. Te despido, pero no te despido. Siempre estarás en mí y en el alma y en el corazón de miles de personas que entraron en la poesía a través de la puerta grande de tus poemas. Hasta luego, entonces", escribió el poeta argentino Juan Gelman, en una carta enviada desde México y leída por la ministra Simon.
"Hoy enterramos a un hombre bueno. Hoy enterramos parte de nuestra historia", dijo en una emotiva despedida Achúgar.
La caravana circuló a paso de hombre por la ciudad acompañada por sindicalistas de la principal central obrera del país, la PIT-CNT, y estudiantes de la Federación de Estudiantes Universitarios de Uruguay.
Ayer los uruguayos desfilaron durante toda la jornada ante el féretro de Benedetti velado en el Palacio Legislativo, sede del Congreso, donde se congregaron autoridades del gobierno encabezadas por el presidente Tabaré Vázquez, referentes de la política y cultura y ciudadanos comunes -adultos, jóvenes, familias- que quisieron tributar su adiós al poeta.
"Hombres como Mario nunca mueren, se siembran", dijo brevemente Vázquez al evocar la figura del escritor, de claro compromiso en la izquierda y que participó activamente en la fundación del Frente Amplio, la alianza actualmente en el poder.
Mario fue "un hombre con una pluma, un alma y un corazón" y "nos desafía a seguir su ejemplo. Hoy estamos rodeando su recuerdo con mucha noción de futuro", evocó Viglietti, quien permaneció toda la jornada de ayer al lado de su amigo fallecido con quien compartió también actividades artísticas como el espectáculo "A dos voces".
De salud frágil el último año y medio en el que fue hospitalizado cuatro veces, la última aparición pública de Benedetti fue en diciembre de 2007 cuando fue distinguido por el presidente venezolano, Hugo Chávez, con la Orden Francisco de Miranda en un acto en Montevideo.
Nacido el 14 de septiembre de 1920 en Tacuarembó el uruguayo combinó toda su vida el amor por las letras con un compromiso humano, social y político que nunca abandonó y que le significó años de exilio durante la dictadura militar (1973-85).
Exponente de la denominada "Generación del 45" con Juan Carlos Onetti (1909-1994), entre las obras destacadas del uruguayo figuran Gracias por el fuego (1965), Los cuentos de Con y sin nostalgia (1977), Los poemas de Viento en el exilio (1981) y obras teatrales como Pedro y el capitán (1979).
Benedetti retrató en muchas de sus obras la tristeza del burócrata y la melancolía de Montevideo, su ciudad de adopción, y en sus letras se reconocieron muchos de los que ayer se acercaron a tributar un emotivo y silencioso homenaje al autor que a su valía intelectual añadió una calidad humana que fue su marca registrada.
Autor de una vasta obra con más de 80 títulos entre poesía, cuentos, novelas y ensayos, Benedetti fue distinguido a lo largo de su trayectoria con varios premios como el Reina Sofía, el Iberoamericano José Marti y el Menéndez Pelayo.
Su último libro Testigo de uno mismo se lanzó en agosto pasado con el poeta ya ausente por su vulnerable estado y estaba trabajando en un nuevo poemario con el título provisorio de Biografía para encontrarme .
Mutua admiración con Nicanor Parra. El poeta chileno Nicanor Parra dedicó un "artefacto" para rendir homenaje al fallecido escritor uruguayo Mario Benedetti de quien dijo haber sido un "amigote".
El "artefacto" tiene como título "En la hora de su muerte" y fue publicado hoy por el diario La Tercera. "A lo más que se puede aspirar/ Es a dejar dos o tres frases en órbita/ Que yo sepa don Mario dejo al menos una:/ La muerte y otras sorpresas// ¡Señor mío, la frasecita!", escribió Parra en referencia a uno de los títulos del escritor uruguayo.
El diario La Tercera indicó que el autor de La tregua "era un admirador de la obra del chileno y en 1969 le realizó una extensa entrevista que fue publicada en la revista Marcha.