Todo vale
Si la imagen estuviera tomada a mayor altura y no distinguiéramos lo que se retrata se podría fantasear con múltiples figuras formadas por esos puntos de colores que casi tiñen la superficie celeste en la que están enclavados. Hasta se podría imaginar que son manchitas multicolores sobre un lienzo color cielo, pintadas por un artista experto en puntillismo. Pero si bajamos a la realidad, lo artístico se desvanece y nos obliga a ver una amplia piscina atestada de gente sentada o apoyada sobre aros inflables. El calor agobia en Nanjing, en la provincia de Jiangsu, y se echa mano de cualquier recurso para paliarlo. Ya no importa estar uno encima del otro, formando un enjambre humano cuyas vivaces tonalidades apenas alcanzan para atenuar la densidad del amontonamiento. Ya no vale ni una mínima y respetuosa distancia saludable. Solo se trata de sobrevivir a la asfixiante temperatura. No importa cómo.