Se expande en el mundo el Instituto Cervantes
Crece la demanda del español
EL CAIRO.- El director del Instituto Cervantes de El Cairo, Luis Moratinos, está preparando las valijas. Después de haber pasado casi cuatro años al frente de la institución, dentro de un mes viajará a Salvador de Bahía, Brasil, para abrir allí una nueva sede.
Será la tercera sede de la institución en el país vecino de la Argentina, donde el Cervantes aspira a abrir un total de nueve centros "para formar a los 250.000 profesores de español que se necesitarán si se quiere cumplir con los convenios que establecen el español como segunda lengua obligatoria en escuelas brasileñas", dice Moratinos a LA NACION.
Mientras tanto, sigue trabajando para los 3500 alumnos matriculados que tiene el instituto y que revelan una tendencia en crecimiento.
"El Cervantes está en El Cairo desde 1993. Cuando empezamos teníamos 1900 matrículas. La mayoría de nuestros alumnos de español son estudiantes de las universidades locales y tienen entre 19 y 25 años", cuenta el director de la institución, que impuso a su biblioteca el nombre de Adolfo Bioy Casares.
Moratinos agrega que también forman en español a empleados de empresas internacionales y a guías de turismo, una de las principales fuentes de ingresos que tiene el país.
Influencia religiosa
Hermano del ministro de Asuntos Exteriores del gobierno de Rodríguez Zapatero, Miguel Angel Moratinos, Luis está acostumbrado a desempeñarse en países árabes o de mayoría musulmana. Ha estado destinado en Irak, Angola, Turquía y Bosnia, y su experiencia le permite hacer un análisis interesante acerca de cómo influye la religiosidad en el modo de aproximarse al conocimiento de otra lengua y otra cultura.
"Aquí, por ejemplo, a veces nos piden que seamos más cautos. En alguna oportunidad, cuando organizamos ciclos de cine hemos recibido quejas de nuestros alumnos por la proyección de películas donde había escenas de sexo o de violencia. Exhibimos, por ejemplo, el film argentino Ay, Juancito, y fue ya una complicación desde el afiche de promoción, donde se veía a un hombre y una mujer haciendo el amor"..
Complejo proceso
Según Moratinos, por lo que se puede apreciar en El Cairo, la sociedad egipcia atraviesa un complejo proceso en dos direcciones: por un lado, se acentúa la presencia de principios y símbolos religiosos en la vida civil; por el otro, en este país que Hosni Mubarak preside desde hace 25 años emerge una nueva generación que se expresa con mayor libertad y espíritu crítico.
"Un ejemplo es el tema del velo. Hace algunos años teníamos aquí una proporción de, digamos, 45% de mujeres con el cabello cubierto, contra un 55% que lo llevaba descubierto. Hoy eso se ha revertido y diría que el 85% de las mujeres lleva el velo, contra el 15% que no lo hace", explica el director del instituto. Moratinos atribuye este cambio a una reacción a la guerra que Estados Unidos inició en Irak después de los atentados contra las Torres Gemelas, en Nueva York.
Y añadió: "Aquí había alumnas que me saludaban estrechándome la mano o dándome un beso y de pronto un día me dijeron: Profesor, lo siento pero ya no podemos saludarlo así."
"De todos modos -agregó- esto también es relativo, porque si bien muchas mujeres llevan el cabello cubierto, por la calle se ven velos de colores, chicas maquilladas que visten jeans y ropa ajustada. Creo que estos cambios tienen que ver con acentuar la propia identidad y con el hecho de que también están cansados de que en todo el mundo se los vea como los malos de la película. Por otra parte, la gente también manifiesta sus opiniones políticas y la prensa recoge eso."
Moratinos cuenta que para España es importante mantener y acrecentar la presencia de su cultura en el mundo árabe por medio del Instituto Cervantes. "No sólo no cerraremos las sedes existentes, sino que pensamos abrir más. Aquí hay un claro interés por la cultura española, y nosotros tratamos de integrar a la gente con nuestras propuestas en todo lo que podemos."