Samanta Schweblin viaja del papel al escenario

MADRID.- "¿Y si para esa mujer escribir es también decir?" Como un eco de su cuento ganador del premio Juan Rulfo, "Un hombre sin suerte", la galardonada escritora argentina Samanta Schweblin se traslada del papel a los escenarios. Es que los universos que crea con su narrativa resultaron territorio fértil para dramaturgos y realizadores, y en la escena, las voces de sus personajes suenan más nítidas aún.

Además de la adaptación de aquel relato, a cargo de Osmar Núñez, este fin de semana se estrenará la versión escénica del cuento "Cabezas contra el asfalto". Y la novela Distancia de rescate acaba de ser llevada al teatro madrileño por Pablo Messiez. La autora no imaginó que esto fuera a suceder. "Estas adaptaciones son lecturas posibles de los libros, cargadas de toda la sorpresa que tiene entender cómo funcionan estas historias en los lectores. Son extensiones de la vida de estos libros. Me maravillan, pero ya no me pertenecen."

En ElKafka Espacio Teatral, Núñez presenta un unipersonal, con María Nydia Ursi-Ducó, basado en "Un hombre sin suerte", donde la narradora es una niña que cuenta un hecho traumático que transcurre el día de su cumpleaños. Schweblin cree que Núñez resolvió "hábilmente" esta adaptación. "En la narrativa de Samanta el suspenso es su principal protagonista. Los personajes tienen grosor. Son teatralizables porque cuentan, describen, sufren y aman su existencia", explica el director. Esta trasposición no es sencilla, pero Núñez apostó por ella seducido por "la incomodidad de la historia, el pasado con tanto presente, los fantasmas de los seres amados y odiados que no dejan de visitarte y condicionarte, el humor rosa-negro que impregna el cuento, y su poesía".

Incluido en el libro Pájaros en la boca, "Cabezas contra el asfalto" es una de las obras breves que renovará la propuesta de "Teatro Bombón", el ciclo dominical de La Casona Iluminada. Se trata de otro unipersonal, protagonizado por Jorge Eiro, que adaptó el texto original junto con el director, Pablo Elías Quiroga.

Mientras tanto, en Madrid...

En el Teatro Galileo, cerca de donde vivieron Pablo Neruda y Benito Pérez Galdós, se presenta Distancia de rescate, dirigida por Messiez. El realizador argentino está instalado desde 2007 en Madrid. "Hacía tiempo que un libro no me atrapaba así. Fue empezar a leerlo y no poder soltarlo hasta el final por su extraordinario manejo de la intriga. Pensé que sería estimulante buscar el modo de provocar esa intriga en teatro", reconoce el director.

No es extraño que Messiez, quien siempre se interesa por personajes femeninos potentes eligiese esta novela, habitada por dos mujeres con una voz muy audaz. Aunque sí es llamativo que fuese seducido por un relato tan complejo, casi como si se llevase a escena Pedro Páramo, de Juan Rulfo. Distancia de rescate es una novela polifónica en la que cuatro personajes -dos madres, con sus respectivos hijos- recrean un ámbito rural enrarecido donde se cosecha soja. En el texto, el diálogo es un elemento clave, construido y marcado con guiones, con comillas que dan cuenta de que se usan las palabras de un tercero, y también con cursivas. Hay una variedad de recursos para señalar las distintas incursiones, guiada por dos narradores principales, y dentro de cada uno de estos pasajes existen más relatos o piezas que buscan construir el rompecabezas de esta historia que exige un lector/espectador atento. Messiez logra la simultaneidad de voces y planos con dos armas eficaces: las interpretaciones y las luces. Y el dialecto tan argentino del original (donde están la ojota, el rodete, las tetas y la palangana) se modifica por uno más castizo (se incorporan voces como gazpacho, gilipollas, tumbonas).

Distancia de rescate podría ser interpretada como una historia fantástica; sin embargo, la crueldad de la explicación tan real de los monstruosos sucesos que ocurren se refiere a un problema que recién comienza a denunciarse en la voz de una generación: los efectos trágicos de los pesticidas sobre la población. Messiez es respetuoso con el texto original. Toma esas imágenes contundentes como la del hilo umbilical, el hilo sisal, y dispara con ellas emociones que dejan al espectador en alerta.

Cada una de las adaptaciones logra que el nombre de Schweblin se siga dando a conocer en el mundo de las letras hispanas, y que sus mundos y personajes cobren relieve de la mano de talentosos realizadores.

Tres títulos para ver

Un hombre sin suerte

Sábados, 20.30, en ElKafka, Lambaré 866

Cabezas contra el asfalto

Domingos, a las 19, en Teatro Bombón, Corrientes 1979

Distancia de rescate

Se representa en el Teatro Galileo de Madrid

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