Remota, la galería salteña premiada en Pinta PArC: “Nos frustraba ver tanto talento invisibilizado”
Con solo un año de actividad, ganó proyección latinoamericana con su participación en la feria de Lima; “queremos superar las limitaciones que tienen los que eligen producir en su lugar de origen”, afirman
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LA NACIONMaría Nöllmann
LIMA-. La gran presencia de stands argentinos y de artistas nacionales representados por galerías extranjeras llama la atención de muchos visitantes, amantes del arte y coleccionistas que pasean por los pasillos de Pinta PArC, una de las ferias de arte latinoamericano más importantes de la región, que se celebra hace 10 años. Entre las 10 galerías argentinas presentes, hay una que generó especial interés tras haber ganado el premio Next, que reconoce al mejor stand de la sección homónima, dedicada al arte emergente y curada por la peruana Florencia Portocarrero. Se trata de la salteña Remota, que apenas cumplió un año de actividad en la capital norteña, pero que ya ha obtenido un reconocimiento en ArteBa y ha participado en Pinta Miami y de BAphoto, en ediciones anteriores.
Dirigida por dos salteños, Guido Yannitto y Gonzalo Elías, esta galería acerca a la feria una propuesta que sus mismos expositores consideran distintiva: “Representamos únicamente a artistas de Salta. Hacemos un recorte de la escena del arte contemporáneo en la provincia que es muy diverso e intercultural. Con Guido compartimos una visión en común, y es que hay mucho por desarrollar a través del arte en la provincia y en la región. Nos frustraba ver artistas mega talentosos poco visibilizados y queremos romper con algunas de las limitaciones que tienen los artistas que eligen producir en su lugar de origen”, afirma Elías.
El nombre remite directamente a esa lejanía geográfica con los epicentros del arte y también al hecho de que, según sus directores, es “un poco remota” y, a la vez, “maravillosa” la idea de tener una galería en el norte argentino con proyección internacional. “Nos está yendo sorpresivamente bien. Esta es nuestra primera vez en Lima y la idea, además de vender, es generar redes para que volver sea cada vez menos difícil”.
El proyecto empezó a gestarse, de alguna manera, dos días antes del comienzo del primer aislamiento social y obligatorio por coronavirus. Allí fue cuando Elías y Yannitto se conocieron en una muestra de artistas salteños en Buenos Aires, donde ambos vivían. Elías, en ese entonces, trabajaba en una financiera en el microcentro, mientras que Yannitto se dedicaba ya hacía 24 años al arte textil, habiendo hecho residencias en México, Holanda, Colombia, Italia y la Antártida. Pero ambos compartían no solo la pasión por el arte, sino también una particular visión sobre la importancia de visibilizar la producción de los artistas de su provincia.
“Lo interesante es que la pandemia nos trajo a los dos a Salta. Y ahí arrancamos este proyecto. Los dos volvimos a nuestro lugar de origen a representar artistas salteños”, cuenta Elías. Y agrega: “Hoy representamos 7 artistas, entre ellos a Claudia Alarcón, una artista indígena Wichi que teje con fibra de chaguar, lana y plástico. Es increíble su trabajo, da para una nota completa”.
La curadora general de Pinta PArC, Irene Gelfman, destacó en diálogo con LA NACION “el sólido diálogo curatorial que hubo entre el artista Matías de la Guerra y Clara Johnston, a través del color y de piezas de materialidades distintas. Es un gran orgullo que gane una galería que viene de Salta, por la gran dificultad y esfuerzo que es la internalización del arte argentino”. El premio Next, obtenido el miércoles pasado, incluye la bonificación total del stand.
Más allá del aspecto económico, el premio tuvo también un efecto colateral: aumentó el flujo de visitantes a su stand. Desde allí, Elías explica la apuesta que hizo con dos de sus artistas. “El stand une a los dos artistas emergentes, ambos con un uso muy dominante de un color. Clara tiene el azul, que es como un color identitario en su personalidad; Matías, el amarillo, color con el que trabaja hace 10 años. Y los dos hacen reflexiones en torno al paisaje: Clara, con el paisaje exterior, con su serie de fotografías al cielo, y Matías, más bien con el interior o íntimo”.
Matías de la Guerra, también presente en el stand, y con una remera amarilla, explica: “Lo que hago es bastante autobiográfico y me remito a ese lugar íntimo que es el baño, un escenario, donde podía encerrarme y ser libre. Crecí en Salta, una ciudad muy conservadora, y fue bastante difícil para mí ser libre. Mi obra habla sobre eso. Me gusta pensar en ese lugar y los objetos que se encuentran allí como si fueran un público. Estos son jabones hechos con cerámica y están unidos por ‘cabellos’ inmóviles. La instalación se llama Intimidad inmóvil.
Más allá de su éxito en el exterior, artista y galerista destacan la recepción que tienen en Salta, a pesar de que allí el mercado del arte es incipiente y pequeño. “La galería atrajo a los pocos coleccionistas que hay a comprar dentro de nuestra provincia y no viajar necesariamente a una feria de arte afuera. Cada vez hay más movida artística. Somos parte de una corriente de los últimos años enfocada en profesionalizar el arte salteño. El mes pasado se organizó, con iniciativa público privada, la primera feria de arte en Salta, en la que participaron once galerías y se vendieron más de cien obras. Creo que cada vez hay más interés”, opina Elías.
Por María Nöllmann
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