¿Qué vas a leer con tu hijo esta noche? Sobre oficios peculiares y la capacidad de escuchar el silencio
Una selección de libros para los más chicos que llegan este mes a las librerías y, además, algunos recomendados para sumar a la biblioteca familiar
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Para celebrar el Día de los Trabajadores, hoy seleccionamos algunos libros que hablan sobre oficios y profesiones. También, historias originales que presentan otros enfoques a cuestiones cotidianas y a preguntas filosóficas como si es posible escuchar el silencio. Son todos muy distintos. Pasen y lean. Hay que descubrirlos.
Como si fuera tan fácil, de JAL (La Brujita de Papel). Firma con sus iniciales, pero se llama Juan Augusto Laplacette y es psicólogo, investigador y docente. JAL, que en su cuenta de Instagram juega con las letras para formar las palabras “jugar, capacitar e ilustrar”, acaba de publicar este libro para los más chicos con textos e ilustraciones propias que tendrá su presentación virtual el jueves 6 de mayo a las 18. El cuento está protagonizado por Simón, un nene al que todo el mundo le dice que está muy grande (algo que repetimos los adultos cada vez que nos encontramos con un chico grande como si fuera una verdad revelada). La cuestión es que Simón, “a veces, se siente muy chiquito en un mundo que parece inmenso”. Entonces, muchas de las situaciones que vive (y que a los adultos le parecen muy fáciles) son, para él, bastante difíciles. Y tiene razón: ¡cómo si fuera tan fácil pedir un solo deseo o esperar algo que uno quiere sin desesperar!
¿Qué hacen los mayores durante el día?, de Dawid Ryski (Harperkids). Todos (o la mayoría) de los chicos se lo preguntan: ¿qué hacemos los adultos todo el día? Se lo preguntan, especialmente, cuando no estamos con ellos. Y aunque por estos días pasemos muchas horas en casa, igual ellos preguntan qué hacemos cuando estamos ocupados. Siempre tienen nuevas preguntas al respecto. Al ilustrador polaco Ryski se le ocurrió una gran idea: hacer un libro álbum con textos breves sobre las más variadas profesiones. Astronauta, director de cine, periodista, cocinera, jardinero, bombero, abogado, diseñadora, fotógrafo, baterista. Y más. Todo esto acompañado por grandes ilustraciones de estilo realista. Pero hay otro “detalle” que vuelve al libro aún más interesante: el autor tiene una mirada amplia y no plantea distinciones entre oficios y géneros. Así, aparecen mujeres carpinteras y hombres que trabajan de cuidar a personas mayores. Aplausos para Dawid Ryski.
Conexiones, de Walter Binder y Marcelo Tomé (Calibroscopio). Obras en construcción y no de teatro, aclara el pequeño narrador de este relato cuando cuenta en el inicio dónde trabaja su papá. En la primera página cuenta también que su padre lee “novelitas policiales” y que a él le gustan las historietas: leerlas y cambiarlas en los puestos de canjes. El chico lo acompaña a la obra y los sábados al mediodía comen asado con “pan y cuchillo”. “Es como comer entre piratas”, dice. Esos recuerdos, más los de las tareas que hacía para ayudarlo rodeado de cables y herramientas, es el centro de este libro que habla sobre conexiones de toda clase: entre padre e hijo, entre compañeros de trabajo, entre lectores y entre fanáticos de las historias contadas en cuadritos.
Nina. El peor enojo. La mejor sorpresa, de Gabriela Keselman (Norma). Con ilustraciones de Nancy Brajer, este libro para primeros lectores de la serie Torre Naranja está integrado por dos cuentos con una misma protagonista: una coneja azul llamada Nina. En la primera historia, Nina se enoja mucho con su amigo ratón Requesón porque, sin querer, le rompe su juguete preferido. La autora juega con la fantasía y lleva a los lectores de viaje por el mundo de la magia. En el segundo relato, la coneja se despierta una mañana con ganas de recibir una sorpresa especial y hace de todo para lograrlo. Se convierte en una “buscadora de sorpresas”.
Tengo un librito, de Luciana de Luca y Marina Heller (Periplo). Novedad de mayo de la colección Los chiquitines, este libro precioso es ideal para los que les gustan los libros como objeto y todo lo que se puede hacer con ellos. Además de leer, claro. Puede abrir una puerta, proteger de la lluvia y del sol fuerte y, también, puede ser una ventana por donde mirar el mundo. Me encantó. Súper recomendado para los pequeñísimos lectores.
Silencio, de Alexiev Gandman (Edelvives). Entre los lanzamientos recientes de la editorial a nivel local está este libro de la serie Pequeletra para los chicos que están aprendiendo a leer. El autor e ilustrador, que es también fotógrafo, diseñador gráfico y conductor de la sección Arte Gigante del programa Art Attack, presenta a Adrián, un chico que un día sorprende a los padres al preguntar “¿Cómo se hace para escuchar el silencio?”. Gran pregunta gran. Y aunque la respuesta parece muy sencilla (“nos callamos y listo”), pronto se dará cuenta de que escuchar el silencio es un poco más complicado.
Coco Chanel, de María Isabel Sánchez Vegara (Catapulta Junior). Los libros con biografías de grandes figuras de la figura ya son más que una tendencia. Son una moda en crecimiento. La particularidad de la nueva serie Pequeña & Grande es que está dirigida a los más chicos: los textos son breves y están escritos con humor y en rima. Y las ilustraciones son menos realistas que en otros libros del género biografías para chicos. Eso lo hace distinto. En este caso, Ana Alberto eligió usar mucho blanco y negro, los tonos que usaba Coco en sus prendas.
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