¿Qué vas a leer con tu hijo esta noche? Homenaje a Liliana Bodoc a cinco años de su muerte con rescates y nuevas ediciones
Un recorrido guiado por la “biblioteca” infantil de la autora de “La saga de los confines”; además, los libros argentinos premiados por la Fundación Cuatrogatos
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El lunes 6 se cumplen cinco años de la muerte de Liliana Bodoc y, aunque su familia prefiere rendirle homenaje durante todo el año, en especial el 21 de julio, día de su cumpleaños, las editoriales que tienen los derechos de sus libros han lanzado reediciones. Este mes, Alfaguara Juvenil publicó El rastro de canela y Norma prepara para marzo el lanzamiento de 3155 o El número de la tristeza, un relato que integró la antología La historia se hace ficción y que ahora saldrá como libro, ilustrado por Vitu Caruso.
Además, esta semana destacamos los títulos nacionales elegidos por la Fundación Cuatrogatos en su premio anual de literatura infantil y juvenil. Pasen y lean. Todos invitados.
El rastro de la canela (Alfaguara Juvenil). Una reedición del amplio legado literario de la autora de La saga de los confines. Esta novela de amor enmarcada en la época del Virreinato del Río de la Plata y los preparativos por la independencia de España va más allá del romance para invitar a los lectores a reflexionar sobre las diferencias sociales y el lugar de las mujeres en la Historia. Tiene ilustraciones de Laura Michell.
Reyes y pájaros (Norma). Los hijos de Liliana, Romina y Galileo, están recuperando alguno de los textos que quedaron inéditos o a mitad de camino. O, como en este caso, que vuelven a publicarse quince años después a modo de homenaje, como dicen las editoras Laura Leibiker y Laura Linzuain en las palabras preliminares. En otro texto, que funciona como prólogo, los hermanos Bodoc definen a Liliana como “un faro”. Y aseguran que “la Lili comenzaba a ser Liliana Bodoc mucho antes de su boom editorial. Y la prueba concluyente es este libro”.
Ilustrado por Gonzalo Kenny, reúne cuentos “sobre la historia y el poder” (Reyes) y sobre “el amor y la libertad” (pájaros). “Reyes y pájaros es, en definitiva, el primer libro que escribió Liliana Bodoc, allá por los tiempos en los que nadie creía que pudiese hacerlo”, rematan. Un libro fundamental para los admiradores de su obra y, también, para los que quieran descubrirla.
El espejo africano (Norma). La novela histórica de Bodoc, que tiene su adaptación teatral de la que participó la misma autora, ahora viene en dos formatos: una edición de tapa dura, que llegó a las librerías en diciembre, y otra de la serie Torre Amarilla, que saldrá en marzo. Bodoc entrelaza las peripecias de una esclava africana, un huérfano español y el general José de San Martín mediante un espejo muy especial.
Formas de ver, con ilustraciones de Nadia Romero Marchesini (Pez Menta). “Le debo este poema a la dulzura de mi abuelo”, se lee en el inicio de este libro que presenta un texto inédito de Bodoc. La editora María Luz Malamud lo rescató del original que le había entregado la autora hace unos años y enseguida se puso en contacto con Galo, uno de los hijos de la escritora, para proponerle convertir el poema en un libro-álbum que narra el vínculo entre una nieta y su abuelo, “que tiene tres pares de anteojos”. Unos son para mirar, otros para ver y los otros, para contemplar. Una obra poética bellísima y conmovedora para coleccionar que acaba de integra la selección anual de cien libros recomendados por la Fundación Cuatrogatos.
Argentinos premiados
Este año, entre los veinte títulos ganadores del Premio Fundación Cuatrogatos, hay varios de autores y sellos argentinos: Adiós, Chester Binder, de Ángeles Durini; La costura, de Isol; Nave a Tierra, de Martín Blasco; Tres huevos azules y otros cuentos salvajes, de Cristina Macjus, y Vida de un lápiz, de Nicolás Schuff, son algunos de los elegidos en el concurso anual de la organización sin fines de lucro creada en Miami por los escritores Sergio Andricaín y Antonio Orlando Rodríguez. Desde 2014, el Premio Fundación Cuatrogatos destaca los libros de calidad de escritores e ilustradores iberoamericanos.
“Se trata de libros altamente recomendados por sus valores literarios y plásticos que, a juicio de nuestra institución, merecen tener la mayor difusión. Al otorgarles este reconocimiento, deseamos contribuir a que lleguen al mayor número posible de hogares, escuelas, bibliotecas y otros espacios donde se propicie el encuentro de los jóvenes lectores con obras significativas”, explican en el informe. De la selección participaron 1228 títulos de 226 sellos de veinte países y, también, autoeditados.
Destacamos, con orgullo, que varios de los elegidos ya fueron recomendados en esta sección. Aquí están, estos son:
Adiós, Chester Binder, de Ángeles Durini (Loqueleo). Una novela narrada en verso, para lectores de 11, 12 años en adelante, que se copen con la poesía. Cuenta la historia de Ángeles, que vive cambios, despedidas y encuentros. Según el caso (y las ganas del lector) se puede leer de un tirón o disfrutar de a poco, como las golosinas más sabrosas. Tiene ilustraciones de Anabel Fernández Rey y empieza así: “Entrar / a la casa / que era mía / era el jardín / un patio de piedra. / Mi jardín / era el silencio”. Fundación Cuatrogatos lo recomienda para “los que despegaron como lectores”
La costura, de Isol (Fondo de Cultura Económica). De la colección Los especiales de A la orilla del viento, es el primer trabajo que la autora de Petit, el monstruo hizo por encargo y es, también, la primera vez que inventa una trama a partir de un objeto: un chal negro bordado que le habían regalado años atrás cuando visitó el Museo de Palestina. Isol sorprende con una historia fascinante: el texto y los diálogos que conforman la trama juegan con los escenarios de fondo de cada escena, realizado con distintas texturas textiles, costuras y bordados. Fundación Cuatrogatos lo recomienda para “los que despegaron como lectores”.
Tres huevos azules y otros cuentos salvajes, de Cristina Macjus y María Elina Méndez (Pequeño Editor). Cuentos salvajes, cuentos del monte misionero, cuentos con animales en plena naturaleza. Un pirincho que pone tres huevos azules y un coatí que hace monigotadas; un perro que se sumerge en el río Paraná para cuidar a un nene; una multitud de hormigas migrantes; un gato de mal carácter y un perro llamado Batman: animales salvajes y domésticos que conviven con la familia de la narradora, que cuenta la historia “de atrás para adelante” en cuatro relatos que resuenan como tiernos recuerdos de la infancia. Recomendado por Cuatrogatos “para los que empiezan a leer solos”.
Vida de un lápiz, de Nicolás Schuff y Martina Trach (Limonero). “El punto de partida de cualquier libro es un bosque. De ahí viene la madera con la que se hace el papel. Y, en nuestro caso, también el lápiz para escribirlo y dibujarlo”: así empieza el relato, que cuenta la historia de un lápiz que recorre lugares y atraviesa vidas. Cada mano que toma ese lápiz resulta una oportunidad para que Schuff nos cuente un momento en la vida de un personaje. No les voy a contar más: es un libro para descubrir, disfrutar y compartir. Recomendado en el anuario de Cuatrogatos “para los que se atreven con libros retadores”.
Nave a Tierra, de Martín Blasco (Norma). Una novela de ciencia ficción con ilustraciones de Diego Tollo. Integra la colección Torre Amarilla, sugerida para lectores a partir de los 11 años. El jurado del premio la recomienda “para los que se atreven con libros retadores”. Y tiene razón: el autor se mete con el tema de la inteligencia artificial, su relación con las personas y las cuestiones existenciales que plantea esa extraña convivencia.
El grupo de especialistas que eligió el libro entre los veinte ganadores dictaminó: “Con gran economía de personajes y de escenarios, esta obra impacta por los conflictos éticos que plantea, la disparidad y la belleza de sus dos planos narrativos, su brillante uso del diálogo y los puntos de giro de la trama. Una narración concisa y de gran solidez, en la que la exploración de los vastos espacios siderales cede el protagonismo a la indagación en la naturaleza moral de los caracteres y en su compromiso con la supervivencia de la especie humana”.
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