¿Qué vas a leer con tu hijo esta noche? Cinco historias por la paz y un mural para lectores
Buenas noticias del campo de la literatura para la infancia y la adolescencia: salieron cinco libros de grandes autores nacionales, ideales para compartir en la escuela; además, la asociación La Nube ya tiene un mural especial en su fachada
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“Una cultura de paz desde la escuela” es la consigna del proyecto literario 2024 de Editorial Norma que busca “construir un nuevo modo de convivir sin violencias”. Con libros de autores favoritos de los pequeños y medianos lectores como Margarita Mainé, Liliana Cinetto, Paula Bombara, Martín Blasco y Javier Aguirre, la serie incluye cinco títulos para distintas edades que integran diversas áreas y temáticas.
“El proyecto busca acercar a las aulas libros y actividades que pongan en el centro del debate los modos en los que nos relacionamos con el objetivo de construir una nueva cultura que desnaturalice y revierta las violencias”, dice en la presentación del trabajo de unas sesenta páginas, dirigido a docentes y familias, que puede leerse en la web de Norma.
Además de poner en contexto la cuestión que aborda (”En el ámbito escolar, especialmente tras la pandemia y el aislamiento, se incrementaron las problemáticas convivenciales: discriminación, prejuicios, autoagresiones, bullying, violencias verbales, físicas o simbólicas afectan a los diversos miembros de la comunidad educativa: alumnado, docentes, directivos, familias”), el proyecto ofrece pensar y repensar el rol de la escuela y conceptos como convivencia, paz social, política y personal. También, aporta una idea sobre qué se entiende como “cultura de paz” a partir de la definición de las Naciones Unidas: “Un modo de relacionarnos en todas las esferas de nuestra vida. Una práctica para resolver los conflictos de modo pacífico. Un proceso constante que implica: afrontar los problemas que surgen en todas las áreas de la convivencia y buscar salidas pacíficas”.
La propuesta brinda distintos caminos para practicar y promover la “cultura de paz”: entre ellos, la música, el deporte, el arte y la literatura. Los cinco libros publicados por Norma abordan el tema desde la ficción, con historias entretenidas que, por momentos, conmueven y, por momentos, nos hacen reír. También, pensar y disparar las ganas de hablar sobre estas y otras cuestiones.
Para los más chicos, de la colección Buenas Noches, El árbol que sabía contar, de Martín Blasco, ilustrado por Miranda Rivadeneira, es un cuento protagonizado por una gata (Manchi) que conoce de casualidad un árbol muy especial, ya que no solo puede hablar, sino que tiene la habilidad de contar historias sobre miedos y pesares. Súper recomendado para leer antes de dormir. En el proyecto viene una actividad sugerida para después de la lectura compartida: proponer a los chicos que miren una situación o un problema desde otro punto de vista, además de reflexionar sobre “la importancia de intercambiar opiniones y puntos de vista para abordar los conflictos que puedan surgir en el aula”.
En ¡Bienvenido, Malku!, la escritora Margarita Mainé cuenta la historia de Malku, que a los seis años se muda de un pueblo del norte del país a una ciudad, justo cuando empieza primer grado. Debe enfrentar muchos cambios y desafíos y eso, siempre, nos genera angustia. Ilustrado por Rocío Alejandro, el libro es de la serie Torre Roja, para el primer ciclo de la escuela primaria.
Según palabras de la autora, el cuento surgió a partir de la “interculturalidad que veo en las escuelas que visito, los desarraigos”. “En este caso me puse a escribir sobre una mudanza mientras estaba mudando a mi mamá que tiene 89 años de su casa de toda la vida. Creo que parte de la angustia de Malku era mi propia angustia por ese cambio tan difícil. El silencio de Malku lo he sentido más de una vez como docente, cuando un niño atraviesa una situación de cambio en su vida cotidiana”, cuenta Mainé en su sección del proyecto que, para este libro, recomienda a los docentes hablar sobre la problemática de las migraciones.
El libro propuesto para el segundo ciclo (serie Torre Azul) es Las enseñanzas del Maestro Fut Gol, de Javier Aguirre, ilustrado por María Lavezzi, que está centrado en un sabio que sabe mucho de todo, pero más que nada de jugar a la pelota.
Explica el autor: “El Maestro Fut Gol sabe mucho porque escucha mucho. Cuando enseña algo, está compartiendo. Y está convidando poderes mágicos: sus trucos sirven para jugar mejor... y para sentirnos mejor. Cada vez que jugamos a la pelota, aprendemos algo. Este juego es siempre una aventura cambiante y misteriosa. Cada partido, cada equipo y cada jugada generan desafíos nuevos, y resultados que no se pueden prever ni repetir. Amar el juego de pelota es entregarse a esas reglas. Cuando salimos de casa y vamos a la cancha, sentimos el entusiasmo en la panza, no sabemos qué va a pasar: tal vez terminaremos la tarde compartiendo alegrías o, tal vez, compartiendo tristezas. Lo único seguro es que esa tarde... vamos a compartir”.
También para los de segundo ciclo, pero de la colección Torre Amarilla, Muralistas, de Paula Bombara, con ilustraciones de Rodrigo Folgueira, cuenta la historia de Ciro y su primer vínculo con el mundo del arte y la creación colectiva. “Escribir Muralistas tuvo el vértigo de hacer un grafiti en un muro. Acució el tiempo desde el minuto uno, como seguramente también habrá sido escasa la luz para ver las pinturas que cubrieron el interior de las cuevas en tiempos prehistóricos. Sobró amor al color, al lápiz, al pincel y a los aerosoles; sobró admiración hacia quienes se dedican a contarnos historias desde las ochavas y los costados de los edificios; sobró agradecimiento a nuestras y nuestros artistas plásticos, esas personas que no dudan a la hora de pedirte que te sueltes y sigas tu música interna para llegar bailando a la imagen, a la mancha, a la forma, al relato –cuenta Bombara-. Escribir Muralistas fue pintar un lugar tibio donde seis personas logran ser felices un verano y también honrar la vida de los clubes de barrio y las bibliotecas populares, que tanto hacen por nuestras infancias y juventudes”.
Ya en el terreno de los adolescentes, Cuando florezcan los cerezos es una exquisitez imperdible. Con formato de novela, de unas 170 páginas, el título integra la serie Zona Libre, para lectores avanzados. Ya desde la delicada tapa creada por Rodrigo Folgueira queda claro que es una historia que tiene que ver con Japón, la guerra y sus consecuencias.
“Toda guerra es horrorosa, pero me costó encontrar palabras para describir lo que ocurrió ese soleado día de agosto de 1945 en el que cientos de miles de civiles murieron en segundos y la ciudad fue arrasada por completo. Fue tal la destrucción y la masacre que nunca más volvieron a atacarse ciudades con una bomba atómica. Lo que ocurrió en Hiroshima y Nagasaki se ocultó al pueblo japonés y al mundo entero durante años. Y yo quise rescatar esos hechos del olvido, de la indiferencia, de la escasa mención que se hace en los libros de historia, en los que solo se dice que marcaron el fin de la Segunda Guerra Mundial. Pero fue mucho más. No podemos ni debemos olvidar. Y, aunque el contexto mundial parece demostrar que los seres humanos no aprenden y vuelven a enredar países y pueblos en guerras sin sentido y desgarradoras, tengo la certeza de que algunos no miramos hacia otro lado y que trabajamos cada día desde nuestro humilde lugar para construir una paz verdadera. Yo lo hago desde mi novela e intento que mis lectores se conmuevan como yo, aquel día, cuando estuve en Hiroshima”, resume la autora de una historia conmovedora en la que se unen el presente y el pasado.
Un mural para lectores
La asociación La Nube, institución de referencia en la promoción de la cultura de la infancia, ya tiene un mural especial en su fachada (Jorge Newbery 3537). Después de varios años de lucir una pintura en tonos de rosa con un corazón invitado que no hacía referencia a los libros ni a la lectura ahora cuenta con una obra creada especialmente por un artista urbano.
“Leer nos hizo gigantes”, de Lean Frizzera, “es un gran homenaje a la literatura para la infancia, a su historia y devenir. Un homenaje para quienes la escriben y la dibujan... para todas las niñas y niños que dan una vuelta a la manzana, a la ciudad, al país, al mundo... para que crezcan lectoras y lectores que dan vuelta una página, un libro o una pantalla. Para que las bibliotecas sigan siendo espacios para indagar y crear”.
La obra surgió del proyecto “La Nube Session I: intervenciones artísticas y tecnológicas para la valorización del patrimonio literario-audiovisual destinado a la infancia”, a cargo de Ana Medina (La Nube) y Andrés Brandani (Fundación para el Desarrollo Territorial), que contó con el aporte de YPF a través de Mecenazgo (Participación Cultural / Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires).
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