Pinacoteca presidencial: "Que la luz que brota del cuadro ilumine a estos dos hombres"
PARA LA NACIONMaría Paula Zacharías
Cuando Mauricio Macri y Alberto Fernández, presidente saliente y electo, se estrecharon las manos esta mañana en el desayuno para acordar la transición en la Casa Rosada lo hicieron con la custodia de una pieza de arte argentino que salió en todas las fotos: la pintura Diagonales, de Eduardo Mac Entyre (1929-2014), un paladín de la geometría y fundador del arte generativo.
El acrílico sobre tela, de 1965, es un cuadrado perfecto: de 1.20 x 1.20, pertenece al Fondo Nacional de las Artes. "Ojalá que la luz que brota de ese espacio pictórico ilumine a estos dos hombres hacia los consensos que el pueblo se merece", dijo Roger, uno de los hijos de Mac Entyre, cuando confirmó a LA NACION la autoría de la pintura, incluida en el grueso tomo sobre el artista que acaban de publicar con fondos obtenidos por Ley de Mecenazgo.
Mac Entyre desarrolló sus investigaciones ópticas con dos elementos clave: la curva y el compás con el que las trazaba. Así, en su obra, las líneas que no solo engendran formas sino luz. Su pintura parece estar encendida. Según describió el crítico Rafael Squirru, su geometría va más allá de un simple juego sensorial: círculos y curvas devienen símbolos espirituales que alcanzan repercusión universal. Con Miguel Ángel Vidal, fundaron el movimiento que cumple 60 años y tiene manifiesto propio: "...debemos engendrar la belleza lo que es más importante que evadirse, pues esta obras producen también fuerza y energía", escriben ahí y vuelven más oportuna la imagen.
El cuadro llegó al despacho presidencial junto con Macri, que redecoró y renovó las obras de arte cuando asumió hace cuatro años. También pertenece al FNA la obra que se ve a la izquierda de la foto del saludo de los dos presidentes: Interdimensión, de María Martorell, es un óleo sobre tela de 180 x180 de 1971. "Están en calidad de préstamo en el despacho presidencial desde 2016. Los préstamos son una tradición en el FNA que se sostuvo en todas las gestiones. Es parte de la política de difusión de las obras del patrimonio del organismo", explicaron en el Fondo Nacional de las Artes.
Ya se han visto en el mismo despacho obras de Luis F. Benedit, grafismos, líneas y manchas monocromáticas de Eduardo Stupía yuna foto tomada desde un drone del Obelisco decabezado de Leandro Erlich, entre otras piezas de Josefina Robirosa, Rogelio Polesello, Juan Andrés Videla, Alejandro Puente y Roberto Elía. En Olivos, protagoniza las fotos de encuentros oficiales una potente obra de Eduardo Hoffmann: una escalera de un rojo encendido que parece precipitarse al cataclismo.
Tiempo atrás, en la gestión anterior que ahora es también la futura, colgaban en las paredes del despacho principal de la Rosada los retratos de los próceres preferidos de Cristina Fernández de Kirchner : José de San Martín, Manuel Belgrano, Mariano Moreno y Manuel Dorrego. La expresidenta, amante de la historia argentina, había bautizado entonces a su oficina "Hombres y Mujeres de Mayo".
¿Y qué elegirá Fernández, el nuevo primer mandatario? Se sabe que la música lo apasiona. Habrá que ver qué artistas elige para que acompañen sus días en la Casa Rosada a partir de diciembre. Las obras de arte cargan los espacios (y las fotos) de sentido.
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