Pedro Páramo: cumple 60 años la novela latina más influyente del siglo XX
Juan Rulfo creía que no lo habían entendido, pero desde 1955 su obra no dejó de reimprimirse y está presente en las bibliotecas de todo el mundo en cien idiomas
Monocorde y cabizbajo, le costaba digerir los elogios de aquel hombre que lo llamaba "maestro" cada vez que le hacía una pregunta. El periodista español Joaquín Soler Serrano arriaba una entrevista con un invitado encerrado en sí mismo, que respondía, escueto, con los dientes y los labios apretados. Juan Rulfo apenas alzaba la ceja para sorprenderse, en la prehistoria de Internet, del estudio que su interlocutor había dedicado a su vida y obra.
A temprana edad, Rulfo quedó huérfano y su universo se convirtió en una galería de fantasmas en un mundo violento. Como si de un pequeño objeto se tratase, una propiedad del Estado, en esa galaxia de niños sin padres fue enviado a un orfanato más semejante a un correccional que a una residencia: "Lo único que aprendí ahí fue a deprimirme. Conseguí un estado depresivo que todavía no se me pudo curar. Ahí me aplacaron bastante". Era 1977 y ese clima de desolación y abandono lo seguía rondando como un ánima en pena. Esos murmullos -sustantivo con el que pensó titular su célebre ficción- lo visitaron hasta su muerte. Es esta atmósfera la que recrea en la asfixiante Pedro Páramo, su única novela, la mejor de la literatura mexicana y quizá, como sostienen tantos autores (Vargas Llosa, Fuentes, García Márquez), la mejor del siglo XX.
"Considero que es una novela difícil, pero que fue hecha con esta intención: que se necesitara leerla tres veces para entenderla. Mi generación no la entendió ni la consideró interesante. Ya me he olvidado de ella", decía el autor en aquella mítica entrevista que hoy puede verse completa en YouTube. Tal vez los contemporáneos no la comprendieran, pero los autores más jóvenes sí y hoy celebran las seis décadas de este relato. La Fundación que lleva el nombre del mexicano realizó una edición conmemorativa donde 18 críticos, académicos e investigadores exponen sus ideas sobre esta obra breve, pero inagotable por su riqueza: Pedro Páramo: 60 años.
Autor querido y prestigioso
Víctor Jiménez era un estudiante de arquitectura cuando conoció a Rulfo, a quien luego le diseñaría una pequeña casa de campo. El vínculo y la admiración se prolongaron durante veinte años, hasta la muerte de aquél. Hoy, Jiménez preside la Fundación que lleva el nombre de un autor tan querido como prestigioso. "Pedro Páramo es la obra literaria escrita en México que representa a la literatura mexicana en el país y en el mundo. Se trata de una obra (junto a El llano en llamas) que se reimprime de manera continua (un long seller, para referirnos de esta manera a lo que se designa también como un clásico), que está casi en cada casa mexicana y que se ha traducido a unas cuarenta lenguas (en algunas, más de una vez) y se puede encontrar en librerías de casi un centenar de países. Pero no es lo único que se puede decir, por ejemplo, si nos remitimos al ámbito de la lengua española: la novela de Rulfo es un referencia constante en los escritores españoles y latinoamericanos: Mario Benedetti, José María Arguedas, Gabriel García Márquez, Jorge Luis Borges, Mario Vargas Llosa, Enrique Vila Matas, Ricardo Piglia, Sergio Ramírez y otros menos conocidos han escrito sobre ella con admiración."
Tras publicar, en 1953, El llano en llamas, Rulfo obtuvo una beca de la Fundación Rockefeller y por cinco meses se encerró a escribir esa novela fundamental donde la estructura es protagonista. Juan Preciado le promete a su madre, mientras ella agoniza, que irá a buscar a su padre verdadero, Pedro Páramo, más que un cacique -un encomendero- de Comala. Hay indicios, claves y voces de este relato que al promediar la novela dará un giro inesperado y llevará al lector nuevamente a las líneas previas, que cobran otra dimensión. Comala es un escenario infernal. A diferencia de los recuerdos de la madre de Preciado, que añoraba las verdes extensiones de su pueblo, el narrador se encuentra con un territorio estéril, sólo habitado por el polvo y que nadie ha visitado en años. El camino hacia Comala es un camino de descenso a los Infiernos y, a la vez, una constante búsqueda del padre, como Telémaco en la Odisea.
La influencia que Pedro Páramo tuvo en los autores latinoamericanos que luego integrarían el boom es inconmensurable. La crítica de entonces solía referirse a la inspiración que William Faulkner había ejercido en la construcción de este relato, hecho que hasta el día de hoy suele mencionarse. Fue el mismo Rulfo quien admitió haber leído al escritor de El sonido y la furia, pero le quitó importancia al efecto que el estadounidense hubiese ejercido en su prosa. García Márquez recuerda en "Breves nostalgias sobre Juan Rulfo" el punto de inflexión que significó en su literatura esta novela. El colombiano ya tenía varios libros publicados y halló la clave, la musa para un nuevo camino. Como ejercicio, en las materias de literatura latinoamericana suele compararse la novela del mexicano con la monumental Cien años de soledad, y son varios los puntos de entrelazamiento.
Rulfo rompe con el código de la novela de la tierra (Don Segundo Sombra, Doña Bárbara, etc.) y quiebra las estructuras establecidas de la narrativa en cuanto a tiempo, espacio y personajes. "El tiempo y el espacio están rotos. Es una novela de fantasmas que de pronto cobran vida y la vuelven perder", explicaba Rulfo. Además, acude al multiperspectivismo, o de la polifonía de narradora, una técnica que ronda esta compleja novela, absolutamente innovadora para su época. Luis Leal, en su ensayo "La estructura de Pedro Páramo", señala la cantidad de niveles que posee esta obra, muy alejada del narrador omnisciente decimonónico y realista.
"Para mí, el ideal no es reflejar la realidad tal como es. Porque la realidad actual la estamos viviendo, la estamos leyendo en la prensa, viendo por televisión. Al escritor hay que dejarle el mundo de los sueños y no de la realidad", pronunciaba Rulfo, un hombre a quien le faltó cariño en vida, pero le sobran caricias en la eternidad. Como sus personajes, siempre seguirá vivo, conviviendo con los mortales.
Sesenta tapas que mantienen vivo el mito
Voces de mucha autoridad hablan de esta obra con mayúsculas
G. GARCÍA MÁRQUEZ
Escritor colombiano
"No había acabado de escapar al deslumbramiento cuando alguien dijo que yo era capaz de recitar de memoria párrafos completos de Pedro Páramo. La verdad iba más lejos: podía recitar el libro completo, al derecho y al revés, sin una falta apreciable, y podía decir en qué página de mi edición se encontraba cada episodio"
CARLOS FUENTES
Escritor mexicano
"Novela misteriosa, mística, musitante, murmurante, mugiente y muda, Pedro Páramo concentra así todas las sonoridades muertas del mito. Mito y muerte. Novela mexicana esencial, insuperada e insuperable, Pedro Páramo se resume en el espectro de nuestro país: un murmullo de polvo desde el otro lado del río de la muerte"
JORGE LUIS BORGES
Escritor argentino
"Pedro Páramo es una de las mejores novelas de las literaturas de lengua hispánica, y aun de la literatura"
Mario Vargas Llosa
Escritor peruano
"Con sólo dos breves libros impecables, una colección de cuentos y una novela, Rulfo ejecuta el indigenismo verboso y exterior. Su prosa ceñida, que recrea sutilmente el habla popular de Jalisco, erige un pequeño universo sin tiempo, de violencia y poesía, de aventura y tragedia, de superstición y fantasmas, que es, al mismo tiempo que mito literario, una radiografía del alma mexicana".
Edición aniversario
Fundación Juan Rulfo
La única novela del autor mexicano se reeditó recientemente en un volumen especial donde 18 críticos, académicos e investigadores, con coordinación de Víctor Jiménez, presidente de la Fundación, se refieren a la relevancia de Pedro Páramo, sus personajes, recursos, tópicos, conflictos e innovaciones
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