Nace la Casa de la Escritura en una biblioteca reimaginada
Funciona en Villa Crespo y comparte sede con la Casa de la Lectura; ofrece un gran menú de actividades gratuitas como clases magistrales, talleres literarios, clínicas de poesía y narrativa a cargo de escritores reconocidos
- 3 minutos de lectura'
Hace un tiempo al periodista y crítico literario Maximiliano Tomas se le ocurrió crear un espacio donde cualquier aficionado a la escritura pudiera acceder gratis a los talleres de los escritores más importante del país. El proyecto tomó forma gracias al impulso de la Red de Bibliotecas de la Ciudad y hoy finalmente abrió sus puertas: la Casa de la Escritura, instalada en la Casa de la Lectura (Lavalleja 924, Villa Crespo), inauguró con una charla en la que participaron Tomas, Leila Sucari, Julián López, Juan Sklar y el Ministro de cultura de la Ciudad, Enrique Avogadro.
“Son 39 docentes que en estos tres meses van a ofrecer talleres gratis en un momento en el cual la gratuidad y la presencia del Estado están en tensión”, dijo Tomas, quien junto con Adriana Kogan y Brenda Algozino, logró desarrollar un programa atractivo para escritores aficionados, principiantes y avanzados. En el primer llamado se anotaron 1200 personas, casi el triple del cupo previsto.
Las actividades comenzaron este mes y se extienden hasta fin de año. Hay clínicas de poesía y narrativa, clases magistrales de literatura, talleres para explorar la música y la poesía e instrucciones para escribir sobre arte a cargo de reconocidos escritores, como Gabriela Bejerman, Martín Kohan, Cecila Pavón, Mariano Llinás y Diana Bellesi.
“De nuestro lado, es un orgullo presentar esta propuesta”, dijo Enrique Avogadro. “Es parte de re-imaginar el rol de las bibliotecas públicas. Me parecía interesante que fuera en la Casa de la Lectura. En ese pasaje de la lectura a la escritura se cifra el desafío de promover la capacitación cultural. Esta es una ciudad de libros, de escritores. En un momento en que se está discutiendo si el Estado debe estar presente, si la educación debe ser o no gratuita, esta Red de Bibliotecas confirma el rol de la cultura. Apúrense que se agota”.
El espacio está pensado como un lugar de encuentro y formación para personas de todas las edades. “Para muchos, escribir es una tarea que se hace en soledad. Pero a la hora de leer, mostrar, corregir aquellos textos creo que es mejor estar cerca de pares y maestros que puedan ofrecer una mirada enriquecedora”, dijo Tomas a LA NACION. “Sí, se puede enseñar a escribir. Hay conceptos y procedimientos que son perfectamente transmisibles. Lo que no se puede enseñar es a ser escritor, menos a ser un gran escritor”.
Tomas no le teme a la muerte del libro y espera que el programa se consolide y crezca. “Es como la rueda o el tenedor, uno de los grandes inventos de la humanidad. La experiencia de lectura no puede ser reemplazada por el visionado de una película o una serie. Son maneras esencialmente diferentes de enfrentarse a un hecho artístico. Seguramente habrá personas que no logren disfrutar el placer de leer una buena historia en papel. Peor para ellos”.
Más tarde, Mercedes Halfon moderó un conversatorio entre Dolores Reyes, Margarita García Robayo y Laura Wittner. Las tres escritores dialogaron sobre sus caminos en la escritura y el desafío de encontrar una voz propia. Por último, Dani Umpi musicalizó el cierre.
Para agendar
En la Biblioteca Casa de la Lectura y la Escritura (Lavalleja 924, Villa Crespo), los talleres literarios son gratuitos y requieren inscripción previa a través de la página web.
Otras noticias de Libros
- 1
El director del Museo de Bellas Artes actúa en “Queer”, la adaptación de la novela del ícono contracultural William Burroughs
- 2
Murió Beatriz Sarlo a los 82 años
- 3
“Blackwater”: la saga matriarcal de terror gótico que es un fenómeno global
- 4
El legado de Beatriz Sarlo se define entre el exmarido y los discípulos de la intelectual