Alberto Manguel criticó el pabellón futbolero que llevó el país a la Feria del Libro de Bogotá
"Vergonzoso" y "un absurdo gesto de populismo", así consideró Alberto Manguel el pabellón argentino en la Feria del Libro de Bogotá (Filbo), Colombia , en el que el fútbol tiene un lugar preponderante.
Anteayer, durante una charla que dio en ese mismo espacio, el escritor, director de la Biblioteca Nacional Mariano Moreno , dijo: "Pido disculpas en nombre de todos los argentinos por el vergonzoso escenario de un estadio de fútbol montado en una fiesta del libro; celebramos seguramente esos notables futbolistas Borges, Bioy Casares, Alejandra Pizarnik, Cortázar, desde el Martín Fierro en adelante. Pero les pido de nuevo disculpas por ese gesto tan absurdo de populismo".
Como país invitado de honor, a la Argentina se le cedió uno de los pabellones de 3000 m2 con un ubicación central en el gran predio ferial de Bogotá -Corferias-, que se diferenció del resto por el look temático y su lema: "La literatura argentina sale a la cancha".
Además de la fachada, que evoca la camiseta de la selección nacional, el ingreso a través de una "manga" iluminada y dos generosos espacios para patear pelotas reales y virtuales revisten la presencia argentina de un espíritu deportivo. Fue una decisión del ministro de Cultura de la Nación, Pablo Avelluto, quien consideró el fútbol un "gancho" que podía atraer mayor cantidad de visitantes al stand argentino. En su interior, una gran librería ofrece unos ocho mil títulos de autores argentinos clásicos y modernos.
Manguel participó de la Filbo, que hoy cierra sus puertas, con una charla destinada a dilucidar "¿Por qué leemos?". Había llegado a Colombia con la expectativa, en términos personales, de encontrarse con amigos de ese país y regresar a Bogotá, una ciudad que ama. Y, como argentino, con ganas de "aprender algo de la cortesía colombiana y de su capacidad para entablar diálogos políticos que no sean intercambios de insultos patoteros".
Con el desacuerdo de Manguel han coincidido otros escritores, como Ivonne Bordelois, que publicó una columna en esta sección: "Como miembro de la delegación que concurrirá a este evento, no sé si contratar un personal trainer que me enseñe acrobacias destinadas a no desmerecer las hazañas futbolísticas de mis colegas, que sin duda deslumbrarán a los espectadores".