Liniers recibió el premio La Catrina en la Feria del Libro de Guadalajara
Rodeado de sus personajes más queridos, como el monstruo Olga, Liniers fue condecorado en la Feria del Libro de Guadalajara con uno de los premios más importantes al humor gráfico de América latina: La Catrina, una estatuilla esculpida en bronce por Rubén Hernández en base a la imagen de la tradición mexicana creada por Sergio Aragonés. Es el máximo reconocimientos a los caricaturistas mexicanos y extranjeros cuya trayectoria ha marcado no solo un punto de diferencia con el estilo de sus gráficos si no una semilla de conciencia en el ámbito social.
Impulsado desde hace 18 años por el Encuentro Internacional de Caricatura e Historieta, el premio ha destacado la trayectoria de otras figuras argentinas como Quino (en 2003) y Roberto Fontanarrosa (en 2006).
El creador de "Macanudo" recibió la distinción de manos de Raúl Padilla, presidente de la FIL Guadalajara, quien destacó que Liniers ha "desdibujado las barreras del arte" a través de su humor y una manera muy sagaz de retratar al mundo.
Contento y emocionado, Liniers agradeció el reconocimiento y destacó que su amor por México también se ve reflejado en "La Guadalupe", personaje con el que rinde homenaje a José Guadalupe Posada y el humor negro que caracteriza a los mexicanos.