La Secretaría de Cultura pasa a depender directamente de Presidencia de la Nación
Sale de la órbita de Capital Humano y se espera que, en la práctica, sea Karina Milei y no su hermano quien dirija el área de Cultura, a cargo de Leonardo Cifelli
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El Gobierno anunció hoy un nuevo cambio en el “mapa del Estado”. Por medio del decreto 989/2024, que modifica la ley de Ministerios, el Poder Ejecutivo oficializó el pase de la Secretaría de Cultura del ámbito del Ministerio de Capital Humano, a cargo de Sandra Pettovello, directamente a la Presidencia de la Nación, convirtiendo el organismo en una Secretaría Presidencial, como Legal y Técnica y de Inteligencia.
El decreto reconoce la importancia social de la cultura y su impacto en la economía. “Con el objetivo de optimizar la gestión de gobierno resulta conveniente suprimir las competencias asignadas al Ministerio de Capital Humano en todo lo concerniente a la cultura -se lee en el artículo 1° de la norma publicada hoy en el Boletín Oficial-. Que la cultura es fundamental para el desarrollo social, en tanto promueve la transmisión de valores, tradiciones y conocimientos, así como también fomenta la identidad y el sentido de pertenencia, lo que a su vez fortalece el tejido social, y tiene un impacto significativo en el desarrollo económico, a través de industrias creativas, turismo cultural y actividades artísticas que generan empleo y contribuyen al crecimiento sostenible”.
“Que, en virtud de ello, resulta conveniente readecuar el ámbito jurisdiccional de la Secretaría de Cultura actuante en el ámbito de dicho Ministerio, la que funcionará como Secretaría Presidencial”, establece.
Crece el centro presidencial. Cultura pasó a depender del presidente como secretaría. Ya son 7 secretarías. Hay que remontarse a Nestor Kirchner para encontrar un centro presidencial de esta envergadura https://t.co/xDWZgQsctb
— Maria Coutinho (@mecoutinho) November 6, 2024
“Las tareas necesarias para posibilitar la actividad del Presidente de la Nación serán atendidas por las siguientes Secretarías Presidenciales: 1. General 2. Legal y Técnica 3. De Planeamiento Estratégico Normativo 4. De Prensa 5. De Inteligencia de Estado 6. De Comunicación y Medios 7. De Cultura. Las Secretarías enunciadas precedentemente asistirán al Poder Ejecutivo Nacional en forma directa. Análoga asistencia prestarán las demás Secretarías y organismos que el Presidente de la Nación cree al efecto, sin perjuicio de sus facultades de modificación, transferencia o supresión de dichas Secretarías y organismos”.
Se esperaba que Cultura pasaría a la órbita de la Secretaría General de la Presidencia, a cargo de Karina Milei, según los dichos del responsable del área. Sin embargo, fuentes de Cultura puntualizaron que en lo operativo la nueva secretaría presidencial dependerá, en la práctica, de la hermana del Presidente. “Había un impedimento de sostener una secretaría bajo otra”, dijeron.
En su exposición ante la Comisión de Cultura de la Cámara de Diputados, el secretario de Cultura Leonardo Cifelli había dicho que “bajo la Secretaría General de la Presidencia, a cargo de Karina Milei, vamos a profundizar la presencia argentina en el mercado internacional trabajando en conjunto con Cancillería, la Agencia Argentina de Inversiones y Marca País”.
En esa ocasión, el funcionario agregó: “Volveremos a visitar ARCO Madrid, acompañando a las galerías y artistas de nuestro país para que tengan más oportunidades de negocios. Avanzaremos en quitar todas las trabas burocráticas que entorpecen el camino de cada persona que intenta trabajar en las industrias culturales de nuestro país. Y vamos a seguir adelante en el tratamiento, modificación o eliminación de leyes fundamentales para la libertad de las industrias culturales”.
Se estima que ahora la Secretaría de Cultura tendrá una estructura financiera legal propia, el Servicio Administrativo Financiero (SAF), que permitiría, por ejemplo, volver a proveer a los museos de una “caja chica” para los gastos corrientes, uno de los reclamos que se le hicieron a Cifelli en Diputados. Actualmente, muchos de estos gastos corren por cuenta de las asociaciones de amigos de los museos.