La novelista que defiende a Garzón
"Nuestras libertades y nuestros derechos son la victoria póstuma de los republicanos que perdieron la guerra en el 39." Desde la tribuna, en la Puerta del Sol, Almudena Grandes arengaba a fines de enero al público, como representante de la "Plataforma Solidarios con Garzón", una agrupación creada para oponerse a la inhabilitación del juez que investigaba los crímenes del franquismo. La posición de la escritora es franca: no se embarcó en el proyecto de crear una serie de seis novelas sobre las décadas de la dictadura porque sí, no tiene una mirada equidistante sobre ese largo período ni piensa que el tiempo transcurrido tendría que disimularlo todo. En el debate abierto en España, la autora tiene una posición tomada, tan firme que le ha valido enfrentamientos y polémicas. La más resonante de ellas, con el político y escritor Joaquín Leguina. Aunque es socialista y dirigente del PSOE, Leguina censuró duramente a Grandes: "Somos muchos los que, hartos de simplificaciones, nos negamos a que la izquierda se reduzca a ser la mera expresión de una aversión maniqueísta sin ningún rigor intelectual", le dijo. Almudena le contestó con un verso de Luis Cernuda: "Tu nombre envenena mis sueños".