Jorge Telerman asumirá como director del Teatro Colón en reemplazo de María Victoria Alcaraz
El cambio se oficializó en la última hora tras un día entero de rumores; la decisión se precipitó tras la crisis que principalmente desató en la institución la renuncia de Paloma Herrera al Ballet Estable
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LA NACIONMauro Apicella
Tras varias semanas de crisis internas, se confirmó esta tarde que Jorge Telerman será el nuevo Director General del Teatro Colón en reemplazo de María Victoria Alcaraz, quien ocupó el cargo desde 2015. Desde el comienzo de la semana los rumores de recambio comenzaron a sonar cada vez más fuerte, lo que precipitó la decisión luego de varias reuniones que se realizaron en el Gobierno de la Ciudad durante la tarde de ayer y hasta hoy por la tarde.
Más allá de que la programación 2022 está cerrada y en marcha -la ópera La Bohéme sube a escena la próxima semana-, el nombre de Telerman sugiere una nueva etapa para el gran coliseo argentino después de un comienzo de año que resultó muy accidentado. Sobre todo a partir de la renuncia de Paloma Herrera como directora del Ballet Estable, que se hizo efectiva el 31 de enero último. Y semanas atrás, con la desvinculación de Miguel Galperín, quien estaba al frente del Centro de Experimentación del Teatro Colón (CETC) desde hace más de una década.
A estas salidas se les debe sumar el “ruido” que se genera cada vez que el teatro abre su sala principal a producciones externas, generalmente ligadas a la música popular (del folklore al tango, del pop al rock). El caso más reciente fue el del Festival Únicos, con recitales de solistas y grupos como La Beriso.
El cambio en el timón quedó oficializado por un comunicado del Gobierno de la Ciudad, que dice: “Luego de 6 años, María Victoria Alcaraz, Directora General del Teatro Colón deja su cargo para asumir un nuevo desafío en el ámbito del Ministerio de Cultura de la Ciudad. El actual Director General del Complejo Teatral de la ciudad de Buenos Aires, Jorge Telerman, asumirá la Dirección del teatro lírico”.
“Agradecemos profundamente el aporte que hizo María Victoria conduciendo el Teatro Colón con responsabilidad y profesionalismo -indicó Enrique Avogadro, Ministro de Cultura de la Ciudad-. Realizar una programación de excelencia, abrir las puertas del Teatro a nuevos públicos, reposicionarlo internacionalmente y crear el Colón Fábrica son solo algunos ejemplos de su gestión”, señaló el funcionario.
Profesora de Historia y especialista el políticas y gestión cultural, María Victoria Alcaraz llegó a la dirección del teatro en 2015. Su gestión se proyectó en distintas direcciones, como la ampliación de actividades, funciones y públicos y, durante los dos últimos años, se vio atravesada por la pandemia, lo que obligó a levantar casi en su totalidad lo agendado para las temporadas de 2020 y 2021.
La nueva gestión
El ingreso de Telerman al Colón deja vacante, a su vez, la dirección del Complejo Teatral de Buenos Aires, un conjunto de cinco salas que tiene al San Martín como nave insignia. Destino o casualidad, vale recordar que Telerman no es el único gestor cultural que llega a las direcciones generales de estos dos grandes espacios culturales porteños. Kive Staiff fue director del Complejo Teatral (en su época denominado Teatro San Martín) durante tres largos períodos: 1971-1973, 1976-1989 y 1998-2010. Años después, su presencia en el Teatro Colón fue mucho más breve.
El comunicado del Gobierno de la Ciudad señala las aptitudes del flamante funcionario que toma el mando: “Jorge Telerman tiene una destacada experiencia en la gestión cultural, y fue siempre uno de los principales impulsores de la cultura pública y de calidad en la ciudad de Buenos Aires. Asimismo en los próximos días el Ministerio de Cultura del Gobierno de la Ciudad anunciará el nuevo Director General y Artístico del Complejo Teatral De Buenos Aires”
La temporada 2022, que condensa buena parte de lo que no subió a escena los dos años anteriores, está comenzando, pero los movimientos internos de los últimos meses parecen haber corrido el foco de atención en lo que vaya a suceder sobre sus escenarios. Sin duda, la renuncia de la bailarina Paloma Herrera a su cargo en la dirección del Ballet Estable fue mucho más que un cambio de nombres (en su lugar Mario Galizzi, de larga experiencia como bailarín, maestro y coreógrafo, también dentro del teatro).
“Es indeclinable. No voy a volver, no tiene sentido, todo lo que podía hacer lo hice. Lo que se necesita cambiar es más de base”, decía Paloma Herrera a LA NACION, cuando se conoció la noticia de su alejamiento, por una carta que le envió a la Directora General.
Una semana después se abrió otro frente de conflicto, porque los bailarines del Ballet Estable emitieron un comunicado vía redes sociales con varios reclamos, entre ellos, que se conociera en profundidad la situación del cuerpo artístico. Allí pidieron que se resolviera el problema de su jubilación que, según se señala en el texto, “estanca el engranaje del que dependen las nuevas generaciones”.
A principios de marzo se conoció la renuncia de Miguel Galperín a la dirección del CETC. Y sus motivos fueron muy contundentes. Los expresó durante una charla con LA NACION: “No estoy de acuerdo con hacer del Teatro Colón un museo, esa es la razón de mi renuncia. Es una programación tan conservadora y desinteresada por las nuevas expresiones que convierte a toda una institución en un museo”, explicó. Lo que determinó su alejamiento fue la necesidad de hacer cambios en el calendario del Centro de Experimentación porque en sus instalaciones funcionaba un vacunatorio, para atender a las necesidades sanitarias contra la pandemia Covid-19.
Por Mauro Apicella
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