Hugo Boatti Ossorio
El sepelio
Ha repercutido dolorosamente la muerte del embajador Hugo Boatti Ossorio, de extensa trayectoria en el cuerpo diplomático argentino, fallecido a los 80 años.
Nacido en Morón en 1925, estudió en el colegio Champagnat y en el Instituto Libre de Segunda Enseñanza. Se graduó de abogado en 1947 en la Universidad de Buenos Aires (UBA) y ejerció la profesión en esta capital y en La Plata.
En ese tiempo militó en la Unión Cívica Radical -fue concejal en Morón- y por sus actividades políticas fue detenido durante seis meses en 1953. Fue, además, funcionario de la intervención federal en la provincia de Buenos Aires.
En 1955 ingresó en el cuerpo permanente del servicio exterior como consejero de primera clase. Designado en la embajada argentina en Italia, cumplió sucesivas misiones en Sudáfrica, Finlandia y Bélgica, entre otros destinos. Se destacó luego como embajador ante la Comunidad Económica Europea y en Hungría, Suecia, Canadá y Alemania Federal, en las etapas previas a la reunificación.
Entre otras funciones, en nuestro país se le confió la Dirección Nacional de Culto y fue subsecretario técnico del Ministerio de Relaciones Exteriores y Culto, durante la gestión del canciller Juan Ramón Aguirre Lanari. Tuvo una activa participación al ser convocado como asesor de las comisiones mixtas entre la Argentina y Paraguay para los proyectos de Yacyretá-Apipé y Corpus.
Boatti Ossorio fue miembro de varias instituciones culturales y sociales, como el Consejo Argentino de Relaciones Internacionales (CARI), del que fue miembro consultor, y el Jockey Club de Buenos Aires, entre otras.
Recibió importantes distinciones y fue condecorado por los gobiernos de Bélgica, Bolivia, Paraguay y Suecia. Era, además, caballero de la Soberana y Militar Orden de Malta.
Casado con Mercedes Riglos, formó una familia ejemplar.
Sus restos fueron sepultados en el cementerio de la Recoleta.