Homenaje a Gustavo Roldán y Dragón, su libro más querido
Cuentos susurrados al oído, canciones a viva voz, puestos con libros para chicos, talleres de arte y lectura y charlas con autores e ilustradores: estas y otras actividades culturales se desarrollaron ayer en el Encuentro Literario Gustavo Roldán en el Ecunhi. Laura Devetach y Luis Scafati rindieron homenaje a Dragón, el título emblemático de Roldán, a veinte años de su publicación.
Dragón fue el motivo central de la sexta edición del festival. Y como los dragones del libro publicado por Sudamericana en 1998 se enamoran, lloran, maldicen, bailan, vuelan y bendicen, en la apertura del encuentro hubo "bendiciones de dragón", a cargo del narrador Claudio Ferraro. También, "susurros de dragones", acción poética del grupo Los Susurrantes Solidarios que cautivó a padres e hijos.
"Gustavo tenía muchos territorios, más de lo que solía mostrar –aseguró Devetach, madrina del festival en honor a su compañero de vida durante 55 años–. En sus obras sacaba a la luz el vínculo con la naturaleza que mantuvo desde la infancia. Dragón estaba escondido en esos recovecos internos. Se ve que estaba enamorado de los dragones desde siempre. Cuando preparó una antología de cuentos con animales mitológicos, el primero que apareció fue el dragón. Escribió el segundo cuento y también estaba el dragón. Escribió el tercero y otra vez apareció el dragón. ‘Me salió otro de dragón’, me dijo sorprendido. ‘¿No será que tendrías que escribir sobre el dragón’?, le dije entonces. Y así fue. Cuando lo leí terminado encontré mucha poesía. Dragón es el yo narrador de Roldán".
Scafati, autor de la tapa y de las ilustraciones interiores, recordó que la amistad con el escritor chaqueño nació apenas lo conoció en la editorial cuando lo convocaron para hacer los dibujos y darle forma al libro. "Leí mucho sobre la figura del dragón en las distintas culturales. Y me salieron distintos dragones para cada cuento, aunque creo que en el fondo es el mismo". Uno de los chicos del público le preguntó cuál fue el dibujo que le resultó más difícil: "El de la tapa", respondió sin dudar. "¿Y el que más te gusta?", le preguntó otro. "El de ‘Llanto de dragón’ porque es casi transparente, distinto a todos".
Laura Roldán Devetach, autora y promotora de la lectura, presentó a continuación un recorrido por tres libros de su padre (Crimen en el arca, La pulga preguntona y El viaje más largo del mundo) para revelar a los asistentes el origen de los protagonistas de cada relato. Leyó fragmentos, contó anécdotas familiares y mostró fotos de un viaje al pueblo chaqueño, Fortín Lavalle, donde nació Roldán. Allí, de chico, jugaba con monos y otros "bichos", que luego protagonizaron sus cuentos. "La verdadera pulga preguntona era yo", confesó entre risas.
El público, que colmó el auditorio del centro cultural desde temprano, aplaudió a rabiar a los chicos ganadores del concurso de cuentos ¿Quién apaga las estrellas?, creado en tributo a Roldán. Dirigido a chicos de entre 7 y 13 años, la consigna de este año partió de una frase del autor deLa canción de las pulgas: "Cualquiera que aprende a volar, puede resistir". El jurado estuvo formado por las escritoras Adela Basch y Silvina Rocha, el ilustrador y autor Juan Lima, y Verónica Parodi, directora del Ecunhi. En la entrega de premios se leyeron fragmentos de algunos de los desopilantes cuentos. Uno de ellas está protagonizado por una madre voladora.