Habrá clases hasta el 23 de diciembre por los paros
Se decidió para compensar las huelgas; nueva protesta docente
Quinto día de paro en lo que va del año escolar, 350.000 estudiantes sin clases, extensión del ciclo lectivo en la Capital hasta el 23 de diciembre y nuevos incidentes frente a la Legislatura: ése fue el balance de otra tensa jornada de debate sobre el proyecto del gobierno de Mauricio Macri de reemplazar las Juntas de Clasificación Docente, que determinan las designaciones y los ascensos de maestros en la Ciudad, por un nuevo organismo.
El ministro de Educación porteño, Esteban Bullrich, afirmó que el ciclo lectivo se prolongará una semana –es decir, hasta el día previo a la Nochebuena– en los colegios cuyos docentes adhirieron al paro para poder alcanzar los 185 días de clases. También confirmó que se descontará el día a los maestros que no acudieron a trabajar.
Cerca de las 17, cientos de docentes que se manifestaban frente a la Legislatura porteña derribaron las vallas que habían colocado las fuerzas de seguridad para evitar que se repitieran los desmanes producidos la semana pasada. En esa ocasión, un grupo de docentes irrumpió a la fuerza en el edificio con la intención de presionar y participar de las deliberaciones. Hubo 7 heridos, uno con arma blanca, lo que provocó la suspensión del debate, que se reanudó ayer en las comisiones de Educación y Legislación Laboral, y finalizó con la aprobación del dictamen, que llevará el proyecto de Pro al recinto.
La iniciativa obtuvo 7 votos a favor y 6 en contra, en tanto que 3 se inclinaron por el proyecto de Sergio Abrevaya, de la Coalición Cívica. Como respuesta, los docentes adelantaron que instalarán una carpa frente a la Legislatura y realizarán un cese de actividades cada vez que se intente debatir el proyecto en el recinto, lo cual podría ocurrir el 17 o el 24 del actual. Al cierre de esta edición, algunos maestros aún permanecían frente al edificio.
El paro fue organizado por los sindicatos docentes para manifestar su desacuerdo con el proyecto de ley "Democratización, transparencia, y organización del sistema de clasificación docente", presentado hace aproximadamente un mes por los legisladores Enzo Pagani y Victoria Morales Gorleri, de Pro. Este nuevo sistema busca eliminar las Juntas de Clasificación Docente y reemplazarlas por uno nuevo, que mediante el uso de computadoras será, afirman, "más rápido y transparente".
La jornada de ayer comenzó con más del 95% de acatamiento del paro docente, según informó el sindicato mayoritario, UTE-Ctera. Bullrich, en tanto, en declaraciones a Radio 10, señaló: "Hoy no vemos que se elija a los mejores docentes. Si hay algo que no podemos decir en la Argentina a esta altura es que el sistema educativo tiene calidad. Nosotros estamos proponiendo que los mejores docentes sean los que lleguen a los cargos y hoy no pasa eso. Si un docente hizo un curso de perfeccionamiento en historia, es lo mismo que uno que no lo había hecho", enfatizó. "Si proponemos un debate democrático para corregirlo, la respuesta es dejar a los chicos sin clases", argumentó, al cuestionar la actitud sindical.
Los gremios acusan al oficialismo porteño de querer "disciplinar a los docentes" y de desear que "la asignación docente la realice el gobierno de turno", según dijo días atrás a LA NACION el secretario de UTE, Eduardo López.
"Han pasado varias semanas de discusión y todavía no se ha podido llegar a ninguna conclusión que aclare el escenario. No entendemos tanta urgencia del macrismo por el tratamiento del proyecto cuando hay todavía demasiadas cuestiones por debatir", afirmaron desde el bloque de la UCR.
Bullrich mantendrá mañana una reunión con los representantes gremiales. "Vamos a ir porque acudimos cada vez que nos convocan, pero no entendemos el deseo de legislar algo sin consenso social", afirmó a LA NACION Mariano Denegris, del sindicato mayoritario.
El conflicto se inició el mes pasado cuando, en desacuerdo con el proyecto de Pro, 17 gremios docentes exigieron que se "levantara" ese texto y realizaron un paro de 48 horas que -se afirmó- tuvo un 98% de acatamiento.
El sistema actual, aprobado en 1986, se compone de 15 juntas de evaluación docente (una por cada nivel educativo y una de disciplina). Cada una está compuesta por nueve integrantes (6 elegidos a través de elecciones docentes -4 representantes por la mayoría y 2 por la minoría- y 3 elegidos por el Poder Ejecutivo de la ciudad). Así, los distintos integrantes de las juntas realizan una función de contralor sobre los restantes. El nuevo sistema desintegra estas juntas y constituye una Oficina Unica, que tendrá la misma tarea de evaluación, nombramiento y ascenso de docentes.
"Queremos transparentar el sistema de clasificación y que los docentes tengan reglas claras. Estamos en un momento en que debemos plantear una modificación de fondo", señaló Verónica Morales Gorleri, de Pro.
En cambio, para Denegris, con el nuevo proyecto "Pro clasifica, decide los concursos y elige a los jurados", y añadió: "Lo único que podemos hacer los docentes es acudir a una junta de control si consideramos que nuestro puntaje no es correcto".
El gobierno porteño afirma que la modificación del actual sistema tiene como fin darles respuesta a más de 4000 docentes que esperan la titularización. "Nosotros somos los primeros que queremos la titularización, pero el gobierno también integra las juntas, así que debe asumir su responsabilidad", prosiguió el gremialista.
Por la tarde, el ministro Bullrich prefirió no realizar comentarios sobre los hechos ocurridos a lo largo de la jornada.