Flores venenosas, palabras clave y una llave liberadora en el Hotel de Inmigrantes
El Muntref exhibe una muestra de Marie Orensanz con casi un centenar de obras que realizadas a lo largo de seis décadas; convive con la exposición de los catorce proyectos seleccionados para el Premio Braque
- 5 minutos de lectura'
“Pensábamos que iban a exponer flores”, le reprocharon en la galería Primera Plana de Mar del Plata, en 1969, cuando su muestra fue cancelada un día después de la inauguración. Junto a una instalación con bolsas de arena y cemento de la artista Mercedes Esteves, en plena dictadura de Onganía, Marie Orensanz había instalado unos carteles que decían: “El pueblo La Gallareta lucha por su única fuente de trabajo”, en referencia al inminente cierre de talleres ferroviarios en el pueblo santafesino. Tras la censura, decidió crear flores. En 1977, durante la dictadura de Jorge Rafael Videla, expuso en la galería Artemúltiple la serie de dibujos Flores venenosas, junto a la descripción de cada especie retratada.
“Vivo en Francia desde hace décadas pero siempre recordé de dónde veníamos, mi trabajo y yo. Con la obra de La Gallareta descubrí que la palabra era más contundente que la imagen”, dice ahora a LA NACION en Buenos Aires, donde acaba de inaugurar a los 86 años una exposición curada por Diana Wechsler en la sede del Hotel de Inmigrantes del Museo de la Universidad de Tres de Febrero (Muntref).
Un pasaje que une París y Buenos Aires, a la manera de Cortázar en su cuento “El otro cielo”: no sólo incluye entre casi un centenar de obras realizadas desde 1964 la original de la artista marplatense ganadora de una mención en el Premio Braque de 1969, sino que convive en el mismo piso con la edición que celebra los sesenta años del concurso, con catorece proyectos seleccionados de artistas contemporáneos argentinos.
“En esas piezas hay formas que tratan de liberarse, un hilo conductor de todo mi trabajo porque es lo que me interesa”, señala Orensanz, autora de la famosa escultura que se alza en el Parque de la Memoria con una frase calada: “Pensar es un hecho revolucionario”. En la exposición pueden leerse algunas más, como “Tenemos el poder de elegir”, “La acción es consecuencia del pensamiento” o “Las raíces son femeninas”. En una instalación de campanas, en los badajos de cada una pueden verse otras caladas: “Para los que piensan” y para los que dudan, imaginan crean.
Hay también una llave de gran formato con la palabra “saber” y una versión pequeña realizada en aluminio del ojo de una cerradura atravesable que instaló en 2019 en Collins Park, en Miami, como parte del parque de esculturas de artistas argentinos montado en el marco de Art Basel Cities: Buenos Aires. Otra versión llegó gracias a Bienalsur hasta Suiza, donde lo compró la comuna de Crans-Montana. En su parte superior se lee calada la palabra “invisible”, que se escribe igual en español, inglés y francés. “Nosotros somos la llave, somos una suma de experiencias”, observa acompañada por sus hijas y nietas la autora de la instalación Más allá del tiempo, instalada en la Plaza Intendente Seeber.
Entre sus múltiples experiencias se cuenta más de medio siglo de convivencia con Patrick Audras, a quien ella definió alguna vez como “un marido feminista”. El mismo que financió con la venta de cientos de empanadas el envío de sus obras a Buenos Aires para que fueran exhibidas por el Museo de Arte Moderno. Y el que posa junto a ella sobre un zócalo de estatua intervenido con las palabras “Libertad, igualdad, fraternidad”, mientras le pisa la cabeza en un gesto de humor, según se puede ver ahora en gigantografías de fotos tomadas en París en 1982. Entre sus obras más recientes hay palabras sueltas que el público puede usar para armar su propia frase; una posible es “encontrar en la imaginación soluciones vitales”.
Esas soluciones parecen estar buscando los catorce seleccionados por los curadores Clarisa Appendino, Eugenia Garay Basualdo y Carlos Herrera para esta edición del Premio Braque, cuyo jurado integra Orensanz junto con la Marie-Cécile Burnichon, subdirectora del Departamento de Creación Artística e Industrias Culturales del Institut Français; Anibal Jozami, rector emérito de la Untref y director de Muntref, y José Manuel Gonçalves, director de Le 104 Centquatre, en París.
Hay obras exhibidas de La Chola Poblete, Federico Barabino, Mariana De Matteis, Clara Esborraz, Benjamín Felice, Mimi Laquidara, Alejandra Mizrahi, Manuel Molina, Leo Núñez, RICAS Estudio (Dana Ferrari y Clara Campagnola), Florencia Sadir, Sofia Torres Kosiba, Mariela Vita y Adrián Enrique Sosa. Este último, nacido en Tucumán en 1994, resultó ganador de una residencia de cuatros meses en la Cité Internationale des Arts de París.
Cuando lo profundo está cerca (2023) se titula su obra, una videoperformance que lo muestra volcando el contenido de bolsas de cemento sobre dos rutas de Tucumán. Cuando los autos pasan, crean una nube blanca que lo invade todo. “Sosa queda absorto a la vera del camino, hierático, declamando a través del gesto -señalan los curadores-. No busca amansar el viento ni frenar la pequeña catástrofe. Solo intenta mostrar cómo el progreso mal administrado terminó siendo un dilema en una provincia rica constituida, en gran parte, por gente que vive la penuria a diario”.
El jurado consideró que es un trabajo “muy bien filmado, con recursos precisos y eficaz conceptualmente”, y otorgó además menciones a Vita (por La luna en la hamaca), Esborraz (Peluquería Sociedad Futura), Mizrahi (Placer y beneficio), Sadir (La cortada) y RICAS Estudio (Ornamento y delito).
Para agendar:
Marie Orensanz, el fluir del pensamiento y Premio Braque 2023 hasta el 25 de junio en Muntref Centro de Arte Contemporáneo, Sede Hotel de Inmigrantes (Av. Antártida Argentina 1335), de martes a domingos de 11 a 18. Entrada gratis.
Temas
Otras noticias de Arte
- 1
El director del Museo de Bellas Artes actúa en “Queer”, la adaptación de la novela del ícono contracultural William Burroughs
- 2
Murió Beatriz Sarlo a los 82 años
- 3
“Blackwater”: la saga matriarcal de terror gótico que es un fenómeno global
- 4
El legado de Beatriz Sarlo se define entre el exmarido y los discípulos de la intelectual