Filtraciones: otra vez se oyen rumores sobre el próximo ganador del Premio Nobel de Literatura
MADRID.– El Premio Nobel de Literatura es noticia otra vez. Literalmente. No se trata de alguno de sus anteriores ganadores, sino que es el galardón en sí el que está envuelto en una controversia, la misma que en 2018 obligó a cancelar su entrega: las filtraciones de los candidatos a la prensa. El premio, según trascendió, sería para un autor nacido en África. Mientras comienzan las apuestas sobre los posibles ganadores, los organizadores del premio son en extremo cuidadosos. LA NACION consultó a la Fundación Nobel sobre este trascendido: "Estos asuntos son estrictamente confidenciales y no podemos responder preguntas sobre ellos", fue su escueta contestación.
El nombre del ganador se conocerá el próximo 8 de octubre, pero un artículo publicado por el periodista y editor Juan Cruz Ruiz en el diario español El País aseguró que los académicos suecos ya habían establecido la lista de los cinco finalistas, entre los cuales habría un autor nacido en África. La Fundación Nobel tampoco quiso pronunciarse sobre esta posibilidad. No obstante, vale la pena recordar que este premio no es de los que se maneja con "finalistas" a través de una short list.
Además, a partir de conversaciones con escritores y editores, Cruz elaboró una lista de favoritos. Así se generó una escalada de lecturas apresuradas por parte de varios medios internacionales, en particular latinoamericanos, que dieron como sólido candidato al poeta venezolano Rafael Cadenas. No era la Academia Sueca la que barajaba aquellos nombres, sino las fuentes consultadas por el ex director de Alfaguara, algo por otra parte totalmente lícito e interesante. El problema reside en la reproducción de aquellas intuiciones o deseos como un hecho confirmado.
Mircea Cartarescu, el húngaro László Krasznahorkai, la francesa Nina Bouraoui, la finlandesa Sofi Oksanen, el noruego Jon Fosse y la rusa Liudmila Ulitskaya también habrían, según el artículo mencionado, llegado a la consideración de la Academia Sueca. Sin embargo, estas conjeturas serán una incógnita durante mucho tiempo: deben transcurrir 50 años para que se desclasifiquen los fallos que revelan la composición de la lista final de nominados.
¿Cómo es el procedimiento de elección de un Premio Nobel?
En septiembre de cada año el Comité del Noble, integrado por 18 miembros, envía cartas a personas calificadas (profesores de literatura o lingüística de universidades, otros ganadores del Nobel, miembros de la Academia Sueca, líderes de sociedades e instituciones editoriales, etc.). En estas cartas se solicitan opiniones y sugerencias para el autor que debería obtener el galardón. El 31 de enero del año siguiente se cierra la aceptación de estos formularios. En abril se llega al consenso de la lista de entre 15 y 20 nombres de candidatos, lista que se reduce a fines de mayo a solamente cinco autores. Entre junio y agosto los miembros de la Academia analizan estos autores y realizan informes individuales sobre sus trayectorias y aportes a las letras. En septiembre, vuelven a reunirse, discuten sobre las distintas trayectorias y, finalmente, se delibera sobre el nombre que se anuncia en octubre. Entonces sí, en diciembre, se realiza la ceremonia de premiación en Estocolmo.
La Academia Sueca que elige al ganador de la máxima distinción de las letras se vio envuelta en un escándalo de enormes proporciones cuando se conoció en 2018 que Jean-Claude Arnault, el marido de una miembro del comité de selección filtraba información a periodistas. Lo más grave aún fue que había cometido reiterados abusos sexuales. El premio se canceló en 2018, motivo por el cual surgió un Nobel Alternativo (impulsado por editores y bibliotecarios suecos) que distinguió a Maryse Condé. El año pasado se entregaron dos menciones, la que estaba vacante de 2018 y la de 2019. Los ganadores fueron Olga Tokarczuk y Peter Handke. Desde entonces, la Academia ha reforzado su comunicación para transmitir la transparencia de sus acciones (el proceso entero de selección aparece en su página oficial. Pero, a pesar de su cautela, las apuestas y ansiedad que genera conocer el ganador no pueden ser controladas.