El Archivo General de la Nación busca otra sede
La intención es proteger los documentos y centralizar servicios
El Archivo General de la Nación (AGN) está en emergencia edilicia. Claro que el asunto no es nuevo. Pero el paso del tiempo no hace sino agravar la situación de la institución, cuyos documentos corren, cada año, mayor peligro de desaparecer.
Encontrar un nuevo edificio es la meta del flamante director general del AGN, Enrique Tandeter, quien asumió el 12 de diciembre último.
Desde París, donde permanecerá hasta mediados del mes próximo, Tandeter comentó a La Nación que por estos días gestiona ante la Unesco, con sede en la capital francesa, y otras instituciones oficiales galas "el envío de misiones técnicas al AGN para contar con diagnósticos más precisos sobre el Archivo. Todo esto sin gastos para el Estado, porque podrían costearlo las instituciones que envíen las misiones". Señaló que "el objetivo general del Archivo es la mudanza a un único lugar donde poder centralizar servicios y áreas".
Este no es el único problema que debe enfrentar el AGN. Ocurre que el receso veraniego de la institución, que comenzó antes de Navidad y se extenderá hasta el 15 de febrero, ha motivado quejas de investigadores que ven frustradas sus posibilidades de trabajar por casi dos meses.
Tandeter dijo compartir "plenamente la preocupación de los lectores" y que el asunto "es parte de una preocupación global por mejorar el acceso al Archivo por parte de investigadores y quienes necesiten recurrir a la documentación depositada".
Cuando asumió, Tandeter se encontró con que la decisión de cerrar entre el 22 de diciembre y el 15 de febrero ya estaba resuelta y era"imposible tomar ninguna medida innovadora sin afectar al conjunto del personal".
El investigador Wenceslao Pizarro Deheza se quejó porque muchos historiadores, que a su vez son docentes universitarios, no pueden realizar sus pesquisas por dos meses, y fustigó duramente "las designaciones a dedo" y "la negligencia del Archivo General respecto de la protección del patrimonio histórico documental".
Problema edilicio
Los documentos históricos se reparten hoy en tres dependencias. La sede del AGN, ubicada en un inmueble de finales del siglo XIX en la avenida Leandro N. Alem 246, tiene poca superficie útil para la conservación, y la humedad ambiente, dada la proximidad con el Río de la Plata, agrava el estado de los papeles.
Luego está el ex edificio de Segba, ubicado en Paseo Colón y Humberto I, con los materiales incorporados recientemente. El AGN sólo dispone de la mitad del edificio. En la otra mitad de las instalaciones se fabrican los DNI. Finalmente, otro edificio en el barrio de Flores contiene documentos de la ex YPF. "Queremos tener las condiciones internacionales adecuadas para un archivo como el nuestro. Debemos pensar en una mudanza en el mediano plazo", dijo Tandeter.
Mientras, en el AGN se activará la microfilmación de documentos y se asignarán los escasos recursos presupuestarios ($ 1.000.000 por año) a la tarea de conservación. Desde febrero próximo, Tandeter aspira a flexibilizar el horario semanal para incluir más días y horas de consulta.