Día del Libro: las estrategias de los booktubers más exitosos para difundir la lectura y ganar seguidores
Hacen maratones de 24 horas con cientos de páginas, visitas guiadas a sus bibliotecas y proponen desafíos a sus seguidores; leen fantasy y manga, pero también a Tolstoi y Kafka
- 9 minutos de lectura'
Son adolescentes, tienen miles y miles de seguidores en las redes sociales y forman una comunidad que no para de crecer en YouTube, Instagram y TikTok: la de los amantes de los libros que recomiendan títulos y sagas a lectores de habla hispana. En sus videos, que tienen publicidad propia por la enorme cantidad de reproducciones que logran, hacen reseñas, cuentan las tramas, comentan diálogos y escenas y dan consejos a otros jóvenes sobre qué autores leer o qué novelas elegir si les gusta el fantasy, el terror, la ciencia ficción, el manga o los romances.
Siempre con humor y en tono súper coloquial, proponen desafíos a sus audiencias como maratones de lectura y recorridos por sus bibliotecas repletas de ediciones impresas de sus géneros favoritos. Sí, son nativos digitales pero la gran mayoría prefiere leer en papel. Atención, prejuiciosos: si bien muchos eligen sagas juveniles de moda, también están los que recomiendan leer a León Tolstoi, Friedrich Nietzsche, Franz Kafka y Charles Bukowski. Estas son sus estrategias para difundir libros y el placer de la lectura.
Maratón de lectura
Entre los retos más vistos de los booktubers más exitosos está el challenge de 24 horas, un formato que propone “maratonear” durante un día entero y filmarse mientras leen y comentan a la cámara cómo les resulta la experiencia. Luego, editan los videos con efectos especiales y sonoros, música, subtítulos y otros chiches para condensar la maratón en unos quince o veinte minutos. Hay distintas versiones del challenge 24: algunos se proponen terminar un libro gordo en un día, otros optan por retomar muchos títulos que ya tienen empezados, otros eligen leer varios tomos de una saga o título de un mismo autor. Pero el objetivo es el mismo: dedicarse a leer sin parar, salvo para comer, ir al baño, descansar la vista y dormir un rato. Dos jóvenes argentinas que se sumaron a esta tendencia desde sus propios canales son Almendrada y Lamaleluna.
Con 28 mil suscriptores, el reto de Almendra Veiga superó las 16 mil visualizaciones. Editado con efectos como cámara rápida donde se la ve leyendo en distintos lugares de la casa (acostada en un diván, sentada en un sillón, en su cama), el video tiene música y muestra detalles de los libros: tapas, dibujos, títulos de capítulos. En los primeros minutos muestra los preparativos: botellas de agua y frutas para tener a mano y la elección del material para la maratón. Se propuso leer el primer tomo de Juego de tronos, de George RR Martin, al que definió como “un termotanque” porque tiene más de 800 páginas; también, la novela Matilde debe morir, de Cristian Acevedo; el segundo tomo de Las crónicas de Narnia, de C. S. Lewis, y “si llego”, La reina de nada, el tercero de la saga de El príncipe cruel, de Holly Black.
“Siempre empiezo varios libros y los dejo por la mitad. Hoy empecé cuatro nuevos y estoy leyendo los cuatro al mismo tiempo”, dice la joven en un momento. A la noche, doce horas después de haber empezado el desafío, cuenta que le duele un poco la cabeza. Para “distraerse”, corta con un manga. Por detrás de cámara pasa un chico que le dice que ya leyó ese episodio de One Piece, de Eiichirō Oda, y le encantó. A la 1.30 termina La reina de nada. “Me gustó, pero no me híper fascinó”, comenta. En casi 24 horas (porque a las 5.30 cayó derrotada por el sueño), empezó y terminó tres libros largos, un manga y leyó cerca de 140 páginas de Juego de tronos. “Me gustó el reto. Es lo que hago siempre, aunque no de corrido”, concluyó.
Malena, que tiene 10 mil suscriptores en su canal Lamaleluna, también se sumó a la maratón de lectura en varias oportunidades. En la tercera “maleraton” (como le dice) cuenta que esa vez decidió repartir la lectura a lo largo de dos días, con interrupciones para hacer otras actividades. “No me puedo aislar del mundo durante 48 horas”, explica. “Las maratones son bien flexibles para que cada uno haga lo que quiera y la adapte a su propio estilo. Lo importante no es presionarse sino dedicarle un día entero a la lectura y disfrutarlo”, asegura mirando a cámara.
“Voy a empezar uno al que le tengo muchas ganas: El mundo de los demonios, de Sally Green, conocida por la saga Una vida oculta. Es la continuación de Los ladrones de humo, que leí hace un año y medio y me había gustado mucho. Tiene 470 páginas; creo que llego a leerlo entero”. En dos horas, Malena leyó cien páginas. “Cada capítulo tiene el nombre de un personaje y está narrado desde distintos puntos de vista. Si les gustan los libros de fantasía, con reinos y acción, creo que les va a gustar este libro”. Uno de los videos más vistos de Lamaleluna es una reseña de la novela La Reina Roja, de Victoria Aveyard, que superó las 31 mil visualizaciones.
Devenidos en influencers, la mayoría de los bookstubers opinan, critican y recomiendan con fundamento. Sus seguidores esperan atentos cada nuevo video para escuchar sus recomendaciones e interactuar en las redes con comentarios, pedidos, preguntas y likes.
¿Qué tengo en mi biblioteca?
Siempre con la idea de hacer de la lectura una experiencia entretenida, este desafío busca la interacción entre los booktubers y la audiencia a partir de preguntas y consignas enviadas por los seguidores. Por ejemplo, cuántos libros tienen de sus géneros favoritos, cuáles son, cuáles les gustaron más y por qué. O algunas cuestiones más específicas y juguetonas como “mostrar un libro que tenga una serpiente en la tapa”, que “el título empiece con la misma letra que el nombre del autor” o que “tenga un título con más de doce palabras”. A ese último reto, la mexicana Claudia Ramírez (cuyo canal Clau reads books tiene 584 mil suscriptores) respondió con El chico de la piel de cerdo y otros relatos que jamás deberías leer, de Raiza Revelles, una de las booktubers más famosas de América latina. El video “¿Tengo ese libro en mi librero?” fue visto por más de 129 mil personas.
Otro mexicano, Fernando Bañuelos (MyOwnLittleBookshelf, con cerca de 4700 seguidores), hace gala de todo lo que sabe de sus sagas preferidas buscando libros en su biblioteca que responden a los peculiares pedidos del público. Cuando le piden que nombre un libro cuya protagonista se llame como su mejor “amigx”, se da cuenta que no tiene y entonces dice: “Supongo que lo tendré que escribir yo”.
Los imprescindibles
Es un desafío típico de bibliófilos desde mucho antes que existieran Internet y las redes sociales. Consiste en elegir aquellos títulos que no deberían faltar en la biblioteca de un buen lector. Adaptado al formato digital, la chilena Valentina Gutiérrez responde el reto en su canal Valentina’s Books con libros como Cien años de soledad, de Gabriel García Márquez, “mi favorito de toda la vida”; El Principito, de Antoine Saint-Exupéry, que “me trae muchos recuerdos porque lo leí muchas veces”; Orgullo y prejuicio, de Jane Austen, y La metamorfosis, de Franz Kafka. Entre los títulos que reconoce no haber leído está Romeo y Julieta, de William Shakespeare. “Todavía no leí nada de Shakespeare”.
En homenaje al dramaturgo británico y también a dos grandes autores españoles como Miguel de Cervantes Saavedra e Inca Garcilaso de la Vega, es que se celebra el 23 de abril el Día Mundial del Libro y del Derecho de Autor. La Unesco eligió ese día en coincidencia con las muertes de los tres escritores ocurrida en 1616.
Al estilo Marie Kondo
A diferencia del anterior, este reto plantea qué libros se elegirían para conservar en la biblioteca personal si uno solo tuviera espacio para treinta volúmenes. La idea se desprende de la consigna impuesta por Marie Kondo, que entre otras cosas plantea que nadie necesita tener más de treinta libros en su casa. Varios booktubers se engancharon con esa tendencia minimalista y se sumaron al challenge al elegir solo treinta libros que tengan un valor emocional para cada uno.
El chileno Ricardo Carrión, que tiene más de 12 mil seguidores, decidió seleccionar treinta de aquellos que tiene actualmente. “No libros digitales ni los que leí en alguna biblioteca”, aclara. “No puede faltar la filosofía así que elegí Crepúsculo de los ídolos, uno de mis favoritos de Friedrich Nietzsche. Mi segundo libro favorito es Ana Karenina, de León Tolstói”. Carrión hace un breve comentario sobre cada uno y agrega Catedral, de Raymond Carver, “un genio de los cuentos”, Los detectives salvajes, de Roberto Bolaño; Ensayo sobre la ceguera, de José Saramago, “un libro que todos deberíamos leer alguna vez en la vida porque devela la naturaleza salvaje de la humanidad”; y La senda del perdedor, de Charles Bukowski, “una novela realmente profunda bajo una máscara de superficialidad”, entre otros.
Visita guiada al mundo de las historias
Los booktubers tomaron un formato clásico de YouTube, el house tour, y lo transformaron en un bookshelf tour, que es algo así como una visita guiada al ambiente de la casa donde guardan los libros: la biblioteca, el escenario que suelen elegir para filmar sus videos. Allí cuentan, en general, con qué criterio ordenan sus volúmenes y colecciones. Los argentinos Almendrada y Maxi Pizzicotti se sumaron a esta movida porque, dicen, se lo suelen pedir sus seguidores.
El tour por los libros de Almendrada tuvo más de 24 mil visualizaciones mientras que al de Pizzicoti, donde muestra uno por uno sus 368 títulos, lo vieron alrededor de 8400 personas. Su canal, Thxboywthebooks, tiene 13.700 suscriptores y alcanzó un pico de visualizaciones (unas 73 mil) cuando recomendó libros de temática LGBT. En febrero, publicó su primer libro, Todas nuestras noches (V&R), una novela sobre el amor y la amistad en estos tiempos líquidos.
Otras noticias de Arte y Cultura
- 1
El director del Museo de Bellas Artes actúa en “Queer”, la adaptación de la novela del ícono contracultural William Burroughs
- 2
Murió Beatriz Sarlo a los 82 años
- 3
“Blackwater”: la saga matriarcal de terror gótico que es un fenómeno global
- 4
El legado de Beatriz Sarlo se define entre el exmarido y los discípulos de la intelectual