Cómo leer con las orejas en el festival Filbita
Este viernes empieza una nueva edición del encuentro dedicado a la literatura infantil; gratis y hasta el domingo, en el Centro Cultural Matta habrá lecturas, shows, talleres y otras actividades para chicos
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La música como puerta de entrada a la literatura es el disparador de la próxima edición del festival Filbita, que empieza este viernes y termina el domingo 10 en el Centro Cultural Matta (Av. del Libertador y Tagle). Con más de 50 actividades gratuitas e invitados de Chile, España y la Argentina, en las tres jornadas habrá música entre lecturas, entrevistas, conversaciones, paneles, performances, talleres, clases, muestras y experiencias literarias. Todo con ingreso gratuito.
“La nana, los arrullos y las melodías son las que nos permiten el acceso a una lengua distinta, la lengua del relato”, dijo a LA NACION María Luján Picabea, programadora del festival, que destacó que el eje de este año surgió a partir de “aquello que dice Yolanda Reyes: que en la primera infancia todos leemos con las orejas”.
“La melodía de mi infancia” y “Por qué cantamos” son algunas de las actividades del primer día. Mientras que el sábado, habrá un taller de cuentos y música y uno de narración con relatos y canciones de María Elena Walsh. El invitado para el cierre será nada más y nada menos que Luis Pescetti, que invita a chicas y chicos a llevar sus libros favoritos para que él les lea un fragmento. “Estamos muy felices de darnos el lujo de tener este año al gran Pescetti, que cerrará el festival con lecturas. La obra de Luis está en el imaginario de las lectoras y los lectores desde hace varias décadas. Sus libros, sus personajes y sus canciones han acompañado a crecer a nuestros hermanos, sobrinos, hijos e hijas no solo en la Argentina sino en toda Latinoamérica; porque Luis les habla a los chicos con el respeto, el desparpajo y la alegría que nos habita en la infancia y que a menudo se pierde al crecer”, continúa Picabea.
Entre los invitados figuran cuatro artistas extranjeros muy destacados, dos ilustradores y autores integrales como Ana Sender y Sebastián Ilabaca, “que tienen estéticas y búsquedas muy definidas y que nos interesan especialmente por el énfasis en el detalle, las formas y la belleza que se encuentra en las cosas cotidianas, ese tipo de arte que empuja a volver a mirar, a mirar de otro modo”, cuenta la programadora. “Viene también Esteban Cabeza, de Chile, que es un autor con un humor desopilante, que desde el desparpajo y el absurdo se mete en los grandes temas de la literatura y la vida. También Fran Pintadera, que es un escritor y narrador que ya había sido parte de Filbita en 2021, de manera remota, y que este año tendremos en Buenos Aires. Su trabajo con el lenguaje es muy fino y conversa directamente con el tema de este festival”.
La música como eje temático estará presente, también, en la clínica de ilustración Bitácora sonora, que dará Diego Bianki el viernes a las 10 en el CC Matta y en los talleres de ritmo, juegos y canciones que se dictarán el sábado. “El intento, siempre, es que los chicos entren a la literatura como sea, como elijan, con la naturalidad con la que se entra en una casa de puertas abiertas; por eso buscamos formatos diversos, lenguajes distintos, propuestas varias. Este año volvemos a tomar una plaza, la Plaza República de Chile para, a la sombra de los árboles y entre las semillas de la primavera, leer y releer con voces prestadas. Celebrar la lectura como una forma de ritual comunitario que nos compromete a un encuentro con los otros y nos hace parte de una sociedad y una cultura”, completa Picabea.
Entre los participantes locales, además de Pescetti y Bianki, figuran Mariana Baggio, Paula Bombara, María Elina Méndez, Verónica Parodi, Cecilia Pisos, Melina Pogorelsky, Mariana Ruiz Johnson, Nicolás Schuff, Teresa Usandivaras, Laura Wittner, Ezequiel Dellutri y Hernán Ronsino.
Una de las novedades de esta edición es la inclusión de una muestra de las producciones de los alumnos que formaron parte del programa Filba Escuelas 2024. “Durante todo el año exploraron distintas formas de integrar la literatura en el aula, volviéndola parte de su cotidiano, espacio de disfrute y estímulo para la creación –explica la programadora-. Y ahora son parte de Filbita con sus libretas de artista, sus reseñas ilustradas, sus personajes y sus diccionarios imaginarios”.
En el sitio web de Filba está disponible el programa completo.