Chernov por triplicado
El autor de El desalmado proyecta para este año una novela, un libro de ensayos y otro de cuentos, y dice que le gusta trabajar por encargo
El sentimiento de extrañeza, la sensación de que la realidad es poco realista, es uno de los ejes de la literatura de Carlos Chernov. Está presente en su prosa desde su primera novela, Anatomía humana (que se reeditará en abril de este año en el sello Booket de Planeta), hasta El desalmado (Emecé, 2011). En todas imperan un clima y un humor muy raros, que evocan el tono del expresionismo alemán.
Durante este año, Chernov trabaja en la escritura de tres libros.
Una novela: "Amo", sobre un hombre que desde chico ha vivido con una fuerte impresión extraña, un estado de perplejidad que comienza cuando se entera de la existencia de la muerte y sus circunstancias. "Eso no puede ser cierto", se dice a sí mismo. Siente que no puede ocurrirle algo tan horrible. Asombrado, observa la vida de costado. Como si hubiera salido de la escena, pero no para sentarse en la platea a ver la obra, sino para ubicarse entre las bambalinas, estudiando a los actores y a los espectadores con suspicacia, tanto a los que representan como a los que creen que lo que ocurre en el escenario es verdadero. Desmentir la dureza de la realidad lo tranquiliza, al costo de desconectarse del resto de sus sentimientos.
Un ensayo: "Verosimilitud y extrañeza", en el que ambos conceptos son considerados temas en sí mismos y cuestiones de técnica literaria. El libro aborda asuntos como nuestra relación con la verdad, la creación de un verosímil como tarea central del escritor y los cruces entre la verosimilitud en términos aristotélicos y la ambivalencia en el sentido que le dieron los formalistas rusos, como la producción de un efecto de desfamiliarización. "Es un intento de mostrar las cosas libres de la capa de polvo doméstico con que las cubre la costumbre, para que el lector las vea como por primera vez", dice Chernov
Un libro de cuentos: "Caballo en campo de golf". "Escribo cuentos en los paréntesis entre las novelas. No me preocupa cuánto tiempo demore. Entre Amores brutales , mi primer libro de cuentos, y Amor propio , el último, pasaron catorce años. A veces me piden un cuento para un libro o una antología. Me gusta escribir a demanda. Supone límites de tema y de extensión que, en lugar de entorpecer el trabajo, lo facilitan."