Atlas de la literatura en español: el mapa de una lengua plural
Un autor de cada país de habla hispana para armar una biblioteca básica de autores vivos e imprescindibles
Había una vez una época en que los escritores latinoamericanos eran best sellers más allá de las fronteras de sus propios países, en otros mercados en lengua española. El mentado boom de los años sesenta y setenta, que hoy pervive bajo la forma de libros póstumos e imitadores, fue una combinación exacta de obras de calidad literaria, marketing editorial y políticas culturales aceitadas. También fue el último de esos episodios panamericanos de la historia de la literatura en lengua española. Por supuesto, después hubo casos individuales de autores exitosos fuera de sus países (como Enrique Vila Matas o Javier Cercas, de España; Alejandro Zambra o Alberto Fuguet, de Chile, César Aira y Martín Caparrós, de la Argentina; Juan Villoro, de México), pero no ya como conjunto representativo de la flexión idiosincrásica de una lengua en común.
Este año, Penguin Random House reflotó aquella ambiciosa estrategia con el Mapa de las Lenguas. "La idea surgió en España hará ahora ya un año -cuenta Claudio López de Lamadrid, director editorial del grupo-, tras constatar la cada vez mayor dificultad de vender autores de nuestra lengua fuera de sus países de origen. Pensamos que desarrollar una herramienta como el Mapa de las Lenguas, una suerte de paraguas bajo el que acoger a autores de primera línea provenientes de todos los países y todas las sedes de Penguin Random House, ayudaría a la difusión de los libros." Lenguas de una lengua ideal, postulada como única sólo en el improbable universo de los arquetipos. Se sabe que cada sociedad perfila el idioma a su modo.
Este Mapa de las Lenguas incluye, además del plan de publicaciones, una revista trimestral y servirá tanto de herramienta de comunicación como de marketing: se reparte en librerías y se difunde en Internet. "Proponemos un título al mes de Literatura Random House y otro de Alfaguara, en tiradas cortas y a distribuir en una red de librerías amigas que han visto el proyecto con simpatía y lo apoyan", dice López, que comenta que el resultado en España ha sido muy bueno. "De la mayoría de los títulos hemos hecho reimpresiones o, como mínimo, hemos colocado casi toda la tirada", acota. Esas tiradas van de los 500 a los 3000 ejemplares y los autores elegidos son de primer nivel en sus países: Julián Herbert, de México; Claudia Amengual, de Uruguay; Elvira Navarro, de España. Algunos escritores, como Lina Meruane y Rodrigo Rey Rosa, ya son apreciados por los lectores argentinos. La filial local de PRH informó que aportará al mapa de Chile, Colombia y México, entre otras filiales, autores nacionales como Fogwill, Tomás Abraham y Pola Oloixarac.
Territorio heterogéneo
También otros sellos, como Seix Barral, Tusquets, Eterna Cadencia, Metalúcida y Corregidor, suman a escritores latinoamericanos y españoles a sus catálogos. Algunos desarrollan colecciones, como Corregidor con Archipiélago Caribe, o Seix Barral con Biblioteca Breve, que ha publicado a Renato Cisneros, de Perú, y a Luis Chaves, de Puerto Rico. "La colección Archipiélago Caribe surgió al comprobar que no había prácticamente ningún autor de la región del Caribe publicado en nuestro país; una zona que cuenta con una producción riquísima y muy diversa -dice María Fernanda Pampín, de Corregidor-. El propósito fue mostrar toda esa heterogeneidad que presenta la literatura caribeña, muy desconocida en toda América latina, a excepción de algunos autores cubanos reconocidos."
El autor insignia de la colección fue Eduardo Lalo, de Puerto Rico, ganador del Premio Internacional de Novela Rómulo Gallegos en 2013. "Ese premio no sólo dio un enorme impulso a la colección sino que también lo fue para autores de otros países caribeños -cuenta Pampín. Incluimos autores que son representativos de la literatura que se está produciendo en cada lugar y que revelan una estrecha conexión con cuestiones temáticas así como de procedimientos y recursos que aparecen en la literatura contemporánea a nivel mundial." El Caribe no se puede reducir a la imagen del trópico, así como tampoco la literatura latinoamericana a los clichés temáticos de la violencia política en la región, del narcotráfico o de las penurias socioeconómicas.
Ofrecemos un tentativo mapa de lenguas definido por una figura literaria de cada uno de los países donde el español es lengua oficial. Algunos de esos escritores, por motivos sociales, políticos o económicos, debieron exiliarse y esa circunstancia forma parte de sus protocolos narrativos. Otros han encontrado sin dificultad un camino de consagración nacional y, con apoyo de sus sellos, acaso intercontinental.
Babel de un solo idioma
La literatura latinoamericana pasa por un muy buen momento: tiene escritores originales que encuentran lectores. No casualmente se habló de un nuevo boom. La prueba de esto es que existe toda una franja entre los consagrados y los emergentes. Son escritores que gozan de prestigio pero crean sus historias lejos del mármol del Nobel.
Del editor: la elección estuvo guiada por quienes, todavía al margen del canon, son ya reconocidos como fuerzas de la lengua española.
Otras noticias de Literatura
Más leídas de Cultura
“Un clásico desobediente”. Gabriela Cabezón Cámara gana el Premio Fundación Medifé Filba de Novela, su cuarto reconocimiento del año
“Enigma perpetuo”. A 30 años de la muerte de Liliana Maresca, nuevas miradas sobre su legado “provocador y desconcertante”
“Me comeré la banana”. Quién es Justin Sun, el coleccionista y "primer ministro" que compró la obra de Maurizio Cattelan
Martín Caparrós. "Intenté ser todo lo impúdico que podía ser"