Amantes de lo bueno: una comunidad virtual dirigida a los que se sienten “orgullosamente seniors”
Una plataforma digital, dirigida a los mayores de 50 (aunque no es excluyente), ofrece un espacio para compartir historias de vida y experiencias; se puede visitar una muestra de grandes fotógrafos argentinos que retrataron modelos de “belleza sin edad”
- 7 minutos de lectura'
“¿Qué es lo bueno? Difícil definirlo. Lo que es bueno para algunos puede ser no tan bueno para otros. Sin embargo, cuando aparece algo que realmente vale, hay cierto consenso para detenerse, mirar y eventualmente admirar… Eso es lo que buscamos y lo que te invitamos a compartir…”. Con esta declaración de principios recibe el sitio web Amantes de lo Bueno a su audiencia virtual, una comunidad cada vez más amplia de personas que se identifican con el lema “orgullosamente seniors”.
La propuesta digital está dirigida a personas de más de 50 años, aunque no es excluyente. El menú de contenidos es amplio y variado: ofrece, entre otras opciones, artículos sobre “lugares secretos” para descubrir, “paladares curiosos” y vinos de calidad para degustar, “historias entrañables” de grandes personajes de la cultura nacional e internacional y experiencias en torno al bienestar y el disfrute. Además, desde la plataforma se puede recorrer en 360 grados la muestra fotográfica “Belleza sin edad”, con imágenes tomadas por Gaby Messina, Diego Ortiz Mugica, Gabriel Rocca y Alicia Sanguinetti, entre otros artistas.
“Amantes de lo Bueno nació en plena pandemia, en un momento en el que el planeta entero prestaba especial atención al ‘segmento de riesgo’: adultos mayores, tercera edad o como quieran llamarnos. Se hablaba de protegernos, de resguardarnos, y nosotros, siendo del mismo segmento, sentíamos que la mirada era incompleta, o en ocasiones, equivocada”, contó a LA NACION Miguel Daschuta, uno de los impulsores del sitio junto a Pablo Barcarolo, Raúl López Rossi y Verónica Rodríguez Padilla.
“Nos reunimos un grupo de publicistas, periodistas y marketineros e investigamos qué pasaba realmente en el universo ‘senior’, como preferimos llamarlo, para nombrar a las personas de más de 50 años. Y descubrimos que quedaba planteada una profunda contradicción. Por un lado, la población mundial es cada vez más longeva (¡vivimos más años y mejor!) y los índices de natalidad decaen. Pero, por otra parte, cuesta que la sociedad integre y reconozca genuinamente a este segmento en crecimiento. Por lo tanto, lo resiste, lo ignora o lo representa incorrectamente con estereotipos y prejuicios que necesitamos corregir. Ahí sentimos que podíamos sumar, desde lo que sabemos hacer y que tanto disfrutamos”, agregó.
Así crearon la plataforma, que definen como “un espacio donde pudiéramos hablar de nuestras inquietudes, de nuestras ganas de hacer cosas, de seguir aprendiendo y viviendo experiencias enriquecedoras”. Decididos a concretar el proyecto, tuvieron que investigar el terreno y aprender sobre desarrollos web, lógicas de los clics, búsquedas por Internet y “un montón de cosas más (de las que honestamente no teníamos mucha idea)”. Con marchas y contramarchas, lo lograron.
Ante la pregunta sobre el concepto general del sitio (¿por qué lo desarrollaron bajo el paraguas temático “Amantes de lo bueno”?) explican: “Porque es lo que somos y es a quienes queremos encontrar: personas llenas de energía y creatividad, que ya hicieron en sus vidas los deberes que había que hacer, que tienen el entusiasmo intacto… y que están convencidas de que siempre puede haber algo nuevo y bueno a la vuelta de la esquina”.
Y claro que lo hay: de viajes a vinos, de buena comida a lugares de encuentro, del arte a la música, con paradas en el cine, el teatro y la literatura. Con la idea de generar un espacio de comunicación entre pares como principal objetivo, ofrecen contenidos y experiencias para el segmento senior a través de historias de vida, testimonios en primera persona, imágenes que no circulan en las redes sociales tradicionales e iniciativas “de calidad que satisfagan las expectativas de un público apasionado por las cosas bien hechas”.
Con un camino ya recorrido desde que el proyecto cobró vida en Internet, descubrieron que, si bien el perfil mayoritario de los usuarios responde a lo que habían imaginado (hombres y mujeres a partir de 50 años, de buen nivel socioeconómico y de todas partes del país), también reciben visitas y comentarios de personas más jóvenes y de diferentes partes del mundo. “Los contenidos están pensados para los seniors, pero resulta muy interesante que puedan disfrutarlos otros segmentos para llevar este mensaje de la nueva longevidad positiva y vital que estamos experimentando. Las preferencias son variadas y algunas bastante previsibles: arte, turismo, gastronomía, historias de vida. No obstante, hemos tocado temas más singulares, como la vida sexual en la etapa senior, que nos sorprendieron por su repercusión. El objetivo inicial es que la comunidad alcance el mercado hispanoparlante… más adelante, veremos”, dijo Daschuta. A corto y mediano plazo se proponen “pasar de ser divulgadores de contenidos a crear una comunidad que, además de interactuar entre sí, pueda disfrutar de experiencias relacionadas con los contenidos que generamos”.
De acceso gratuito y contenidos libres, Amantes de lo Bueno se financia con publicidad. “Iniciamos este proyecto financiándolo entre los socios para poner en marcha el sitio, las redes sociales y las experiencias. Gradualmente fuimos encontrando marcas que ya están trabajando con los seniors y que buscan asociarse a nuestros productos por la afinidad del target y el tratamiento que le quieren dar a su comunicación. Hoy estamos buscando inversores que se enamoren de la propuesta y nos ayuden a escalarla”.
Este año, la Legislatura Porteña la declaró de Interés Cultural la exhibición digital Belleza sin edad, “la primera muestra fotográfica que celebra la belleza senior”, como la presentan en el sitio. Al hacer clic en la sección, se abre otra pantalla con la recomendación de ver las imágenes en una computadora o tablet para apreciarlas mejor. Entonces, empieza un recorrido en 360 grados con imágenes de grandes fotógrafos argentinos y textos. El primer “cartel” plantea: “¿Por qué belleza sin edad?”. Y responde: “Porque es el momento de hacer visible lo que parecía invisible. De mirar atentamente a las personas mayores, o a los seniors como preferimos llamarlos nosotros, y darnos cuenta de que, en cada arruga, en cada mirada, en cada porción de piel hay miles de historias que vale la pena conocer”. A continuación, presentan a los diez fotógrafos que participan de la muestra. Después de cada biografía se pueden ver los retratos en color y en blanco y negro de las y los bellos seniors, acompañados de breves historias narradas por los fotógrafos.
“El señor Malbec. Exultante, feliz, orgulloso de la tarea realizada. Así intenté retratar a Ricardo Santos, uno de los más importantes bodegueros argentinos. Santos creó en 1971 el Norton-Mendoza Malbec, el primer Malbec que se exportó hacia los Estados Unidos, abriendo un camino que hasta entonces no se había recorrido. Retratarlo con su criatura en la mano fue una enorme satisfacción personal”, cuenta Carlos Fadigati, que también fotografió al cocinero Ramiro Rodríguez Pardo vestido solo con tiradores.
Entre los retratos de Diego Ortiz Mugica está el de Mel Krieger, un gran pescador especializado en pesca con mosca. “En alemán, su apellido significa guerrero; lo que aplica y no aplica a su personalidad. Por un lado, fue un guerrero cabal, al defender el ecosistema a través de la educación. Por el otro, fue una de las personas más amables y conciliadoras que conocí en el mundo de la pesca. En esta foto se los ve a los dos: al guerrero, que mira con firmeza, y al hombre pacífico, instruido, que disfrutaba de su pipa casi tanto como de su deporte”, dice el artista.
Hay, también, retratos de celebridades como la bailarina cubana Alicia Alonso (por Alicia Sanguinetti), Graciela Borges (por Gabriel Rocca) y la exmodelo Claudia Sánchez (por Marcelo Zappoli).
“Convocamos a diez de los más prestigiosos fotógrafos argentinos para que sumaran sus obras ya realizadas o hechas especialmente para la muestra sobre modelos anónimos o de personas famosas. La muestra se hizo virtual y fue difundida y comentada por innumerables medios masivos y espacios afines al mundo senior”, dijo Daschuta. Es otra invitación para celebrar las vidas bien vividas de los amantes de lo bueno.