Amalia Andrade: "Vivimos en la tiranía del no estar mal"
"No he conocido a una sola persona que no sienta empatía por otra cuando dice: tengo el corazón roto. La mayoría hemos estado ahí, sabemos lo que se siente, somos iguales en ese dolor o en esa alegría", dice Amalia Andrade (Cali, 1986), periodista, escritora e ilustradora colombiana en su paso por Buenos Aires. Como terapia para sanar su corazón escribió Uno siempre cambia el amor de su vida (por otro amo o por otra vida), una especie de manual supervivencia que se convirtió en un éxito de ventas en el mercado hispano y que a fines de este año espera repetir la suerte, primero en los Estados Unidos y, luego, en el Reino Unido.
La autora irrumpió en el universo literario con una pieza que desafió la manera tradicional de contar una historia. Combinó dibujos con textos hechos a mano ("qué mayor honestidad que escribir de mi puño y letra"), play lists, recetas de cocina, referencias pop y, lo más importante, reveló su intimidad sin tapujos y se animó a hablar de temas que suelen permanecer en silencio, como el amor a otra mujer (Uno siempre cambia...) o los miedos, las ansiedades, las visitas al psiquiatra, los ataques de pánico, que expuso en su segundo libro, Cosas que piensas cuando te muerdes las uñas. "En Latinoamérica, pero puntualmente en Colombia, existe una doble moral, donde está bien hablar de la felicidad, de estar enamorado. Está bien estar bien, pero si sos gay, es mejor que nadie lo sepa, que no se note –asegura–. Por eso, para mí era muy importante visibilizar lo que la sociedad intenta ocultar, oprimir, como el colectivo LGBT, la fragilidad de los nervios, la salud mental. Considero importante hablar de la tristeza, de la soledad, del desamor. Sé que suena muy bobo, pero siento que vivimos en la tiranía del no estar mal, donde nadie pareciera sufrir, llorar, donde todos somos demasiado fotogénicos".
–En tus libros, incluido el que acabas de editar Tarot magicomístico de estrellas (pop) revelas buena parte de su intimidad. ¿Qué te atrae de la autoficción?
–Me interesa como género. Nunca tuve miedo de hablar de mí misma, creo que narrar desde la primera persona genera, sobre todo en estos temas, una conexión más profunda. Creí necesario hacerlo en el segundo libro.
–¿Te molesta que tus libros sean considerados de autoayuda?
–Al principio me molestaba mucho, pero ahora no me importa. Me criticaron mucho por decir que toda la literatura es de autoayuda, en el sentido que un buen libro tiene el poder de hacernos mejores, tiene el poder de cambiarte la vida. No dudo en que toda la literatura y el arte tienen un calor medicinal. Hay libros que hacen eso de manera expresa, otros no. Hoy me siento contenta si mis libros ayudan a las personas y me siento en paz, porque hay en cada uno de ellos una exploración literaria y estética.
En Tarot magicomístico de estrellas (pop) Andrade propone a través de sus páginas entender el significado del Tarot, cómo leerlo y cómo usarlo para conocernos mejor a nosotros mismos. Este último libro tiene la particularidad de que las figuras de los arcanos mayores están representadas por estrellas de la cultura popular que la misma autora diseñó. Descubrimos a Oprah Winfrey, como la Suma Sacerdotisa; a Kim Kardashian en el rol del Mago; David Bowie, El Juicio; Britney Spears en su etapa rapada como El Colgado; Gloria Trevi, representa La fuerza; Steve Jobs al Loco; Beyoncé, La Emperatriz y Luis Miguel, El Sol, entre otros. "Con este libro cierro la trilogía de autoconocimiento –reconoce–. Las personas que más concurren a consultar al tarot son las que tienen el corazón roto o sienten la ansiedad de conocer el futuro".
–La cultura pop y sus personajes atraviesan tus tres libros ¿Por qué?
–Me gusta pensar la literatura como un juego, mostrar la relación entre lo que algunos llaman "alta cultura" y "cultura popular". Por eso me divierte poner a Taylor Swift al lado de Roland Barthes, por ejemplo, o representar a diferentes personajes como los arcanos mayores. La manera en la que nos relacionamos con los libros como objetos me apasiona. Busco que mis libros propongan una nueva manera de leer, donde el lector también se transforma de alguna forma en escritor y protagonista.
–Las redes sociales ofrecen nuevas maneras de aproximarse a la lectura.
–Me gustan, sin duda es un fenómeno visual, otro tipo de propuesta como el que se da con la poesía en Instagram. Siempre me interesaron formas de lecturas diferentes, un autor que me gusta mucho es Georges Perec, que siempre estaba en la búsqueda. La escritura y las imágenes se complementan, se enriquecen.
En estos días en Buenos Aires, Andrade fue testigo del fuerte e impactante movimiento feminista. "Siento mucha admiración con todo lo que está pasando con las mujeres en Argentina, son una gran influencia en Iberoamérica. En Colombia hay un colectivo de mujeres que respeto mucho, son Las viejas verdes. La nuestra es una lucha difícil porque somos un país muy machista. Si mis cifras no están mal, somos el segundo de América con más feminicidios, después de México".
Con su relato honesto y descarnado, Amalia espera conquistar el mercado anglosajón. "Me hace mucha ilusión esperar lo que suceda –confiesa–. Me da curiosidad". Sin quedarse quieta, la caleña piensa en escribir prosa de largo aliento. "Veremos cómo me va. No quiero quedarme quieta, me gusta explorar".