1967: a medio siglo del estallido de la cultura pop
Una semana como ésta, hace 50 años, nacían Cien años de soledad, Sgt. Pepper's, el tropicalismo y el Verano del Amor
Con pocos días de diferencia, hace medio siglo se publicaba en Buenos Aires la novela Cien años de soledad, de Gabriel García Márquez, y se editaba en Londres el disco Sgt. Pepper's Lonely Hearts Club Band, de los Beatles. Londres ya era la capital de la música pop, pero la aparición de ese álbum la consagraría como el lugar en el que la cultura contemporánea reinaba. Buenos Aires era por entonces la capital del libro en castellano porque era la patria de las librerías y de los lectores. En 1967, de cada 10 libros en castellano casi siete se vendían en esta ciudad.
Cien años de soledad ya había sido rechazada por varias editoriales (entre ellas, Seix Barral) cuando García Márquez decidió enviar su novela a Sudamericana, donde llegó a las manos de Paco Porrúa, el gran editor de la época. Porrúa contó que al leer la primera frase comprendió que estaba ante una obra maestra: "Muchos años después, frente al pelotón de fusilamiento, el coronel Aureliano Buendía había de recordar aquella tarde remota en la que su padre lo llevó a conocer el hielo". La respiración del comienzo del Quijote resuena en esa frase.
El 31 de mayo de 1967, la novela que más tarde le valdría al escritor un Premio Nobel salió de imprenta y el 5 de junio llegó a las librerías porteñas. El 1º de junio, Sgt. Pepper's llegó a las disquerías londinenses y a todas las radios del planeta que pasaban música "moderna". En la misma semana, hace exactamente 50 años, sin que nadie entonces lo supiera, dos de las obras cumbres de la cultura popular del siglo XX nacían en conjunto.
Pero el libro del colombiano y el disco de los Fab Four solamente fueron la punta de un gran iceberg: en todas partes en esos mismos días nacía "algo" (una obra, un movimiento, un artista) culturalmente nuevo: en Brasil, Caetano Veloso y Ney Matogrosso, entre otros, fundaban el tropicalismo, un pop latino que abrevaba en los de Liverpool tanto como en Antonio Carlos Jobim. En Buenos Aires surgía el rock nacional con "La balsa", interpretada por Los Gatos. En Londres, Jimi Hendrix lanzaba otro disco que conmovió al mundo: Are You Experienced, con el que llegó "apenas" al segundo puesto entre los más vendidos (no alcanzó el primer lugar porque, claro, Sgt. Pepper's fue imbatible durante meses), pero enloqueció a Eric Clapton y a Jimmy Page (quizá Led Zeppelin sería impensable sin aquel disco de Hendrix).
La ebullición de las capitales
El extraordinario éxito de público que tuvo Cien años de soledad tampoco era un hecho aislado. Pocos años antes, Rayuela, de Julio Cortázar, y Sobre héroes y tumbas, de Ernesto Sabato, sobrepasaron los 100.000 ejemplares. En 1967 ya había en Buenos Aires (como en Londres, Nueva York, París y Berlín) un público que era capaz de aplaudir de pie a García Márquez cuando entró al Instituto Di Tella para ver una obra de teatro o que hacía cinco cuadras de cola para ingresar al Museo de Bellas Artes para ver la muestra De Cezanne a Miró.
Mientras tanto, en la costa californiana se realizaba el Verano del Amor, preludio de la nueva vida nómade y de los grandes festivales masivos (reunió 200.000 personas) que redefinirían la forma en que se ejecutaría la música en vivo desde entonces.
En Nueva York, después de cinco años de descalificaciones de todo tipo, todos se rendían ante el genio de Andy Warhol (entre otros, Jim Morrison, que adoptó su look sadomasoquista impulsado justamente por Warhol y sus amigos del grupo The Velvet Underground).
En París, Michel Foucault se convertía en el filósofo más famoso de la segunda mitad del siglo XX a partir de los debates públicos que suscitaba Las palabras y las cosas, su libro inspirado en el ensayo de Borges "El idioma analítico de John Wilkins". Incluso un vanguardista como Jean-Luc Godard se escandalizaba de que el dúo Borges-Foucault sostuviera que la verdad no era un absoluto que estaba fuera de los vaivenes de la Historia, sino una mera construcción social relacionada con el contexto cultural de cada época. Todo estaba en discusión.
Fue en 1967 cuando el planeta entró en ebullición cultural. Surgió una nueva energía que atravesaba todo con la fuerza gloriosa de un vendaval. Y ya no se detuvo más.