Un barilochense hizo cumbre en el Fitz Roy y se tiró en parapente: es el tercero en la historia
En 1988, los alemanes Matthias y Michael Pinn fueron los primeros en volar desde lo más alto del monteFitz Roy, a 3405 metros sobre el nivel del mar-. Hoy ya son tres los que pasaron por esa experiencia. Hace poco Pablo Pontoriero, un experimentado montañista barilochense, hizo cumbre y se lanzó desde allí con su parapente.
"El 19 de febrero salimos de El Chaltén hasta la base de la vía. Escalamos el 20, el 21 llegamos a la cumbre y volé", contó Pontoriero en diálogo con LA NACION. "Era un sueño", confesó.
A los ocho años, Pontoriero comenzó a realizar actividades en la montaña. Hoy, a los 41, es escalador, montañista y esquiador. Es el director del Instituto Superior Argentino de Guías de Montaña y tiene licencia como piloto biplaza de parapente.
El monte Fitz Roy -o cerro Chaltén- es una montaña ubicada al oriente del Campo de Hielo patagónico sur, cerca de la villa El Chaltén. Se trata de una extensión de hielos continentales situada en la f rontera entre la Argentina y Chile.
Igual que en 1988, Pablo escaló junto con dos amigos por la Supercanaleta, una vía de ascenso de hielo y roca de 1600 metros de longitud desde la base de la montaña. Durmieron por la noche y a la mañana siguiente emprendieron la parte final hacia la cumbre.
Si bien la escalada la realizó con dos amigos, Quique (Enrique) Claussen, y Kiko (Luis) Cerda, el vuelo lo hizo solo. Los demás bajaron en rappel, cómo se desciende normalmente cuando se escala.
Pablo explicó a LA NACION que el solo hecho de escalar el Fitz Roy ya era "todo un desafío". Requiere de mucha preparación, experiencia y suerte con el clima de la Patagonia. Sin embargo, admite que la experiencia no fue demasiado planeada.
"Era un sueño, pensaba que tenía las condiciones para hacerlo y que estaría bueno en algún momento intentarlo", contó, y agregó que, a pesar de eso, "no lo tenía planteado como un objetivo para esta temporada".
Cuando llegaron a la cumbre, observó el imponente escenario durante un rato y analizó desde dónde despegar. Por suerte, el viento era suave.
"Es muy empinado allá arriba y no hay lugar cómodo para intentar un despegue con esas condiciones. Por suerte, luego de probar un poco, encontré una zona suficientemente buena para poner la vela, donde las rachas de viento se orientaban bien. Esperé el momento y cuando se dio la oportunidad salí a volar", recordó.
Pablo describió la sensación como "increíble" y explicó que estar a esa altura, entre montañas y glaciares, es "impresionante", incluso para alguien con su experiencia. Desde el aire escuchaba los gritos de sus amigos, que lo alentaban.
El vuelo duró unos 30 minutos y aterrizó sobre el camino al lago del Desierto, cerca del puente del Río Eléctrico, en la provincia de Santa Cruz. Allí tenía estacionada su camioneta.
Sus amigos bajaron de la montaña y llegaron al glaciar superior ya de noche. Recién a la mañana siguiente se encontraron en Río Blanco. Cargaron el equipo y esa misma tarde festejaron con un asado. Luego volvieron a Bariloche.
Pontoriero se convirtió en el primer argentino que vuela desde la cumbre del Fitz Roy. "Es algo que no me voy a olvidar nunca", sostuvo.
Por el momento, no tiene planeado un un nuevo desafío, pero admite que no lo descarta. "La montaña es mi forma de vida, mi pasión y mi profesión", remarcó. Algo se le ocurrirá.