Día mundial del reciclaje: la innovadora fórmula para que los chicos aprendan a cuidar el planeta
Una pareja de payasos se encuentra con un escenario lleno de basura. Miran los papeles de diarios, las botellas de plástico y los sachets de leche que están desparramados, sin saber qué hacer. Gracias a la ayuda de sus pequeños espectadores, que contestan y festejan todas sus preguntas y acciones, logran ir separando los residuos. Con escenografía, disfraces y utilería realizada con materiales reutilizados, los artistas de Circo Reciclado buscan difundir educación ambiental y nociones de reciclaje en chicos, a través de espectáculos en escuelas de diferentes ciudades de la Argentina.
"El cuidado ambiental es una cuestión de educación. La gente no contamina por maldad, sino por desconocimiento. Por eso, hay que trabajar con los niños; el futuro de la Tierra depende de todos", asegura Diego Brailovsky, creador de esta agrupación artística y social.
Dentro de su repertorio, su principal show es "Reduzco, reúso, recirco", una obra infantil interactiva con la que suelen presentarse en los jardines de infantes y escuelas primarias. "Cuando llegamos a los colegios, a los chicos se les dibuja una sonrisa en la cara. El show dura 45 minutos y desde que empieza hasta que termina, no paran un segundo de divertirse y aprender", comenta Brailovsky, de 35 años. Luego, agrega: "Las instituciones educativas suelen ser muy estructuradas y nosotros tratamos un tema muy serio de forma desestructurada".
Desde su creación en 2012, hicieron presentaciones en alrededor de 400 instituciones educativas para más de 45.000 alumnos. "Es importante introducir los conceptos cuando todavía son jóvenes, para que ya los naturalicen y asuman el compromiso", destaca el coordinador del proyecto.
Si bien asegura que la iniciativa también está dirigida al público adulto, a través de presentaciones en algunas empresas e intervenciones en espacios públicos, señala que los mayores tienen más reparos a la hora de pasar a la acción. "A un grande le preguntas si recicla y arrancan con los 'peros'. Y este es un tema que se tiene que tratar cuanto antes", remarca.
Según el Waste Management World, la Argentina es el segundo país de América Latina en generar basura per cápita al día (1,22kg), solamente superado por México, que prácticamente lo triplica en cantidad de habitantes. A su vez, un estudio de la Facultad de Ingeniería de la Universidad de Buenos Aires (Fiuba) y la Coordinación Ecológica Área Metropolitana Sociedad del Estado (Ceamse) afirma que, del total de los residuos, un 78% se podría reciclar si se realizara una correcta separación de origen en los hogares. Hoy en día se recupera solamente el 56%.
Desde Circo Reciclado destacan que los directores y docentes de las escuelas que visitan los reciben con gran entusiasmo, porque ven en esta forma lúdica de transmitir conocimientos ambientales, una gran herramienta educativa para un tema que empieza a ser crucial.
Brailovsky notó este cambio de paradigma a principios del 2012, haciendo un viaje por Nueva Zelanda junto a una amiga, también artista circense. "Estaba recorriendo unos paisajes que eran increíbles y no entendía como algunas personas podían dejar basura tirada. No era mucha, pero como irrumpía en el ambiente me impactó. Ahí decidí hacer algo para fusionar mis dos grandes pasiones: el circo y la naturaleza", recuerda el payaso.
Idearon un show en inglés, "Recycling Circus", que presentaron en 85 colegios primarios durante los ocho meses que se quedaron en ese país. Al regresar a la Argentina, decidido a continuar con el proyecto, se encontró con una realidad distinta. "Al principio, nos costó muchísimo aplicarlo. En 2013, le hablabas a los alumnos y docentes de separar residuos y no entendían. Tuve que dar dos pasos para atrás y replantear como hacer el show desde cero", cuenta.
Actualmente, cuentan con una gran variedad de propuestas que no solo abarcan temáticas ecológicas, sino también sociales, coordinados junto a Carolina Crevecoeur, pedagoga y payasa. Además, para poder realizar más de 70 funciones anuales, tienen el apoyo de 10 artistas de diversas disciplinas: malabaristas, acróbatas, músicos y actores.
Entre sus próximos objetivos, Circo Reciclado estrenará dos nuevos proyectos, uno enfocado en el cuidado del agua y otro en los residuos electrónicos. Pero el gran sueño de Brailovsky es replicar su compañía por todo el mundo. "Además de Argentina y Nueva Zelanda, nos fuimos de gira por Uruguay, Bolivia y España. En todos lados generamos una gran respuesta de parte de los chicos. Claramente, la idea impacta mejor a través de un espectáculo que de una charla", sostiene.
En su mirada, la educación ambiental creció de manera notable en esta década, pero la urgencia ecológica sigue existiendo y requiere del compromiso de todos. "No hace falta ser científico para darse cuenta, sobra con ver los últimos fenómenos climatológicos o como las estaciones del año están cada vez más difusas", afirma y por eso concluye: "Todos podemos hacer algo desde el lugar donde estamos, por más chico que sea. Muchas pequeñas acciones hacen a algo más grande".
- Este artículo se publica como parte de Earth Beats, una iniciativa internacional y colaborativa que reúne a 18 medios de comunicación de todo el mundo para centrarse en soluciones a los desechos y la contaminación.