¿Por qué es bueno elegir una escuela inclusiva para nuestros hijos?
"La educación inclusiva enriquece a todos los alumnos y mejora la calidad educativa", asegura el psicólogo y pedagogo español Emilio Ruiz, quien recientemente fue invitado por la Asociación Síndrome de Down Argentina (ASDRA) y por Down Is Up a nuestro país para dictar cursos para directivos, maestros y padres. De acuerdo a su vasta experiencia, un maestro que recibe a un niño "diferente" en su aula, tiene que cambiar su metodología didáctica para adaptarse a ese chico y, gracias a ello, todos los alumnos se ven beneficiados. "Los chicos diferentes mejoran la escuela porque no permiten que los maestros se duerman en los laureles de la rutina pedagógica", afirma.
Para este reconocido español, otro de los mayores beneficios de la educación inclusiva es que "mejora a los compañeros" porque aprenden a desarrollar determinadas actitudes que de otra manera no incorporarían.
Por otro lado, "si quieres triunfar tienes que aprender a relacionarte con todo tipo de personas", enfatiza Ruiz. Es por ello, según él, que las grandes universidades del mundo están recibiendo gente cada vez más variada. "Lo hacen porque entienden que los grandes empresarios del futuro van a tener que convivir con gente de muchos entornos", argumenta.
Los dos factores que Ruiz reconoce como clave para que la inclusión en la escuela sea exitosa son la actitud y la aptitud. "No es suficiente con aceptar al niño dentro de la escuela y brindarle cariño, también hay que estar capacitado para enseñarle".
La "ilusión", es decir, las ganas del docente, es otra de las claves. "Si a mí me preguntan qué prefiero: o una maestra con 30 años de experiencia que ya no tiene ilusión u otra docente sin tanta experiencia pero con ilusión, me quedo con esta última", reflexiona este apasionado de la inclusión especializado en síndrome de Down.
En esta misma línea José María Tomé, pedagogo argentino especialista en educación inclusiva, interpela: "A veces escuchamos a los educadores primero decir ‘pero no tengo un baño, no tengo recursos, no tengo el pizarrón’. La primera pregunta para ser inclusivo es ¿tenés la actitud? ¿tenés las ganas? Si yo pienso que mi alumno no va aprender, no va aprender", concluye.
Tomé realiza capacitaciones a docentes de todo el país y suele preguntarles "¿quién se formó en cuestiones teóricas de enseñanza referidas a diversidad?". Los brazos que se levantan son muy pocos, cuenta este doctor en educación que lleva escritos varios libros sobre la temática. "Por eso cuando hablamos de educación inclusiva mucha gente se asusta, en verdad lo que no se conoce, asusta y da miedo", opina.
Asimismo Ruiz explica que cuando llega un niño con discapacidad al aula muchas veces sucede que el maestro está desconcertado. "Es que no estamos preparados, se suele escuchar". Para él, ello de ninguna manera puede ser un fundamento para no hacerse cargo. "La formación es una obligación docente. Si eres docente y te llega un niño con síndrome de Down tendrás que trabajar. ¿Quién prepara a los padres?", reflexiona Ruiz. Y agrega: "Quien se atreva a enseñar nunca debe dejar de aprender. Si el maestro dice ´no conozco el tema´ pues bien, empieza a conocerlo porque tienes un alumno en clase".
Asimismo destaca que hoy existen muchísimas posibilidades para capacitarse. "Recomiendo que se formen grupos de docentes profundizando en el tema, leyendo libros juntos, compartiendo metodologías y experiencias, entrando uno en el aula del otro, haciendo docencia compartida, apoyándose mutuamente".
En un video recientemente publicado en Youtube, Ruiz ofrece claves para una inclusión exitosa. Si bien las charlas se enfocan en su especialidad (síndrome de Down) los conceptos y recomendaciones se pueden extrapolar a cualquier otra dificultad o discapacidad.
Ruiz recomienda que las escuelas no intenten hacer todos los cambios juntos sino "pocas cosas, bien hechas y compartidas por todos" porque "si cambias todo y la gente no cree, no se sostiene y no sirve. Los pequeños cambios del día a día, mantenidos en el tiempo, transforman la escuela", sostiene.
"Padres y maestros están condenados a entenderse", afirma. Por ello recomienda el trabajo en equipo y la humildad del docente para escuchar a los padres dado que "son los padres los que mejor conocen a sus hijos y más saben sobre su dificultad".
Dónde denunciar
Toda persona que se enfrente a alguna de estas u otras trabas puede presentar un reclamo ante el Ministerio de Educación de su provincia y realizar la denuncia en el Inadi: 0800-999-2345 o en la línea nacional Convivencia: 0800-222-1197
Para docentes
Recientemente, el Ministerio de Educación junto a Unicef, lanzó cuadernillos con recursos pedagógicos para la inclusión en: www.argentina.gob.ar/noticias/ya-estan-disponibles-los-materiales-educativos-para-fortalecer-la-inclusion-en-las-escuelas?4
Más información
A partir del 24 de junio, ACIJ y Grupo Artículo 24 tendrán disponible un sitio con información sobre las herramientas que pueden utilizarse para reclamar el efectivo cumplimiento del derecho a la educación inclusiva www.porunaeducacioninclusiva.org
Desafíos para la inclusión en el aula común y La gestión en el aula, por Emilio Ruiz