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Ola de calor: cómo ayudar a las personas en situación de calle durante las altas temperaturas

Desde acercarles botellas con agua congelada hasta ofrecerles un par de ojotas o un desodorante; qué podemos hacer en estos días por quienes deben atravesar estas jornadas sin resguardo

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LA NACIONLorena Oliva
Calor en Buenos Aires, altas temperaturas
Calor en Buenos Aires, altas temperaturasSilvana Colombo

Aunque suele asociarse con vacaciones, descanso y relax, el verano también puede ser una maldición si no se cuenta con los recursos adecuados para hacerle frente. Tal es el caso de las personas en situación de calle, expuestas casi sin reparos a las altas temperaturas.

En la ciudad de Buenos Aires, según el relevamiento más reciente del Gobierno porteño, actualmente unas 2573 personas viven en estas condiciones. Sin embargo, algunas organizaciones sociales que trabajan la temática estiman que el número real superaría ampliamente el informado por las autoridades (de hecho, en 2019 contabilizaban más de 7200). Ante el comienzo de una ola de calor que permanecerá toda la semana y promete superar la barrera de los cuarenta grados, es mucho lo que podemos hacer para que esta población transite estos días de una manera un poco más llevadera.

“Las personas en situación de calle, muchas veces, no cuentan ni con lo básico para hacerle frente al calor. A veces no tienen ni siquiera una canilla a mano. Mucho menos la posibilidad de encender un ventilador. Lo fundamental es empezar pensando qué necesitamos nosotros para hacer frente a las altas temperaturas. La respuesta es comidas frescas, bebidas frías, pero también elementos de higiene y ropa fresca. De ahí, ver qué está a nuestro alcance para que ellos también cuenten con estas cosas”, recomienda Mariela Fumarola, fundadora de Caminos Solidarios, una organización que trabaja con esta población haciendo recorridas nocturnas y brindándoles todo tipo de asistencia.

Discriminación y falta de comida

Entre tantas personas, Mariela y su equipo asisten a Gastón Jiménez, quien accede a contar de primera mano cómo es pasar el verano en la Ciudad. “El principal problema que tenemos es que muchos comedores cierran en enero, así que, justo cuando todos te dicen que busques un lugar fresco y te quedes a la sombra, a nosotros nos toca hacer grandes distancias para conseguir un plato de comida. Si logramos ducharnos en algún lugar, eso es a la mañana, pero después es difícil refrescarnos en el día, a no ser que te mojes con un balde o algo así”, explica.

Jiménez, de 48 años, agrega que algunas personas intentan refugiarse en los shoppings, que cuentan con aire acondicionado. “Pero te echan. La gente nos discrimina mucho. Es difícil que los bares te den agua. O si buscás un lugar fresco en donde dormir, por ejemplo, en la entrada de algún edificio, a la mañana temprano, los porteros te dicen que te vayas de mala manera porque tienen que baldear y te amenazan con mojarte”, se lamenta el hombre, quien suele parar por Palermo porque, asegura, “es un barrio bastante fresco”.

Fuentes del Gobierno de la ciudad de Buenos Aires informaron que, cada vez que el termómetro supera los 32 grados, las intervenciones del programa Buenos Aires Presente (BAP), que asiste a personas y familias en situación de riesgo social, incluyen el reparto de botellas de agua y barras de cereal. Asimismo, remarcaron la importancia de que la ciudadanía informe si ve a una persona en situación de calle durante las jornadas de alta temperatura, comunicándose al 108.

A continuación, te acercamos algunas otras acciones orientadas a las personas en situación de calle que pueden prevenir golpes de calor y aliviar el agobio de las altas temperaturas.

. Brindarles botellas con agua fresca y también congelada, para que cuenten con algo frío a lo largo de la jornada.

. Acercarles comida fresca.

. Ofrecerles ropa y calzado de verano, como ojotas, remeras, musculosas, shorts, etc.

. Tener en cuenta que, durante las jornadas de calor, es fundamental una buena higiene para evitar malos olores. Por eso, las personas que viven en la calle, sin posibilidades de darse una ducha cuando lo deseen, siempre necesitan desodorantes, toallitas húmedas, jabones, talcos, etc.

Algunas organizaciones que trabajan con las personas en situación de calle:

Por Lorena Oliva
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