La historia de Kevin: el aislamiento, el bajo nivel educativo y la falta de recursos, los obstáculos para llegar a la universidad
La periodista Micaela Urdinez estuvo en el programa MasInfo charlando sobre las barreras que Kevin Díaz, y el resto de los jóvenes de las comunidades originarias, enfrentan para poder estudiar
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“Kevin es un chico de 19 años que vive en la comunidad de La Puntana, en la zona de Santa Victoria Este. Está terminando la secundaria este año y tiene muchísimas ganas de salir de la comunidad pero tiene muchos obstáculos a la hora de pensar en poder seguir los estudios universitarios”, explicó Micaela Urdinez, periodista responsable del proyecto Hambre de Futuro, el sábado pasado en el programa MásInfo, emitido en LN +.
El primero es el aislamiento, ya que La Puntana no tiene señal de teléfono, ni Internet ni tiene transporte público. “Para entrar y para salir la única opción es hacer dedo. Con la cual la posibilidad de que él pueda seguir en su comunidad para estudiar una carrera, es imposible”, agregó Urdinez.
Parte del proyecto para ayudar a Kevin y a otros jóvenes como él, es poner una antena de Wifi satelital que sirva como punto de encuentro y conectividad comunitario. Lo está llevando adelante un grupo de voluntarios que trabajan con los frailes franciscanos de la zona.
“¿Lo más cercano que tienen qué es?”, preguntó Viviana Valles, como para terminar de entender la gravedad del problema. “Lo más cercano es Santa Victoria Este, que queda a 40 kilómetros. Son 20 de tierra y cuando llueve, se hacen intransitables”, explicó Urdinez, para quien la historia de Kevin es una muy linda y muy esperanzadora en términos de la importancia que ellos le dan al estudio y a la necesidad de integrarse.
Otra de las dificultades es que el nivel educativo que tienen estos chicos cuando terminan la secundaria es muy bajo. “Apenas saber leer y escribir. Son chicos que hablan wichi permanentemente en su casa, en su familia y en su comunidad. Con lo cual el castellano lo hablan solo en la escuela y de a ratos”, relató Urdinez. De hecho, Kevin recién se animó a hablar el castellano este año porque le daba vergüenza equivocarse.
Sobre esta brecha educativa, Daniel Santa Cruz agregó que es algo que sucede en todo el país: “”Le pasa a chicos de distintas ciudades que terminan el secundario y les cuesta adaptarse a las exigencias de la universidad pública, imagínate a estos chicos”.
El sueño de Kevin es el sueño de toda su familia y su comunidad. Ellos son los primeros en abogar por tener profesionales wichi que después defiendan su cultura y sus derechos. “La educación es la única herramienta que puede romper este círculo de pobreza y el aislamiento de estas comunidades. Sus padres, sus hermanos y la comunidad apoyan muchísimo que los jóvenes quieran salir a estudiar porque lo ven como una manera de después volver con mejores herramientas para después ayudar a la propia comunidad”, explica Urdinez.
Para cerrar, Valles reflexionó sobre el aporte que cada uno de nosotros puede hacer para ayudar a Kevin y a otros jóvenes como él: “Qué rol importante podemos tener nosotros para ayudar y no matarles esa ilusión, para que no se queden solamente con lo que conocen sino que al menos puedan conocer otra cosa y decidir”.
COMO AYUDAR
Las personas que quieran ayudar a Kevin en su sueño de ir a la universidad pueden:
- Comunicarse con Javier Saavedra para saber más sobre Kevin y su realidad al +54 9 3875 77-7756.
- Donar en esta cuenta:
Empresa: ORDEN DE FRAILES M V SAN FRANC
CUIT: 30669128807
Banco: Santander
Cuenta: CC$ 154-009795/6
CBU: 0720154320000000979568
Alias: MISION.AGUARAY.TERE